Diversos "Especies" La alianza de la flor de fuego

Capítulo 7, De nuevo en la aldea.

Tardaron aproximadamente dos horas en llegar al lugar donde dejarían sus autos. Ya no podían avanzar más sino era andando.

Se sumergieron en la inmensidad del bosque, el camino era estrecho y resbaladizo. Caminaban con mucho cuidado, excepto Mabelle; ella poseía una ligereza extraordinaria, avanzaba por el camino sin tropiezo y buscaba las rutas más fáciles para que ellos pudieran avanzar.

Andrew se sentía extasiado con cada movimiento de Mabelle, no le quitaba la mirada de encima. El estar cerca de ella le provocaba un sentimiento genuino de querer protegerla.

Tobías y Emma charlaban alegres, se burlaban el uno del otro cuando resbalaban, les parecía una excursión divertida.

Ana, Samuel y Samantha caminaban en silencio. Samuel protegía a su mujer para que no se lastimara.

Samantha se sentía incómoda, no sabía si Samuel ya tenía conocimiento de que él era su tío abuelo, qué cosa tan rara; se decía ella, apenas había cruzado un saludo y se sentía rechazada por él.

Por otro, lado estaba Emma, que seguramente tampoco sabía que Allya era su prima por lo tanto eso la convertía en su tía.

«Vaya enredo hizo Anton» —se decía para sus adentros.

Levantó la cabeza y miró a Mabelle, sentada sobre una roca que estaba a un lado del sendero, se había encontrado con Anton.

—Hablando de familia, el bisabuelo aparece —susurró.

—¿Perdona, dijiste algo? —Samuel preguntó.

—¿Qué? Oh no, no, es sólo que Anton está ahí.

Samuel giró hacia donde Samantha señalaba.

—¡Qué oportuno! —Ana le dio una palmadita a su esposo invitándolo a avanzar por delante para ir al encuentro de Anton.

Sin demora Samuel avanzó, mientras Ana y Samantha lo seguían con lentitud.

—¿Qué dices? ¿Los primeros Txori están con vida? —Mabelle parecía intrigada.

—Sí —confirmó Anton—, estuve unos minutos charlando con ellos, la pasaron bastante mal.

—¡Me imagino! —dijo pensativa.

—Anton. —Samuel se dispuso a charlar con él.

—Samuel, ¿Qué hacen todos aquí?

—Escuché que todos se están reuniendo y que su diosa desea que mi hija esté ahí, así que quise venir para asegurarme de llevarla pronto de regreso a casa. Además, necesito que me ayudes a saber dónde llevaron el cuerpo de mi madre, tú sabes dónde se encuentra el hombre que se la llevó.

—¿Hablas de Mahan? —preguntó Mabelle.

—Sí, supongo que sí. Es el nombre que mencionaste aquella noche.

—No, aún no sé dónde están, sigo buscando. Pero sé de alguien que lo sabe, sólo que aún no regresa de dónde sea que lo haya enviado Lanati.

—¿Dónde puedo encontrarlo?

—Tendrías que esperar a que regrese, lo verás en la aldea.

—¿Cómo sabré que es él? ¿Cuál es su nombre, su apariencia?

—Su nombre es Cetan, y será mejor que tú averigües su apariencia, ¡Cualquiera te dirá quién es!

Andrew había escuchado la conversación a distancia, pero puso particular atención en cuanto escuchó el nombre de su padre.

—Entonces mi padre sí es uno de los primeros —interrumpió.

—¡Ya lo sabes! —dijo Anton un tanto asombrado.