Algo Inesperado I Pedri I

Parte 14- Nuestro Saludo

NARRA ALI

Desde que llegué a Barcelona no podía estar mejor. Por primera vez sentía que tenía algo mio y que se me daba bien sin estar en la sombra de Alvaro. Era buena en mi trabajo, y todos me lo reconocían incluido el entrenador. Mi táctica planteada para el primer partido de la temporada fue todo un éxito y consiguió sorprender a los jugadores del Valencia, dejándolos sin ninguna ocasión de gol.

Pero mentiría si dijera que esa era la única razón por la que adoraba mi nuevo trabajo. Pedri. El canario me había ganado en parte, y más aun desde la fiesta del otro día. Aunque no fue nuestro mejor momento, nunca antes había tenido tanta confianza con alguien como para contarle algo tan intimo y que me creaba tanta inseguridad. Desde entonces, Pedri había estado cada día demostrándome que le daba igual y que no cambiada nada entre nosotros.

Pedri era mi amigo, bueno no solo eso, era mi mejor amigo o eso quería creerme, porque cada día que pasaba me daba cuenta de lo mucho que me atraía el canario.

Con solo rozarme, lograba provocar sensaciones en mi cuerpo que nunca antes había sentido. Desde aquella noche, me había robado algún que otro beso, pero siempre actuando de lo más normal y como si fuera algo común entre nosotros, y yo tampoco había dicho que no, porque para que mentir, adoraba besarlo.

Estaba preparando la maleta porque en un par de horas viajábamos a Madrid para el partido de la noche contra el Jetafe. Era mi primer viaje con el equipo como asistente técnica y táctica y estaba nerviosa para que mentir, y yo no era la única, Alvaro estaba igual o peor que yo porque esta era su primera convocatoria oficial con el primer equipo y estaba previsto que jugara algunos minutos si todo iba bien.

Alvaro entró en mi cuarto y se dejó caer en la cama nervioso.

-¿Qué pasa?

-Ali me va a dar algo, ¿y si no doy la talla?- empezó nervioso.

Me senté en el borde de la cama y di golpecitos en mis piernas para que se acomodara sobre mi regazo.

-Lo vas a hacer genial- empecé a acariciar su pelo- Lo has estado haciendo muy bien estas semanas tu solito y por eso te han convocado.

-Pero no es lo mismo en los entrenos que en un partido Ali.. en los entrenos te tenía cerca por si algo no iba bien..- siguió nervioso.

-Aquí también me vas a tener cerca, voy a estar en el banquillo Alvaro..

-No es lo mismo.. y lo sabes..

Sabia a que se estaba refiriendo. En las últimas semanas Alvaro había insistido para que entrenara a jugar en algún entreno por el, tal y como dijo Leo que pasaría, pero yo me había negado. Aunque me costó porque me moría por jugar, pero por una vez quería ser Ali, no Ali a la sombra de Alvaro.

-Venga ve a vestirte y acaba con la maleta que tenéis comida en el club- le dije cambiando de tema y me miró confuso alzando una ceja. Estaba mejor informada que el sobre sus eventos y horarios de club.

-He quedado con Pedri para ir al club y me lo contó- dije alzándome de hombros sin darle mucha importancia.

-Mucho tiempo estas pasando tu con Pedri- siguió mi hermano burlón.

-No es así, solo somos amigos.

-Sí "amigos", yo no quedo todos los días con mis "amigos" ni me paso el día en su casa Ali - siguió escondiendo una sonrisa.

-Tampoco es que tengas muchas "amigas"- le eché en cara.

-Ni tampoco ando comiéndole la boca a escondidas en el jardín, mientras mi "amigo" me mete mano por el culo Ali- sentí que me sonrojaba ligeramente porque nos había pillado.