A la mañana siguiente.
Dormida junto a él, Joey me observaba fijamente. Con cariño acarició mi rostro.
<< Incluso así durmiendo luce preciosa. >>
<< Mi vida. >>
<< Mi preciosa, Constanza. >>
De pronto, sentí un pequeño dolor y solté un dulce gemido. Él me miró.
— ¡Ay! ¡Ay!
—Shuuu ¿Qué pasa, mi amor?
Abrí los ojos y mi corazón se alivió al ver sus apasionados ojos celestes.
—Eres tú. Estás aquí, amor mío — me sonrió.
—Te dije que me iba a quedar toda la noche aquí contigo, hermosa —le sonreí con mimo.
— ¿Y dormiste bien?
—Hacía mucho que no dormía tan bien como anoche. Extrañaba hacerlo a tu lado.
—Mi vida.
—Te amo.
—Oh — exclamé, cerré los ojos y él comenzó a besarme.
Vistiéndome, él estaba sentado en mi cama, y me miraba hacerlo; me puse un overol, el que yo misma me había fabricado y me giré a mirar a Joey. Le sonreí con pudor.
Él me sonrió.
— ¿Por qué te avergüenzas?
—Es que estoy enorme.
—No. Estás hermosa.
Lo miré perdidamente y él se colocó de pie y se me acercó; el corazón se me aceleró y mi respiración se entre cortó. El pudo sentirla, muy cerca de sus labios, y me sonrió intenso.
—No sabes los deseos que tengo de hacerte el amor, pero le prometí a tu padre que no haríamos nada — me sentí más ruborizar y solté una carcajada.
— ¡Joey! — me vio risueño y me tomó de la cintura.
—Te adoro mi Constanza — me perdí en sus despampanantes ojos como el cielo.
—Mi amado Joey. Me tienes loca por ti.
—Jejeje.
Me abrasó con todo su ser, y los dos más que contentos y felices, nos abrazamos y sonreímos.
Después que termínanos de desayunar con mi padre, Joey me llevó de regreso a su casa...
Llegamos a y yo sentí que una de sinfín de recuerdos vinieron a mi mente. Sonreí de oreja a oreja y Joey me contempló con ternura.
—Bienvenida otra vez a tu hogar, mi hermosa. Me da tanta felicidad que estés de vuelta — me sentí emocionada.
—A mi igual, mi Joey — no pude más y lo abrasé con todo mi amor. Él me cargó en sus brazos.
—Mi vida — me dijo y yo más lo abrasé.
—Te extrañé tanto, Joey.
—Lo sé, al igual que yo a ti. Me hiciste mucha falta, mucha.
—Me da miedo pensar que esto, tú seas tan solo un sueño y que tenga que despertar.
—No, no pienses en eso. Estás aquí conmigo y así va a ser siempre — me puse a llorar.
—Mi Joey.
Escuchó mis gemidos y acarició mi espalda y cabello.
—Tranquila, ya todo pasó. Ahora estás por fin aquí conmigo y yo te cuidaré y querré siempre, mi vida. Siempre.
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"Mi Joey" (Fanfic Joey Tempest)
FanfictionConstanza, feliz e ilusionada, porque publicarían su primer libro, que estaba dedicado a su cantante y amor de toda de su vida, Joey Tempest, ignoraba que él lo leería y furioso porque ella había escrito de él, sin su consentimiento, decide ponerle...