MERILLA
Las gotas de sudor resbalan por mi cuello mientras sigo con la rutina impuesta por el director que me sigue paso a paso. Es mucho mas compleja y complicada, quiere que demuestre porque me llaman la reina cisne y exprime mi flexibilidad, mi resistencia y mi agilidad.
—Un, dos, uno, dos, Renversé—indica el paso a seguir y lo ejecuto.
Es la primera vez que lo uso en una coreografía, pero ya lo había practicado. La secuencia de pasos me sale perfecta y continuo por dos horas mas antes de que me dé un respiro.
—Una hora y volvemos a practicar para unir una sucesión más de pasos complejos, eres muy buena y quiero explotar eso.
—De acuerdo señor—se nota su experiencia en lo que está enseñándome.
Mantiene su distancia conmigo y me quedo en el salón de ensayo. Tomo asiento dejando la espalda contra la pared mientras bebo del termo. Reviso los mensajes de texto, me muerdo el labio inferior mientras veo el video del entrenamiento que me grabo Damian.
¿Qué haces?
Pregunta y dejo el móvil en el piso, de una manera que me grabe a mi completamente y con la música en mi cabeza, hago un video para mi novio de los primeros pasos que he aprendido para mi presentación que inicia en un mes.
Termino, se lo envió con unas palabras de aliento para su partido. Lamento tanto no acompañarlo, quisiera hacerlo, pero yo quiero mantener una distancia para que despues la despedida sea menos dolorosa.
Aun tengo unos minutos, por eso me pongo de pie con mis pertenencias y salgo a buscar a Marion, pero no avanzo mucho porque me la encuentro a unos pasos. Salimos a la cafetería donde pedimos un café para ambas mientras ella observa mi estado de ánimo.
Aquí fue la primera vez que le acepte una invitación a Damián.
—¿Cansada? —asiento—¿triste?
Vuelve acertar y me conoce muy bien.
—Quiero ver el partido de Damián, quiero estar a su lado, pero también pienso que es mejor así, de esa manera el golpe será menos doloroso cuando me vaya.
—Mel, ustedes dos son tan hermosos juntos que no deberías apresurarte, el amor que se tienen es bonito, tierno, fuerte y es triste que se acabe de esta manera, sin luchar.
—Luchamos Marion, pero nuestro futuro y sueños dependen de una decisión que nos aleja a los dos. Lo amo con todas las fuerzas de mi corazón, pero el amor no es suficiente y tristemente somos un obstáculo el uno para el otro.
Hay que aceptarlo y esa es la realidad. He convivido con michos obstáculos en mi vida, yo he sido mi rival más complicada y no quiero que el amor sea una dificultad mas.
No quiero llorar y prefiero mejor darle un sorbo a mi café que pasa amargo. Me gusta, el café, pero soy de las que le gusta con un kilo de azúcar.
Sin embargo, el nudo de mi garganta lo paso para no romper en llanto.
—Espera, date tiempo, tómatelo con calma hasta el último momento, para que no tomes algo apresurado.
—Va a perder una magnífica oportunidad de convertirse en un excelente abogado por mí, que sabes bien lo que nos espera—una de las dos debe ser la más sensata—te juro que deseo que se quede, que no se aleje de mí, que me espere despues de hacer la gira, pero no seria justo porque Damián se merece lo mejor del mundo.
—Mel creo que te estas apresurando—sacudo la cabeza.
—No quiero Marion que se quede y ande incompleto a mi lado, no quiero ser un obstáculo en su vida y ser la causante de un fracaso en su alma—le digo muy segura—moriría si al pasar los años veo en sus ojos frustración, tristeza y piensa que fui un error dejar sus sueños por mí.
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HASTA RESPIRAR
Ficção AdolescenteHISTORIA BASADA EN HECHO REAL. SORDIDA, ESTREMECEDORA Y MALDITAMENTE DESGARRADORA Merilla es una adolescente que tiene profundas heridas emocionales y vive un infierno todos los días, llora en las noches y lucha con sus propios demonios. Abusada des...