Parte 51-No me hagas arrepentirme de esto

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NARRA PEDRI

Ali estaba en la recta final de su embarazo. A penas quedaba medio mes para que conociéramos al nuevo integrante de la familia González y yo no podía estar más ansioso.

Estos últimos meses, todo a nuestro alrededor por fin se había estabilizado un poco. El embarazo de Ali iba bien, sin problemas. Desde el susto en la cena con mi hermano, las cosas mejoraron bastante entre nosotros. O al menos a medias. Le permitía algún acercamiento conmigo y con Fer, aunque con Ali nunca lo dejaba solo.

No podía evitarlo. No confiaba aun en el del todo, y por mucho que lo intentara, la cosa iba a llevar más tiempo.Aunque mi hermano no parecía tener problema con ello, y lo aceptaba. Se lo estaba currando bastante el condenado, especialmente con Fer. Mi hermano volvía a vivir por y para el niño, y siempre que necesitábamos un canguro o ir a recogerlo a la Masia, el estaba dispuesto.

Además, desde que Fer conoció el sexo del bebe y ese era su "secreto", el estaba mucho más contento con su "hermanito". Tenía tantas ganas de conocerlo como yo o incluso aun más.

Todo parecía perfecto.

Todo iba bien.

Volvería a ser papa en menos de un mes.

Tenía a mi familia conmigo.

Todo era perfecto, o eso quería pensar, porque dentro de mi.. sabía que algo no iba bien.

Todo era perfecto ...menos..bueno mi Ali.

Notaba que ella no estaba bien, era evidente que no lo estaba por mucho que intentara fingir. O al menos estaba ausente y creía conocer la razón de sus preocupaciones.

Álvaro. Su hermano.

En el hospital me confesó que lo echaba mucho de menos, y mi reacción no fue la mejor, para nada fue la mejor. Me cabreé mucho, aun con ella estando bastante débil, le prohibí terminantemente que intentara contactar con el. Pero ahora, varios meses después, podía ver el impacto que mi negativa le había causado. En especial, después de todo lo que había adelantado yo con mi hermano.

Ali necesitaba a Álvaro, de la misma forma que yo necesitaba a Fer, por mucho que me costara admitirlo.

Mañana era el cumpleaños de Ali, así que me había propuesto darle una sorpresa.Me había enterado gracias a Adidas, que Álvaro tenía una campaña de publicidad que grabar en Barcelona e iba a aprovechar la oportunidad. Quizá me arrepentiría de lo que iba a hacer, pero al menos.. no se podría decir que no lo hubiera intentado. Porque una cosa tenía clara, si Álvaro quería volver a la vida de Ali, primero pasaría el primer filtro, y ese era yo.

Hoy iba a ser un día muy ajetreado. Tenía muchas cosas que hacer y poco tiempo.

Al ser el primer cumpleaños de Ali que pasábamos juntos desde que lo dejamos, le había organizado una pequeña fiesta con mi familia y algunos amigos en casa. Además, debía pasar a recoger su regalo de cumpleaños y después... ir a ver a Álvaro.

En mi cabeza todo tenía sentido, había calculado bien los tiempos para no dejar a Ali sola ni un solo momento, pero como siempre, la teoría era una cosa, y la practica otra. Ya se me había planteado el primer problema del día.

Ir a recoger a mi niño.

Le había pedido a Gavi que se encargara. Fer adoraba pasar tiempo con su "Tío Gavi" porque el sevillano se había convertido en su mentor en la Masia, por eso el siempre era la mejor opción para tener a Fer contento.

Pero ¿Quien me iba a decir a mi que.. bueno, me iba a dejar tirado en el último momento?

-Dime que es una broma. Dímelo- le pedí a Gavi mientras andaba de un lado a otro nervioso.

Algo Inesperado I Pedri IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora