Bad Blood [Cregan Stark ]

Capítulo 8

Criston fue al campamento y el príncipe Aemond insistió en querer ir con él, Criston le tuvo que prometer a la reina que cuidaría del príncipe.

Atravesaron la ciudad hasta el campamento. Ya era de noche y habían encendido una fogata y fuera de las carpas hacia faroles que colgaban, la gente los miró de reojo mientras cabalgaban.

No había niños, solo jóvenes mayores y adultos. Criston también notó unas cuantas criaturas pequeñas, de ojos saltones y orejas grandes.

Los dos bajaron de los caballos y un hombre gigante se acercó a ellos.

—¿Los invitados de Emma? — preguntó con amabilidad el gigante.

—Así es — contestó Criston — Soy Ser Criston Cole y él es el príncipe Aemond — señaló a su escudero.

—Alteza — el gigante inclinó su cabeza hacia el príncipe — Mi nombre es Rubeus Hagrid, pero llámenme Hagrid. Emma ya viene, está haciendo dormir al bebé.

—¿Tiene un bebé? — preguntó anonadado Criston. ¿Su hija era madre?

—Es su ahijado, tiene una parte de la custodia junto con la abuela del bebé — sonrió el gigante — Emma adora al niño. Permítanme dejar a sus caballos atados a un árbol.

El señor Hagrid tomó las riendas de ambos caballos y los llevó hacia los árboles. Criston se quedó parado junto al príncipe, un grupo de pelirrojos y una rubia muy embarazada lo vieron fijamente, sobre todo la chica pelirroja que tenía el ceño fruncido.

Emma llegó poco después, con el cabello atado en un moño destronado y luciendo ropa extraña, un vestido de tela ligera en color anaranjado, con mangas largas acampanadas, Criston se escandalizó por el escote del vestido que dejaba ver un largo collar de oro con una especie de flor como dije. Sobre sus hombros llevaba un chal blanco.

—Hola, si vinieron — sonrió Emma con las manos en las caderas, luego vio al príncipe y se reverenció — Príncipe Aemond.

—Lady Potter — Aemond inclinó levemente su cabeza.

—No me diga Lady Potter, esa era mi abuela Euphemia — rio ella — Solo llámame Emma.

Emma los guio hasta donde estaban cuatro largas mesas de madera, los dejó sentados mientras ayudaba a las mujeres a servir la comida junto a esas extrañas criaturas.

—Son elfos domésticos — dijo la chica de cabello rubio y grandes ojos azules, sentada a lado del príncipe — La mayoría de ellos murieron en el apocalipsis, salvando a magos, y algunos vinieron con nosotros. ¡Hola Kreacher!

Un elfo arrugado y malhumorado paso a lado de ellos, murmurando algo de "Inmundos"

—¿Esa cosa nos insultó? — dijo el príncipe señalando al elfo.

—Oh, así es Kreacher — Emma llegó y colocó dos copas tazas frente a Criston y Aemond — Odia a todo el mundo. — Emma tomó una jarra cerca. — ¿Quieren vino?

—Si, por favor — Criston tomó la taza, al simple tacto era de material que Criston jamás había visto.

Emma les sirvio a los dos, una señora pelirroja regordeta caminó por detrás de Emma, colocó sus dos manos sobre los hombros de ella y le dijo : —Emma querida, siéntate atiende a tus invitados.

—Pero yo quiero ayudarles, señora Weasley— Emma miró encima de su hombro a la pelirroja.

–-Sentada Emma.

Emma le sonrió y se sentó frente a ellos dos. Luego llegó Black y se sentó a la derecha de Emma y la señorita Granger a su izquierda, seguida del señor Weasley.