Algo Inesperado I Pedri I

Parte 41-No te creo

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NARRA PEDRI

La conversación con Ali me dejó mal, porque ni si quiera me dejó explicarme, solo me echó cosas en cara sin sentido y lo peor es que me dio a entender que algo más había pasado con Marcos y eso si que no podía soportarlo.

Tenía al técnico frente a mi, explicándonos junto al segundo entrenador los rondos de balón que debíamos preparar para el entreno, y no podía dejar de mirarlo con rabia y odio al pensar que había puesto sus manos sobre mi chica.. que sus labios había rozado los de Ali.. o algo incluso peor, que... se habían acostado. Joder eso no. Le di frustrado al balón y lo lancé al otro lado de la cancha.

-Hermano relaja- se burló Ferrán- que solo es el entreno..

-Déjame en paz, todo esto es por tu culpa- lo medio empujé y me di la vuelta para recoger el balón justo cuando noté un pinchazo en la zona de mi desgarro muscular. Tuve que parar en seco y tocarme la pierna de arriba a bajo haciendo un pequeño masaje antes de continuar entrenando con Ferrán.

-¿Estas bien?- me preguntó visiblemente preocupado.

-Sí, pasa el balón- no pareció muy convencido y probablemente se debía a las muecas de dolor que iba haciendo cada vez que la pelota tocaba mi pierna, pero de nuevo no me importaba, necesitaba distraerme y no pensar en Ali, que estaba a escasos metros de nosotros observándome con mucha atención. En el último toque no pude contenerlo más y perdí el balón algo conmocionado por el nuevo tirón que había notado.

-Hermano.. creo que deberías parar.. es evidente que algo no va bien...- Ferran vino hasta mi y me dio unos toques en la espalda amistosos, pero me aparté y fui a buscar el balón de nuevo, solo que esta vez una personita rubia se interpuso en mi camino.

-A parta por favor , tengo que entrenar- dije escueto y con rabia por como no me había dejado hablar antes.

-No vas a jugar más- dijo seria cruzándose de brazos- y menos aun entrenar, te esta doliendo Pedri- cogió el balón entre sus manos y negó.

-No tienes derecho a decirme eso- espeté con rabia. No iba a permitir que me quitara lo único que me quedaba, el futbol.

-Sí que lo tengo, te dije que iba a cuidar de ti y es lo que estoy intentando hacer- rebatió visiblemente preocupada- te ha dado un tirón con el primer golpe seco al balón, no entiendo porque has seguido la verdad- intentó acercarse a mi pierna pero me aparté a la defensiva.

-Te he dicho que no es nada, y que no tienes derecho a impedirme jugar, joder- dije agobiado por tenerla delante y no estar como siempre con ella.

-Pedri.. ¿Quieres parar ya? ven vamos a sentarnos...- buscó mi mano con cariño pero no permití que la cogiera.

-No tienes derecho a decirme que hacer, porque ya no somos nada -solté sin pensar con rabia y me arrepentí al segundo al ver como se rompió frente a mi y como sus ojos se aguaron. Estaba enfadado, cabreado porque no me había dejado hablar, también celoso por como Marcos se acercaba a ella, pero todo esto no era su culpa. Estábamos así por mi, yo era el único que había provocado esto al no haberle dicho la verdad cuando me lo pidió y encima ahora acababa de fastidiarla doble.

Ali tomó una gran bocanada de aire para relajarse.

-Muy bien, pero sigo siendo la entrenadora táctica y no vas a jugar- dijo sin expresión- Fermín entras tu directo a entrenar con Ferran, Pedri al banquillo- llamó a Leo con la mano- ha tenido otro tirón en el muslo, ponle algo en la pierna porfa... no tiene pinta de ser nada serio pero por precaución- le pidió mientras se daba media vuelta y se iba al otro lado del campo junto a Marcos.