Contigo Hasta El Fin (Suga-BTS)

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Narrador omnisciente

______ entró a la casa nuevamente y continuó trabajando hasta que Yoon Gi la mandó a llamar con Min Hee. ______ sabía que iban a suceder cambios, ya que Min Hee le había avisado que hablaría con el jefe.

-Chicas, las reuní para dejarles saber el nuevo horario que tendrán, lo que van a hacer y el pago que van a tener desde la próxima semana en adelante.

-¿Cambios? Yo soy enfermera, sabes que debo cuidar de ti. - ________ se sintió frustrada.

-¿Me puedes dejar hablar? - Yoon Gi le habló a ______ con firmeza - Min Hee se quedará en la casa de ahora en adelante, como ella es quien limpia y lo hace todo, es conveniente que esté aquí todo el tiempo. _______, al ser tú mi enfermera, no tienes que estar aquí todo el tiempo, sólo puedes venir a darme los medicamentos, me ayudas en la ducha y luego te podrás ir, con este tipo de trabajo te ganarías solo un veinticinco por ciento de lo que te has ganado en estas semanas.

-Está bien. - _____ no puso resistencia y como entró a esa casa, así mismo salió.

_______ llegó al lugar en dónde vivió por muchos años mientras era estudiante, en vez de entrar al que fue su apartamento, se acercó a la puerta de su vecina y tocó varias veces antes de que ella saliera a recibirla.

-¿Qué haces aquí a esta hora?

-Me acaban de modificar el horario en el trabajo y pues me quedé en la calle. - ________ comenzó a llorar delante de su vecina.

-Cálmate, no estás en la calle, aquí cabemos las dos. - ambas chicas entraron al pequeño apartamento.

Luego de unas horas allí, ______ y su vecina se sentaron juntas en la mesa para dialogar un poco sobre el trabajo de _______.

-¿Cómo fue que te echaron así a la calle?

-Una sirvienta se ganó a mi jefe y ahora ella lo hace todo, incluso hasta lo baja de la cama, le da la comida y muchas cosas más. 

-Ay _____, siempre está la mujer que trabaja por dinero e interés.

-Lo sé.

-______, ¿Y no tienes dinero ahorrado?

-No. Mis ahorros te los dejé para Jimin y lo que gané lo invertí en ropa que necesitaba y pagué algunas deudas para así poder ahorrar lo próximo, pero ya ves, me acabo de fastidiar.

-Deberías hablar con tu jefe, quizás te entienda y desista de su decisión.

-No, todo esto que acaba de suceder me ha desmotivado tanto que creo que voy a renunciar. - _______ estaba decepcionada.

-Calmada, no hagas eso al menos hasta tener un nuevo trabajo.

-Tienes razón, pero es que me siento tan... - alguien llamó a la puerta cuando _______ hablaba.

-Debe ser Jimin, es quien únicamente llega a esta hora a molestar.

-Iré yo, quiero verlo. - _______ se levantó de la silla y fue hasta la puerta, justamente allí estaba su hermano esperando con un cigarro en la boca - ¡Jimin!

-¿Y qué haces aquí? - su hermano la abrazó.

-Pasaron cosas en el trabajo y regresé a este lugar por un tiempo. ¿Y tú cómo estás?

-Sin dinero, ¿Tienes algo que me puedas dar?

-No tengo nada, lo que gané lo utilicé para pagar unas deudas que ya por suerte no tendré nunca más.

-Bueno, si es así, entonces me voy. - Jimin abrazo nuevamente a su hermana y se marchó.

-Que ingrato.

Narra _______

Pasé la noche en un sofá duro y frío, de vez en cuando me levantaba e iba directo a la calefacción, la cual era muy mala. Aún así sobreviví a esa noche, me preparé y luego salí a trabajar con buena cara a pesar de estar preocupada y con muchas cosas en la mente, como por ejemplo encontrar un segundo trabajo y un apartamento que pudiera pagar con lo que Yoon Gi me pagaría.

Estando frente a la casa de mi jefe, toqué el timbre varias veces seguidas para que Min Hee me abriera el portón, pero esta me gritaba desde adentro de la casa que aún no era mi hora de entrada y que debía esperar afuera.

-Ya deja de molestar y abre la puerta, no me pagarán esta hora si no trabajo. - le grité desde la calle.

-Ya cállate, los vecinos te van a oír. - la estúpida abrió la reja y me dejó pasar.

-Eres repudiable. - le dije antes de entrar a la casa.

Yoon Gi estaba dormido aún cuando llegué, con suavidad acaricié su cabello y lo llamé por su nombre, este despertó y con una sonrisa me dio los buenos días.

-¿Cómo te sientes hoy? - pregunté.

-Me duelen las piernas, creo que es por el frío.

-Puede ser, deberías abrigarte más. - le acerqué su silla de ruedas.

-¿No dormiste bien anoche? Tienes ojeras, nunca te las había visto.

-Oh, sí dormí, solo que no estaba cómodo el sofá de mi amiga.

-¿Amiga?

-Me quedé con una amiga, ya que entregué mi apartamento cuando me mudé con usted a esta casa. Pues como sabrá, no pensé que me ibas a echar sin previo aviso. - sonreí, no le estaba reclamando nada, solo hablaba con él como lo hice durante el tiempo que viví en su casa.

-Lo siento, pero no sabía que te habías quedado sin casa al venir para acá. - bajó la cabeza - Regresa hoy mismo, a mí no me molesta que vivas aquí, pues si te dije que te fueras es porque pensé que querías irte y tener tu propia vida por otro lado.

-No voy a regresar, no es necesario, con mi amiga estaré bien hasta que encuentre un nuevo apartamento, y claro, un segundo trabajo porque con este sueldo no podré sostenerme.

-¿También te afecta que te haya bajado el sueldo?

-Sí. - me puse seria - Pero no pasa nada, vamos a comenzar el día.

...