Parte 11: Reencuentro

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Estoy sentado en el comedor, las lágrimas no han dejado de caer. Estoy muy preocupado, ¡esta misión tenía que salir bien! No sé que haré si ejecutan a Katniss, ya no tengo propósito en este mundo. ¿Por qué Snow hizo esto? ¿Por qué es tan cruel? Yo solo trato de salvar a Katniss. Lo he perdido todo. Mi familia, mi hogar, mis amigos, y ahora perderé a Katniss, lo último que me queda.

De repente Coin entra al comedor y camina hacia mí. Realmente quiero escuchar algo positivo.

-- No hay noticias. Lo siento. - dice Coin. Yo no respondo. Nos quedamos en silencio por unos segundos hasta que Coin vuelve a hablar.

-- Es la peor tortura del mundo. Esperar, sabiendo que no puedes hacer nada - dice Coin mientras se sienta al lado de mí.

Yo asiento mientras limpio las lágrimas que van cayendo por mis mejillas. 

-- En especial para la gente como nosotros. Pero la fuerza, el valor, la locura, que nos hacen seguir adelante, los encontramos en momentos como este. Están en ti, soldado. Son lo que te ha mantenido vivo todo este tiempo. Y no te fallarán ahora. - dice Coin.

Me quedo callado. ¿Enserio eso es lo que cree que me importa ahora? Me da igual la motivación, sin Katniss no seguiré. No seguiré siendo la cara de la rebelión. No seguiré haciendo propos. No para que todo repercuta en ella, he sido bastante egoísta ya. Solo quiero irme de aquí.

Hago un gesto de agradecimiento y salgo del comedor para dirigirme hacia la habitación de Finnick . Estoy algo débil, no he comido en algunos días. Entro y encuentro a Finnick haciendo y deshaciendo nudos. Siempre hace eso cuando esta nervioso o preocupado. Me siento al lado de él y solo me quedo en silencio. Imagino a Katniss regresando sana y salva, volviendo a sentir su calor, y volviendo a ver su sonrisa. Solo quiero volver a tenerla, estar con ella y no soltarla nunca más. Seguramente la están torturando de la peor manera por nuestro fallido intento de rescate. Desearía nunca haberme separado de ella en el Vasallaje, haber corrido más rápido y haberla alcanzado antes de que lanzara la flecha. Hubiera preferido ser torturado con ella a estar sin ella. ¿Por qué me eligieron a mi? ¿Por qué no a ella? Daría todo por cambiar de lugares.

Recuerdo ese beso en la playa, fue uno de verdad, de amor sincero. Sentí un hambre inexplicable. Desearía poder congelar ese momento y vivir en el para siempre. También recuerdo el último que nos dimos antes de separarnos. Fue corto, pero nos transmitimos todo lo que deseábamos decir. Es ahora donde me doy cuenta de que ella logró su objetivo, logró sacarme de la arena con vida. 

De repente la puerta se abre. Es Haymitch. No sé cuanto tiempo he estado aquí.

-- Volvieron - dice Haymitch.

Mi corazón comienza a latir muy rápido. ¡Eso significa que Katniss esta aquí! ¡Ella realmente está aquí! ¡Solo está a un pasillo de mi! Se siente como volver a sentir emociones después de mucho tiempo. Emociones que solo Katniss me puede hacer sentir. No he estado así de feliz en mucho tiempo.

Me levanto y corro lo más rápido que puedo. Llego y busco con la mirada a Katniss. Veo a unos médicos trabajando en alguien y me acerco enseguida a ver quien es. Los médicos se hacen a un lado y veo a Johanna. Ella está en terrible estado. Esta rapada y se ve muy débil, ni siquiera parece ella. 

-- ¿Johanna? - pregunto. Está tan mal que hasta dudo de que sea ella. Ella solo sonríe burlona, definitivamente es ella.

-- ¡Finnick! - escucho a una voz dulce llamar. Volteo y veo a Annie, ella se arranca el suero y corre hacia Finnick. 

-- Annie ¡Annie! - exclama Finnick muy feliz. Ambos se abrazan fuertemente.

-- Estas a salvo, estas a salvo - repite Finnick. 

Ellos realmente se aman, me alegra que Finnick sea feliz después de tanto tiempo. Pero me urge encontrar a Katniss. Camino por toda la sala y no la encuentro. La conversación de Gale y Haymitch capta mi atención. 

-- No lo entiendo. Todas sus armas estaban activadas y volamos sobre ellas. Nos dejaron ir. - dice Gale.

Haymitch nota que estoy buscando a Katniss y se me acerca.

-- Ella está ahí - dice mientras señala con la cabeza un pasillo. -- El gas que usaron con los guardias la durmió, pero está despertando. Gale y Prim la verán más tarde, deberías de estar ahí cuando despierte - dice Haymitch. 

-- Gracias - digo mientras me alejo.

Camino hasta el final del pasillo y me topo con una puerta. Detrás de esta puerta está Katniss, aún no me lo creo. Me siento en un sueño, estoy flotando de la felicidad. Empujo la puerta y la veo de espaldas. Los doctores parecen estar revisándola. Haymitch está detrás de mi y les hace una seña a los doctores para que salgan. Yo no puedo creer que estoy viéndola otra vez. Su cabello ondulado esta algo enredado, pero sigue siendo hermoso. Muero por ver sus ojos otra vez..... su rostro, absolutamente todo de ella.

-- Katniss - digo. Ella solo alza la cabeza un poco. Me acerco a ella para verla. Cuando veo su rostro la sonrisa de mi cara desaparece lentamente. Ella está muy mal...... tiene múltiples moretones y heridas. Esta demasiado delgada, a un nivel que parece letal. Hay una expresión de terror en su cara que parece que nunca se borrará. Y sus ojos ni siquiera parecen los suyos, están completamente apagados...... incluso están negros. Snow me quito una parte de ella.

Me pongo totalmente enfrente de Katniss. Ella sube la mirada hacia mí y me quedo mirando sus fríos ojos, incluso pareciera que tienen maldad. Pero Katniss no es mala. Ella me mira con una intimidante mirada, sus ojos están vacíos. La única emoción que hay en su rostro es el miedo. Yo solo estoy paralizado por su aspecto. Ella está tan mal como en mis pesadillas.

De repente Katniss se arranca el suero, pone sus manos alrededor de mi cuello y me estrella contra una ventana. El vidrio cae y ella me tira al suelo. Inmoviliza mis brazos con sus rodillas. 

No tengo tiempo de reaccionar. ¿Qué está pasando? Ella tiene una fuerza increíble para lo delgada que esta, incluso me atrevo a decir que es más fuerte que antes. Me cuesta liberar mis brazos, no solo no quiero lastimarla y estoy débil, también me estoy quedando sin aire. Ella me agarró desprevenido y hasta parece sabe que puntos tocar para cerrar mi garganta. No quiero lastimar a Katniss, pero a este paso me matará, la empujo con todas mis fuerzas y ella cae. Haymitch y Boggs corren hacía nosotros y todo se turna negro.

Esa no es Katniss.





Everlark el chico en llamas. LA REVOLUCIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora