PATRONUS (Remus Lupin)

18

Besos
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CAPITULO 18

"I run my fingers through your hair
And watch the lights go wild
Just keep on keeping your eyes on me
It's just wrong enough to make it feel right."

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Desde aquella noche donde retomaron la investigación sobre Black en la habitación de Remus, el chico no ha vuelto a ver el nombre de Peter en el mapa. Elizabeth ha estado dudando los últimos días si realmente vio el nombre o fue su imaginación la que le jugó una mala pasada. Ella misma recuerda la escena del crimen, donde encontraron a Black parado solo sobre un enorme cráter en medio de una calle de Londres, solo había sangre, fuego y destrucción. Una vez detenido al asesino, los magos forenses solo encontraron uno de los dedos de Peter en medio de los escombros.

La escena se repite una y otra vez, ahora es ella en un duelo con Sirius, son ella y tres aurores más contra el Griffyndor, pero uno a uno los va eliminando hasta que solo quedaron ellos dos, frente a frente. Ha sido el duelo más difícil de su vida, recuerda que lo único que la hizo sentirse más segura de sí misma, capaz de ganar el combate, es que menos de dos años atrás había vencido al joven en Hogwarts, el hecho de que ambos hubieran elegido caminos muy distintos, el bien y el mal, no significa que sus capacidades habían cambiado. Si lo había vencido una vez, lo podría volver a hacer. Sin ayuda de nadie más, Elizabeth ganó el duelo y prosiguió a entregar a Black a las autoridades. No era ni el primero ni el ultimo mortifago que caía ante sus manos, pero jamás olvidaría la mirada oscura de Black sobre la de ella antes de que lo entregara.

–¿Qué pasa? –Remus deja el mapa de Hogwarts en el escritorio antes de ponerse de pie y estirar un poco la espalda–. ¿Elizabeth?

La chica regresa a la realidad aún con la mirada de Black resonando en su memoria.

–¿Dices que Black vivió un tiempo con los Potter?

Remus suelta un suspiro y deja caer su peso en el escritorio, recargándose en él y poniendo ambas palmas a sus costados.

–Si, dejo a los Black, lo desheredaron por ello y fue a vivir con James el último año.

Elizabeth asiente con la cabeza, entendiendo, pero al mismo tiempo sin entender. Cada vez que cree encontrar una nueva pieza de información todo de vuelve más complicado.

–Remus, ¿tu conociste a su hermano?

–¿A Regulus? –Elizabeth asiente con la cabeza–. Claro, estuvo en Hogwarts, solo era unos años menor.

–Sali con él un tiempo –Admite la chica, recordando unos días en Hogsmade a inicios de su sexto año en Hogwarts. Remus alza una ceja–. No paso mucho –Explica ella con una sonrisa y se acerca unos pasos hacia el para hablar en voz baja–. Pero esas dos semanas fueron suficiente para saber el tipo de influencia que tenía la familia Black sobre él, no entiendo porque Sirius salió de su hogar de la forma más dramática solo para después convertirse en el aliado más poderoso de Voldemort.

Remus la mira.

Realmente la mira.

Son pocas las personas que dicen el nombre del señor tenebroso en voz alta a pesar de todos estos años, y por supuesto, ella es una de esas personas. No puede evitarlo y sonríe de lado, no se imagina la actitud de la chica en aquel tiempo, en medio de la guerra mágica. Siempre agradeció que Dumbledore no la considerara para la Orden del Fenix, no se sentía capaz de convivir con ella en un ambiente tan complicado como esa guerra, no después de que en último año ella solía ponerlo nervioso con solo mirarlo, aunque fuera para insultarlo de todas las maneras posibles.