Ansiosa y con alegría, me senté frente a la máquina de coser. Solo quería preparar mi siguiente vestido, y más que feliz, la encendí para empezar y Joey con su taza de café, se sentó tras de mí. Con anhelos y cariño me vio coser el que sería mi nuevo vestido.
Los dos antojados con comer pizza de piña, nos miramos y nos reímos.
_ Si quieres, yo la pido.
_ Ok, pero ¿En serio la quieres con piña? – le sonreí.
_ Si. Creo que debe ser muy sabrosa ¿Tú no quieres?
_ Sí, claro que si, aunque igual pienso que el sabor nos puede desagradar un poco.
_ Jejeje. No lo creo. Probémosla. – me sonrió.
_ De acuerdo, hermosa...
Tomé el celular y marqué al número de las pizzas...
Joey me vio hablar y pedir la pizza, sabor a piña, y esbozó una dulce sonrisa. Luego, me observó, y yo concentrada en nuestro pedido, miró una vez más los detalles de mi vestido y me miró perdidamente enamorado.
Los dos más que ansiosos por probar la tan esperada pizza, sabor a piña, nos sonreímos y Joey partió los primeros dos trozos.
Sentados frente a frente, dimos la primera mordida a nuestros trozos, y al cabo, nos miramos con asombro, pues la pizza con trozos de piña sabia increíble.
_ Está muy sabrosa.
_ Si, totalmente ¿Ves? Te lo dije. – Joey soltó una carcajada.
_ Si, tenías razón. Esta pizza está muy deliciosa.
_ Y lo es más porque la estamos comiendo juntos. – me sonrió enternecido y tomó mi mano.
_ Es cierto. Lo está aún más sabrosa por eso. Te amo, mi hermosa.
_ Y yo te amo a ti, mi Joey.
Volvió a sonreírme y luego seguimos comiendo de la pizza.
De pronto, Joey volvió a mirarme.
_ Cariño ¿Puedo preguntarte algo?
_ Por supuesto, amor. Lo que quieras.
_ Ya han pasado varias semanas desde que llegaste aquí a mi casa y quería saber si tus papás te han llamado. – aquello me tensó un poco y recordé la llamada, que mi madre, me había hecho por la mañana.
_... Si, Joey. Mi madre me llamó hoy en la mañana.
_ ¿Y qué te dijo? ¿Aún sigue molesta por haberte venido a vivir aquí conmigo?
_ Si. De hecho, lo único que quiere es que yo vuelva con papá y con ella.
_ ¿Y le contaste de nosotros? De que estamos juntos.
_ No. no quise decírselo. A ellos no les importa. Soy una mujer adulta y sé tomar perfectamente mis decisiones. – me sonrió con ternura.
_ Lo sé.
_ Y haberme venido a vivir, aquí contigo, fue la mejor decisión que pude haber tomado. – más me sonrió y me abrazó.
_ Si, la mejor. Te amo.
_ Yo también te amo, mi Joey.
Los dos nos sonreímos y nos tomamos de la mano.
Más que molesta, Cristian la miró.
_ ¿Qué fue lo que le dijo, Constanza? ¿Cómo está ella?
_ Esa mujer es una mala agradecida. Gracias a su insensatez, seremos el hazme reír de todo el condominio.
_ ¿Es qué a caso no quiere ni pensar en volver aquí, con ustedes?
_ Por desgracia no. ese sujeto la tiene idiotizada por completo. No me quiero ni imaginar todas las adversidades que ya debe haberle hecho. – Cristian apretó los puños.
_ Infeliz. Mal nacido.
_ No me importa quién sea ese sujeto. Le haré pagar caro por haberse llevado a nuestra hija con él, y Constanza, también las pagará muy caro por haber manchado el apellido de nuestra familia y por dejarnos en ridículo frente a todos nuestros vecinos.
_ Ese tonto se las tendrá que ver conmigo. No le perdonaré nunca que la haya alejado de mí.
_ No te preocupes por eso. Yo te la prometí a ti y así será. Tú te casarás con Constanza.
_ Es lo que más quiero, señora Emilia ¿No recuerda el día que conocí a Constanza? Desde ese momento, me juré a mi mismo que la haría mi mujer.
_ Así es. Fue cuando mi esposo conoció a tu padre, el empresario y más rico en toda la ciudad. A los tres nos interesó la idea que sí ustedes se casaran, ambas familias, unidas, sería lo mejor que nos podría pasar. – Cristian sonrió.
_ Lo mejor. Por eso tiene que convencer, sea como sea, que Constanza recapacite y vuelva aquí. Con nadie más que conmigo, y con ustedes claro, será feliz.
_ Lo haremos todos juntos. Nosotros y tú la traeremos de regreso.
ESTÁS LEYENDO
"Mi Joey" (Fanfic Joey Tempest)
FanfictionConstanza, feliz e ilusionada, porque publicarían su primer libro, que estaba dedicado a su cantante y amor de toda de su vida, Joey Tempest, ignoraba que él lo leería y furioso porque ella había escrito de él, sin su consentimiento, decide ponerle...