Capitulo 1: Los hijos de la Mafia.
Narra Angelo. –Simple y sencillo si no aceptan solo mátalos- dijo la voz de mi papi- no es tan difícil de entender ¿o sí?
-No señor- dijo Víctor, el ayudante numero uno de mi papi- le juro que esto saldrá bien, esas personas están muy asustadas y si trabajan bajo presión será más fácil conseguir lo que queremos.
-Bien- dijo mi papi- espero que tengas éxito, no quiero otra falla.
-Papi ¿Qué van a hacer?- le pregunte curioso de su trabajo, pues nunca eh entendido eso de su trabajo.
-Nada mi campeón- me dijo mi papi como siempre- nada, tú solo prepara tus cosas que estamos a punto de llegar a tu escuela.
-No quiero ir- le dije mientras inflaba mis mejillas- no conoceré a nadie y todos me molestaran.
-Si te molestan solo dímelo- me dijo mi papi- yo me encargare de que no lo vuelvan a hacer nunca más.
-Está bien- dije en tono más animado.
El chofer de la camioneta de mi papi se detuvo y nos aviso de que habíamos llegado a mi nueva escuela.
Mi familia y yo somos de Italia, ahí nací y crecí por mis 7 años, pero un día llego mi papi a la casa muy asustado, y todos sus trabajadores estaban ahí con esas armas de fuego que tanto miedo me daban.
Papi dijo que recogiéramos todo lo que pudiéramos y que fuera importante, después subimos a unas de las camionetas negras que tenían los vidrios oscuros y fuimos rumbo al aeropuerto.
Lo último que recuerdo fue que tomamos el avión de papi y aterrizamos en Londres y empezamos a vivir aquí.
Nunca entendí porque tuvimos que cambiarnos de casa así tan repentinamente, pero cada vez que le quiero preguntar a papi el me dice que cuando sea más grande lo entenderé.
Al salir de la camioneta, papi me llevo tomado de la mano rumbo a la entrada de mi escuela y fuimos a un lugar que parecía ser el despacho de la directora.
Mientras caminábamos veía muchos niños, algunos grandes y otros pequeños, también veía muchos adultos, pero a diferencia de los niños ellos veían a mi papi con miedo, como todo el mundo, no entiendo porque siempre hacen eso, mi papi es el mejor del mundo, el siempre me compra juguetes y siempre me lleva al cine cuando hay una película nueva y siempre me la compra al salir en VHS.
Nunca entenderé porque siempre ven así a mi papi.
Niall. Era muy aburrido llegar 1 hora antes a la escuela, no había nadie con quien platicar o con quien charlar. Mi papá siempre me deja muy temprano porque el siempre que va a su trabajo misterioso pasa por aquí y dice que no quiere dar 2 vueltas.
Pasaron los minutos y poco a poco empezó a llegar más compañeros de clase, aunque la verdad ninguno me cae bien, pues solo me quieren por mis juguetes y porque por alguna extraña razón a mi si me dejan los maestros traer juguetes y a ellos no. Creo que es porque mi papá llego a un acuerdo con ellos.
La señorita Rosa llego al salón de clases y todos los alumnos comenzaron a sentarse en su lugar, yo me senté en mi lugar de siempre que estaba en medio de la clase, deje mi mochila en el banco de adelante, pues ese banco siempre estaba solo ya que nunca llego nadie para ocuparlo y la profesora empezó con la clase.
-Niños antes de comenzar la clase quiero presentarle a su nuevo compañero- dijo la señorita Rosa- el viene desde Italia, quiero que le den una cálida bienvenida a Angelo Morelli.
Después de esas palabras todos esperábamos ver a un niño entrar o algo, pero la puerta nunca se abrió.
La señorita Rosa abrió la puerta y empezó a hablar con un niño al cual no podía ver pues aun no había entrado.
La señorita Rosa decía cosas sobre no tener miedo, y que es normal por ser su primer día, entre tantas palaras la señorita Rosa logro que el chico entrara.
Era un chico muy bajo de estatura, tenía su uniforme de la escuela y su mochila de Freddy Fazbear, tenía su cabello castaño y algo largo, sus ojos eran de un color miel y su piel era color caramelo, pero su mirada siempre estaba en el suelo, al parecer estaba muy nervioso.
-Bien Angelo tal vez no quieras presentarte en este momento- dijo la señorita Rosa a lo que el niño nuevo rápidamente asintió con su cabeza- está bien puedes tomar asiento y después te presentaras. El único asiento que tenemos disponible es el que está delante de Niall.
La señorita Rosa me señalo a mí y el niño nuevo comenzó a caminar, cuando estuvo frente al banco que estaba delante de mí se quedo ahí parado sin sentarse. Yo me le quede mirando por unos segundos hasta que quite mi mochila y el tomo asiento.
Las clases pasaron de una por una, hasta que por fin dio la hora del almuerzo. Todos los otros niños salieron corriendo del salón, quedando solo el niño nuevo y yo.
Yo comencé a sacar mi almuerzo, que era un sándwich, una rebanada de pizza de Freddy's Fazbear Pizza y un cupcake del mismo lugar junto con mi leche. El niño nuevo solo saco una manzana de su mochila y un jugo de manzana también.
-¿Te gusta Freddy Fazbear?- le pregunte tratando de hacer conversación.
El solo asintió con su cabeza y sin emitir ningún sonido de su boca.
-A mí también me encanta- le dije- voy siempre que puedo, me encanta ver a los animatronicos cantar, mi papá ya reservo una fecha para festejar mi próximo cumpleaños. Por cierto ¿Qué edad tienes?
-Tengo 7- me dijo en tono muy bajo que apenas pude escuchar.
-Qué raro- le dije- normalmente los de 7 años están en segundo, pero tus estas en tercero.
-Me salte un año- me dijo en el mismo tono bajo- mis antiguos maestros dijeron que podía hacerlo.
-Entonces deber ser inteligente- le dije- ¿Quieres acompañarme a comer? Así nos conocemos mejor.
El solo se me quedo mirando a los ojos y después se puso algo rojo eh hiso la misma expresión que hacen en las telenovelas de mi mamá, creo que se llama sonrojo.
-¿Aceptas?- le pregunte.
El solo volvió a asentir con la cabeza y tomo su almuerzo.
-Eres de pocas palabras- le dije- tendré que hacer que hables mas. Si no me será imposible conocerte.
Ambos salimos rumbo al patio para comer nuestros almuerzos. En el camino podía ver como varios profesores se nos quedaban viendo con cara de susto como en las películas de horror, era una cara parecida a la que hacían cuando veían a mi papá, nunca entendí porque hacían esa clase de rostro de horror.
ESTÁS LEYENDO
Stockholm Syndrome. Niall Horan. Novela Gay.
RomanceÁngelo Moreli y Niall Horan al conocerse no tardan en convertirse en los mejores amigos del mundo, hacen todo juntos y poco a poco un pequeño e inocente sentimiento brota en ellos, pero el problema es que sus padres son los jefes de 2 de las mafias...