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Narra _____ 

Entré a la casa con la maleta en la mano, tranquilamente caminé hacia el segundo piso de la casa en donde estaba mi habitación ya lista gracias a la nueva sirvienta de la casa, la cual solo estaba cinco horas al día para así ayudar a Yoon Gi. 

Me tocó salir de mi cuarto e ir a ver a Suga a su habitación, debía saber si necesitaba algo y de una vez saber cómo se sentía. 

-Señor Min. - toqué a su puerta. 

-Pasa, por favor. - dijo en voz baja. 

-¿Cómo estás? - sonreí para tratar de agradarle. 

-No me siento bien, me duele mucho la espalda. - saber que su espalda le dolía me dejaba saber que al menos si tenía sentido en algunas parte de su cuerpo que pudieron afectarse en el accidente. 

-¿Tienes alguna medicina para eso? - miré a todas partes. 

-No, cuando me da dolor solo me lanzó al suelo y ahí estoy hasta que se me quite. 

-Que difícil. - me acerqué a él para acomodar su almohada - ¿Eres alérgico a algún medicamento? 

-No, ¿Me vas a dar algo para el dolor? 

-Sí, pero tengo que ir a la farmacia, ya que no tengo nada que te pueda ayudar. 

-Ve y trae lo que sea más fuerte, en tres años solo he tenido dolor y un alivio en este momento es algo que no puedo rechazar. 

-Bien, ya vengo. - le di la espalda, pero este me detuvo con su voz gruesa. 

-Espera, ve por el dinero a mi habitación. - lo miré con compasión, no le iba a tocar el dinero que de seguro su hermana le dejó. 

-No te preocupes, lo traeré de mis ahorros. 

-Yo también tengo ahorros, están esparcidos por toda la casa. - su tranquilidad al hablar me confundía. 

-¿Qué?

-Ve a mi habitación, es la que está justo al subir las escaleras, entra en ella y debajo de la cama hay una mochila pegada al colchón, tómala y tráela hacia mí. Una cosa más, lleva una tijera para que puedas sacarla. 

-Está bien. 

Hice lo que el señor Min me ordenó, fui por una tijera a su oficina y luego subí a su habitación, la cual estaba ocupada por su ropa limpia, sus joyas y relojes, también por algunos de sus diplomas de la universidad.

Me lancé al suelo y pude ver la mochila, con la ayuda de la tijera casi vieja saqué la pesada mochila y luego bajé sin ser vista por la sirvienta al primer nivel de la casa. 

-Aquí tiene. - le pasé la mochila. 

-Mira, ten este dinero, compra los medicamentos y tráeme algo de ropa nueva, que sea de mi talla, ya que estoy mucho más delgado que antes y la que llevo me hace sentir incómodo. - puso cara de disgusto. 

-Está bien, señor Min. 

-Sé que nos tenemos que tratar con respeto, pero no me digas señor, mejor llámame por mi nombre, con eso basta. 

-Bien, entonces ya vuelvo. 

Tomé un taxi hasta una de las farmacias más cercanas de la casa, en esta compré pastillas para el dolor muscular, también varios ungüentos y parches con lidocaína que se aplica sobre la piel, así estaría mejor hasta que el proceso con su doctor comenzara. 

Cerca de la farmacia estaba la tienda de ropa que quería visitar, corrí a la prisa y estando dentro tomé un carrito de compras y comencé a elegir lo que pensaba que era necesario para Yoon Gi. 

-Pantalones. - tomé cuatro de diferentes estilos y colores - Camisetas, calcetines , ropa interior, pijamas, perfume, abrigos y... - revisé una vez más la lista que había hecho en la casa con el tamaño que calzaba, aunque no pudiera caminar tenía que usar zapatos. 

Regresé a la casa casi al anochecer, rápidamente me lavé las manos y fui a la habitación de Yoon Gi para atenderlo.

-Ya estoy en casa. - él asintió y nuevamente puso cara de dolor - Ten, son las pastillas para el dolor. - le pasé las pastillas y un vaso con agua.

-¡Gracias! - me quedé observando hasta que se tomó las dos pastillas.

-Tengo que aplicar el medicamento en el lugar que te duele, ¿Me permites hacerlo?

-Hazlo, hazlo rápido. - cerró sus ojos con fuerza.

-Tranquilo, solo relájate y verás que pronto el dolor se irá.

Yoon Gi se quedó dormido un rato más tarde, aproveché el tiempo y comencé a anotar la hora en la que tomó sus medicamentos y el plan que debía seguir para calmar su dolor.
Debía ser precisa y constante para que el dolor no regresara tan rápido, también para que llevara una vida normal en medio de su condición.

En medio de la madrugada, salí de la habitación y llegué hasta el pasillo en dónde se encontraba Yoon Gi durmiendo.
Jamás había visto a una persona sufrir tanto como lo vi esa tarde, por esa razón estaba ahí parada para saber si estaba bien o necesitaba algo más.

-¿Puedes venir? - preguntó bajito.

-Aquí estoy para ayudarte, ¿Qué necesitás? - me acerqué a él.

-Tengo sed, ¿Me das un poco de agua? - asentí y le pasé su vaso.

-¿Tienes dolor? - negó con la cabeza - ¡Qué bueno!

-¿Qué hacías ahí parada? Me despertó tu mirada, la podía sentir sobre mí.

-Es que no podía dormir... - bajé la cabeza - Me sentí tan mal al verte sufrir esta tarde, que por eso estoy al pendiente por si necesitas los medicamentos.

-No sabes lo bien que me siento, de verdad te lo agradezco. - sonrió por primera vez.

-Es un alivio, espero verte bien hasta el final. - le devolví la sonrisa.

...

Contigo Hasta El Fin (Suga-BTS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora