Babies

22

-No vuelvas a ocultarme cosas.- Reprendí a mi madre ni bien abrió la puerta de la que antiguamente fue mi casa.

-¿De qué hablas hijo?- Preguntó mientras nos dejaba ingresar.

-De ella.- Señalé a T/N que cargaba a Jeongin en brazos y le hacía señas a los niños para que entrasen.

-Sigo sin entenderte.- Volvió a fingir demencia.

-Ya lo sabe, señora Bahng.- Dijo T/N y yo la miré con molestia cruzando los brazos sobre mi pecho.

-Oh eso... bueno yo...- Comenzó a tartamudear nerviosa.- Lo siento hijo, debia cuidarla y protegerla de todo.

-Y yo también quiero hacer eso.- Me quejé.- Así que no vuelvas a mentirme.

-Descuida, aprovechen la noche solos y diviértanse.- Dijo casi echándonos, tan apurada que apenas nos dio tiempo de despedirnos de los niños.

-Es un caso perdido.- Suspiré y T/N rió.- Vayamos.- Le extendí mi brazo y me encaminé a la camioneta.

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Habíamos tomado de más en la cena, los dos estábamos algo pasados de copas, pero eso no nos impidió subir torpemente a la habitación donde ahora nos encontrábamos.

-Esperé esto...- Besé su cuello.- Por mucho tiempo.- Mordí un poco sin dejar marca.

-Chris...- Suspiró T/N dándome más pasó a su cuello.- Chris para.

Me detuve en seco y la observé, estaba recostada debajo de mi, a medio vestir con el cabello revuelto, las mejillas y los labios sumamente rojos y un brillo en la mirada que me derretía, la miré intrigado por su abrupta petición.

-¿Qué ocurre? ¿Hice algo mal?- Intenté calmar mi respiración y ella negó.

-Dime que no me esperaste y te negaste a estar con otras mujeres.- Pidió tomando mi mejilla.

-Mentiría si dijera que no intenté estar con otras mujeres de esta forma, pero jamás podía consolidar el acto por distintos motivos.- Dije algo apenado y lo cierto es que hubo un par de chicas con las que salí más por obligación que por gusto real, incluida Junha mi secretaria, pero jamás pude avanzar de unos besos calenturientos.

-Debería ser especial entonces, no nosotros medio borrachos.- Dijo con amor y me derretí ante su tacto.

Sin poderme resistir la besé, más que con pasión, lo hice con amor, no había dejado de ser esa dulce chica que se preocupaba por mi y por cuidarme, en especial cuando se trataba de mis sentimientos. Sin darnos cuenta nuevamente el beso había subido de tono, siendo cada vez más profundo y con más recorridas de nuestras manos por nuestros cuerpos.

-¿Estás... seguro?- Preguntó separándose brevemente de mis labios.

No contesté de forma verbal, simplemente llevé sus manos a mi pantalón para que pudiera sentir mi ya creciente bulto.

-Más que nunca mi amor.- Le dije besando todo su cuello y clavícula a lo que ella respondió apretandome más en la zona y dejándose llevar por mi.

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Mi teléfono no dejaba de vibrar y eso me tenía de malhumor, había pasado una noche maravillosa con T/N, donde después de la primera ronda le siguieron un par más. Pero ahora estaba sentado detrás de mi escritorio firmando papeles y alistando las entrevistas, además de recibir y contestar miles de mensajes de otros managers que querían entrevistas para presentar a sus artistas.

-Maldita sea la hora que decidimos abrir las audiciones.- Maldije por lo bajo mientras sobaba mis sienes.

-Señor... MinJun quiere verlo.- Junha se aproximó a mi escritorio.- ¿Se encuentra bien?