Parte 30-Lo normal es aburrido

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NARRA ALI

Pedri desapareció ante mis ojos dando un sonoro portazo.

 Me quedé tan parada que ni si quiera fui detrás de el. 

¿Qué acababa de pasar? 

¿Por qué había respondido así justo cuando estaba dispuesta a.. bueno considerar lo de Barcelona?

La verdad es que por muchas vueltas que le di en ese momento, no fui capaz de encontrar una respuesta normal, por lo que decidí centrarme en lo más importante para mi. 

Mi Fer. 

El pobrecito había tenido otro altercado más con un compañero de clase. Lo triste es que no era la primera vez. 

Fer nunca encajó del todo en el cole por lo listo que era. Nunca hacia migas con sus amigos de clase ni aunque lo intentara, pero aun así con mucho apoyo e insistencia por mi parte, estos años conseguí que siguiera en la misma clase que los niños de su edad. Sus profesores siempre me decían que era un desperdicio de talento tenerlo por debajo de sus aptitudes, pero yo quería que tuviera una infancia normal, a diferencia de la que tuve yo. 

A la edad de Fer, pasé por una situación similar. Despuntaba demasiado, era muy lista y me aburría en las cases, y mi padre solucionó el  problema adelantándome tantos cursos como los profesores le indicaron.. y así nunca tuve una infancia normal, nunca tuve amigos de mi edad, o pude relacionarme con niños, solo estaba con mi hermano y mi padre. Por eso no quería que Fer pasara por lo mismo, quería que fuera un niño y ya tendría tiempo de despuntar cuando fuera un poco más mayor.

Y Hasta ahora había funcionado. Fer seguía aburriéndose en clase, pero yo me encargaba de estimularlo y enseñarle otras cosas en casa. Además, como iba tan adelantando en el cole, eso le permitía tener más tiempo para hacer lo que le gustaba de verdad. El futbol.

Pero todo lo que había conseguido estos años sirvió de poco cuando volvimos de Tenerife. Desde entonces, Fer no dejaba de tener aun más problemas con sus compañeros de clase, bien por el futbol, bien porque lo veían demasiado listo...o bien porque se metían con su padre.

Los niños de 4 a 5 años podían ser muy malos, y mi hijo.. era demasiado bueno, a penas buscaba peleas o confrontaciones por mucho que lo provocaran, por lo que no entendía que había pasado hoy. Como Fer se había metido en otra pelea. Y con ese comedero de cabeza, llamé a Pedri para buscar un poco de apoyo como el que solía darme su hermano, pero solo me saltó el buzón de voz. 

-Pedri..no entiendo que ha pasado pero porfa llámame cuando escuches esto sí? estoy de camino al cole para buscar a Fer-decidí dejar un mensaje de voz mientras aparcaba el coche en el parking el cole. La directora ya me esperaba en la entrada con cara de circunstancia, y eso solo me dio a entender que la cosa era aun más seria de lo que parecía. 

-Hola Alicia, ¿Qué tal? siempre es un placer recibirte...

-Por favor, dejemos los formalismos, ¿Donde está mi hijo?

-Sigue encerrado en los vestuarios.. no ha querido salir desde el incidente. 

-¿Incidente? bonita forma de llamar "acoso"- corregí mientras pasaba por su lado para entrar en el colegio, pero me paró. 

-Te pediría que.. bueno, intentaras no ponerte muy nerviosa cuando lo veas.

-¿Qué se supone que quiere decir eso?- pregunté sin recibir respuesta-genial, gran forma de solucionar un problema de años.

Algo Inesperado I Pedri IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora