El Pianista [DoHwan/HwanYoungz]

Viernes, 14 de octubre

El fin de semana pasado se cruzó el Chuseok. Si bien mamá y yo lo pasamos en casa (no teníamos grandes planes con la familia, ya que viven algo lejos), mamá insistió en que no fuese a casa de los Kim, puesto que no sabíamos si ellos tendrían alguna celebración en curso.

El fin de semana fue súper aburrido. Definitivamente los Kim deberían estar ocupados con las visitas porque Doyoung no salió ni una vez a tocar el piano en la terraza.

No sé si esté relacionado, pero tal como dijeron aquel par de noonas, Doyoung faltó un par de días al colegio, así que me ha tocado comer el almuerzo con mis amigos, y regresar solo a casa.

Me toca caminar por enfrente de la casa de los Kim, cuando vuelvo de la escuela, pero aparte de eso, no me he paseado mucho por allí.

A la hora del almuerzo, igual que siempre, me doy una vuelta rápida al salón de Doyoung, para ver si hoy si ha venido a clases, y podemos comer juntos. Hoy si está, y estoy por sonreír como bobo, cuando veo que tiene un pañuelo ensangrentado, metido en la nariz.

Ligeramente enojado, pensando que aquellos bullys necesitan una nueva paliza, entro al salón, y tras dejar mi almuerzo en su mesa, me siento en la silla que tiene enfrente, y lo miro.

-¿Te han hecho algo?

-No –es su honesta respuesta-. Hace días que ya no los veo.

Quiero creerle. La verdad es que me gustaría estar en su clase, para poder cuidarlo 24/7, pero aquello es imposible ya que yo apenas estoy en primer grado, dos años por debajo de él, y porque estoy seguro de que aquello no le haría gracia. Es un chico bajito y enclenque, pero parece ser tiene mucho orgullo.

En su momento pensé que lo decía de broma, pero la verdad es que aún no me agradece por romperle la nariz a aquel bravucón. No es como si lo necesitase, pero sería un buen gesto...

Estamos comiendo los almuerzos en silencio, cuando se saca el pañuelo ensangrentando, rebusca en su mochila, y prontamente saca otro, con lo que se lo coloca nuevamente.

-¿Así que me vas a decir que el hecho de que te estés desangrando por la nariz desde hace quince minutos, no es porque nadie haya venido a golpearte?

-Tengo la nariz sensible –dice, visiblemente avergonzado-. Pasa todo el tiempo.

Frunzo el entrecejo. Aquello es algo que no debería "pasar todo el tiempo", pero no digo nada más.

Aquello me preocupa más, porque a diferencia de los bullys, parece ser algo de lo que no lo puedo defender con lo aprendido hace varios años en tae kwon-do.

Y entonces, otro pensamiento me llega a la mente: Quizá las constantes faltas de Doyoung al colegio no sean por miedo a los bravucones.

Hola, las quiero, tengan bonito fin de semana~~

Ribo~