Contigo Hasta El Fin (Suga-BTS)

5

Regresamos a casa, Yoon Gi de inmediato se salió de su silla y se sentó en el sofá, luego me pidió un vaso con agua, el cual Min Hee ya le traía de camino. 

-¿Por qué? - pregunté mirándolo seria. 

-¿Qué? - dejó el vaso a su lado. 

-¿Por qué dejaste tu dinero bajo mi cuidado cuando dijiste que sería a nombre de los dos?

-Estoy casado aún, si pongo dinero en el banco a mi nombre, mi esposa tendrá derecho y acceso sobre este y claramente no se lo merece.  

-Entiendo. 

-Tú cuidarás de mi dinero, arreglarás la casa y comprarás una camioneta para mí, necesito un vehículo alto para poder apoyarme y entrar en él con facilidad. El taxi de hoy me dejó molido. 

-Veré cómo lo hago. - me retiré de su lado. 

Busqué información de varias camionetas durante días, realmente todas tenían buenas calificaciones, pero una de ellas me pareció la mejor, buena calidad, garantía y rendimiento. 

Salí de la casa días después y me dirigí a un concesionario que tenía la camioneta disponible, al verla quedé encantada, ya que era mucho más linda y más grande de lo que se podía ver en las fotos. 

Firmé los papeles de compra, la camioneta ya era de Yoon Gi aunque estaba a mi nombre como las cuentas de banco. Esa misma tarde, cuando me entregaron las llaves de la camioneta, llegué a casa con ella tocando el claxon para que Yoon Gi saliera a verla. Cuando el chico la vio solo sonrió, al parecer lo sorprendí con mi elección. 

-Tienes buen gusto. - dijo cuando estuve cerca de él. 

-No sabes cuánto tiempo estuve buscando información de esta camioneta. - sonreí. 

-¿Está a tu nombre? - asentí - Bien. 

-Ten las llaves y los papeles. - los saqué de mi bolso.

-No. - los alejó de él - Todo esto lo vas a manejar tú, ya te lo dije. 

-Está bien. 

-Vaya, camioneta nueva. - en ese momento Min Hee apareció. 

-Sí, es del señor Min. - pasé por su lado. 

-Será un honor llevarlo a donde quiera. - dijo riendo. 

-Claro que no, tu deber es limpiar y lavar, nada más. - esta vez fui yo quien le respondió a la chica, que al parecer estaba mal informada. 

-¿Qué me dijiste? - Yoon Gi me preguntó si hablaba con él.

-No fue con usted que hablé, le aclaraba una duda a Min Hee.

Esa misma tarde, busqué las cuatro mochilas que Yoon Gi tenía escondidas en su habitación para así salir en su camioneta hacia el banco de la ciudad.
Estando en la fila de dicho banco, recibí un mensaje de Mi Joo, ella preguntaba por su hermano y su progreso a mi lado, también me preguntó si estábamos listos para la cita del siguiente día.

-Todo está bien, nos vamos entendiendo y Yoon Gi es muy cooperador. ¡Gracias por este trabajo!

Dejé el dinero en la cuenta, esta vez fue mucho más que la vez anterior, por lo que fui entrevistada una vez más por motivos de seguridad.

-Metiches.

Regresé a casa y Yoon Gi estaba sentado en el comedor junto a Min Hee, quién le preparó la comida por orden del mismo Yoon Gi.

-¿Está todo bien? - pregunté.

-Sí, Min Hee es una buena cocinera, tiene un sazón muy bueno.

-¡Qué bueno! - la miré sonriendo.

-Soy cocinera y estoy terminando un curso de nutrióloga. La comida que nuestro jefe está degustando está hecha con los mejores ingredientes, cada uno a la medida exacta para él.

-Me da gusto. - dije tranquila - Yoon Gi, ya está lo que me pidió, ¿Hay algo más que deba hacer?

-Por hoy es suficiente, ve a descansar.

-Mejor iré a dar un paseo, me gusta salir en el atardecer. - Yoon Gi asintió, así que salí de la casa y pedí un taxi.

Tenía un hermano mayor por cuatro años, este era un chico muy diferente a mí en todos los aspectos, este era malcriado, ni siquiera terminó la universidad y le gustaba vivir la vida a su manera, de borrachera en borrachera, mujeres y amigos que no servían para nada.

Desde que me mudé con Yoon Gi a su casa para cuidarlo, de mi hermano no sabía nada, ya que nunca me llamaba, solo iba a casa y luego se marchaba.

Llegué hasta el lugar en dónde viví por mucho tiempo, le toqué la puerta a mi vecina, quién me abrazó tan pronto me vio.

-Oye, ¿Has visto a Jimin? Tengo varios días sin saber de él.

-Sí, vino hace un rato y me preguntó por ti.

-¿Cómo lo viste? Llevo sin verlo desde que me mudé.

-Está igual, flaco y todo somnoliento. - en ese momento me preocupé mucho, mi hermano de seguro la estaba pasando mal.

-¿Puedes darle este dinero cuando regrese? No es mucho, pero lo ayudará. - le pasé parte del dinero que tenía ahorrado.

-Sí, se lo daré.

-Espera, déjale aquí mismo anotado mi teléfono, dile que me llame y que no sea tan irresponsable.

-Está bien.

...