Parte 47- Reconcilización, a medias

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NARRA PEDRI

En cuanto salí por la puerta me arrepentí de la situación comprometida en la que había sometido a Ali. 

¿Cómo se me ocurrió decirle que eligiera entre mi hermano o yo? ¿En qué cabeza cabía eso? Con ella en la cama del hospital, recien despierta de su ataque shock post alérgico y encima embarazada de mi hijo. No tenia excusa. 

Ya sabía que no la tenía, pero toda la situación había podido conmigo. Aunque no quisiera admitirlo, aun me creaba cierta inseguridad la relación que tuvieron Ali y mi hermano. Después de todo, se pasaron 4 años juntos. El la asistió en el parto de Fer, fueron una familia.. mientras yo.. bueno yo hacia tonterías. Mi yo inseguro fue el que habló en ese momento y le exigió que eligiera entre Fer o yo, porque necesitaba volver a escuchar de sus labios que me prefería a mi.Pero lo que no esperaba es que me fuera a echar de su habitación. Algunas veces se me olvidaba que mi rubita tenía carácter. 

Me dejé caer en una de las sillas de la sala de espera frustrado. 

-Menuda puta mierda- no pensaba largarme del hospital, puede que ella no me quisiera en la misma habitación, pero no pensaba y dejarla a ella con Fer sola. Me tapé la cara con las manos mientras peinaba mi pelo nervioso, y en ese momento noté como alguien se sentaba en la silla de al lado. 

Ya sabía quien era sin si quiera mirarlo. El causante de todo este drama, que no me había quitado el ojo de encima desde que Ali nos tiró de su habitación.

-Si le dejas un ratito sola se le pasará seguro- dijo mi hermano con suavidad. 

-No necesito que me des consejos con mi mujer, gracias- respondí mirándolo con asco- la puerta está por allí por si no lo has visto.

-No me voy a ir Pedri- dijo con decisión-deja de estar tanto a la defensiva, y escuchame. 

Rei irónico negando.Sino había querido escucharlo dentro con Ali, menos aun ahora aquí solo.

-Tu eres el único que has hecho que esté a la defensiva, desde que Ali volvió.  

-Lo se, y por eso te pido perdón- me dio la razón, cosa que no pensaba que haría. Mi hermano siempre estuvo conmigo en lo bueno y en lo malo. Era la persona más importante de mi vida, porque siempre me decía lo que yo hacia mal, para mejorar, aunque todo eso se fue a la mierda desde lo del video-He sido un idiota inmaduro, que en lugar de ayudarte a que recuperaras a la mujer de tu vida, solo me empeñé en intentar separaros. 

-Mira oye, la primera vez que estamos de acuerdo en algo- sonreí irónico haciendo que suspirara y moviera la pierna de arriba a bajo nervioso- si vas a estar así, mejor que te vayas, ya estoy yo suficientemente nervioso como para encima aguantarte a ti. 

-Pedri, si dejas a Ali media horita, se le pasará seguro, bueno y si además si te disculpas- insistió. 

-Conozco perfectamente a mi novia y se como actuar con ella 

-Ya, pues no lo parece. ¿Cómo se te ocurre hacerla elegir estado acostada en la camilla del hospital?

-Ya, pues ¿Cómo se te ocurre aparecer para hablar con mi novia cuando expresamente te eché y te pedí que no te acercaras a ella?- repetí elevando el tono de voz. Bajo ninguna circunstancia iba a permitir que mi hermano me aleccionara sobre Ali. 

-Touché, pero no tenéis ningún derecho a prohibir que hable con ella y me disculpe. 

-Soy su novio, y el padre del hijo que lleva dentro. Además del papa de Fer.Tengo todo el derecho del mundo a cuidarla y asegurarme que está bien.

Algo Inesperado I Pedri IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora