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En la cena de esa noche, Yoon Gi nos reunió a Min Hee y a mí en el comedor, este había pedido una cena especial, la cual compartiría con nostras tranquilamente. 
Min Hee y yo estábamos sorprendidas, pues verlo tan sonriente y con semejante detalle realmente era una gran sorpresa. 

-¿Y a qué se debe esta ocasión? - Min Hee se sentó a su lado derecho y yo al izquierdo. 

-Quiero darle las gracias a ambas por lo que han hecho por mí estas semanas que llevan trabajando en mi casa. 

-¡Gracias a ti por abrirnos las puertas de tu hogar! - agradecí de corazón. 

-Lo mismo digo, gracias porque sin este trabajo no pudiera pagar la universidad ni ayudar a mi madre. - a Min Hee se le cristalizaron los ojos. 

-Tengo una sorpresa para ambas. - sacó la bolsa de regalo de la joyería - Hace días llamé a la joyería de mi amigo Nam Joon y le pedí que me hiciera este regalo para ustedes. - nos pasó las cajitas.

-¡Vaya, que bonita! - a mí me regalo una cadenita muy brillante con un corazón azul, mientras que a Min Hee le regalo una pulsera en oro con varios diamantes colgando de esta. 

-¡Muchas gracias! - ambas agradecimos. 

-Chicas, con ustedes yo estoy muy agradecido, si no fuera porque me han ayudado, de seguro estaría tirado en una esquina amargado por el dolor. - tomó nuestras manos - Las quiero mucho. 

-Nosotras a ti también.

Para mí los días comenzaron a pasar muy lentos, me levantaba cada día a ayudar a Yoon Gi, le daba las pastillas, lo ayudaba a duchar y luego me sentaba a sacar sus citas, pues me urgía que lo operaran antes de poder resolver mi problema, el cual aún no estaba resuelto. 

A dos semanas de haber ido a mi doctora, por fin  saqué tiempo y llegué al lugar en donde me realizarían por primera vez una mamografía. El proceso era indoloro, pero aun así me sentía con temor y algo avergonzada. 

El proceso terminó, la joven que me atendió se acercó antes de que me fuera y me ofreció un abrazo, el cual acepte, pues nadie más sabía lo que yo estaba pasando para poder consolarme. 

-Todo estará bien. - sonrió tan pronto nuestro abrazó se rompió - Nos vemos en dos semanas más. 

-¡Gracias! 

Aproveché el tiempo fuera de casa y llegué hasta la casa de Jessy, quien estaba llegando del trabajo justo en ese momento. 

-_____, ¿Y esa camioneta?

-Es de mi jefe. - la abracé. 

-¿Qué te trae por aquí? 

-Tengo un problema de salud y no tengo con quien hablar. - mis ojos se llenaron de lagrimas. 

-Vamos, entremos a mi casa. - entramos rápidamente - ¿Quieres algo de tomar?

-No, estoy bien así. 

-Dime qué tienes. - secó mis lagrimas con una servilleta. 

-Creo que tengo cáncer de seno. 

-¿Qué? Dime que no es cierto. 

-Qué más quisiera que fuera una mentira. 

-Tienes que ser fuerte ______, eres joven y tienes las fuerzas necesarias para sobrellevar esto. Recuerda que estoy aquí para ti y si me necesitas ahí estaré hasta el final. ¡Te quiero amiga!

-Gracias, Jessy. 

-¿Y cómo te va en la casa del señor Min?

-Me ha ido súper bien. Mira, hace dos semanas me regaló esta cadena. - le mostré la cadena.

-Que bonita.

-Sí, lo es. Oye, ¿Has visto a Jimin? - Jessy negó - Ese cabron me tiene enojada, ahora quiere dinero demás porque sabe que trabajo con un hombre millonario.

-No le des ni un solo peso, que se vaya a trabajar y coja cabeza de una buena vez.

-Hablaré con mamá, quiero que ella sepa lo que ha llegado a hacer Jimin, pues lo voy a meter a la cárcel si se mete con Yoon Gi. No puedo permitir que me traiga problemas a mi lugar de trabajo, eso me puede afectar en el futuro.

-Haz lo que tengas que hacer.

Caída la tarde, llegué a casa con las cosas necesarias para hacer los dulces que le había prometido a Yoon Gi, quién no estaba por ningún lado cuando entre a la casa.

-¿Yoon Gi está dormido?

-No, debe estar en su habitación hablando con su hermana.

-Iré a verlo.

Toqué la puerta y luego pasé, Yoon Gi estaba hablando aún con su hermana, por lo que me disculpé e intenté salir de nuevo, pero él me hizo señas para que me quedara.

-Hermana, tengo que hacer algunas cosas, te llamo más tarde. - él termino la llamada - Ven, tenemos que hablar.

-Está bien. - cerré la puerta y me acerqué a su cama.

-¿Qué está sucediendo contigo? Sales sin dar explicaciones y regresas con los ojos hinchados, ¿Qué tienes?

-Yo... - quería contarle lo que me estaba pasando, pero no podía, caería sobre los dos un gran desánimo que nos iba a separar.

-Dime qué es lo que te afecta.

-Estoy preocupada por Jimin, es todo. - sonreí.

-¿Qué es lo qué tiene tu hermano? Si necesitas ayuda solo dímelo y te apoyaré.

-No, no necesito ayuda, solo dejemos que el tiempo pase. - me senté a su lado - ¿Me das un abrazo?

-Claro que sí. - me recosté sobre su pecho e inmediatamente sentí sus brazos rodear mi espalda.

Tres días más tarde, Yoon Gi tuvo su primera cita con el doctor Lee, traumatólogo muy recomendado por sus pacientes en internet.
El doctor examinó a Yoon Gi ese día, también vio los exámenes que le llevamos, ya que eran esenciales para un diagnóstico rápido.

En efecto el señor Lee pudo ver con claridad lo que Yoon Gi tenía, era un hueso que salió de su lugar el día del accidente y que estaba oprimiendo la médula espinal, por esa razón se veían limitados los movimientos de sus piernas y espalda. Si Yoon Gi hubiera seguido entendiendo su cuerpo luego del accidente, su vida solo se hubiera detenido por unos cuantos meses.

Para el doctor Lee, Yoon Gi podía ser operado pronto, pues era una cirugía complicada por tratarse de un asunto en su columna vertebral, pero para nada difícil de realizar, pues era simple, solo liberar la médula y listo.

Esa tarde Yoon Gi salió con la fecha de su cirugía, solo debíamos preparar los papeles, su mochila y estar allí con los permisos de la cirugía temprano en la mañana.

-¡Qué bueno! Este proceso terminará rápido.

...

Contigo Hasta El Fin (Suga-BTS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora