PRESENTACION

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Las manos me sudan, saco la cabeza y el escenario se ve inmenso, intimidante, ya lo he pisado antes, pero en esta oportunidad, me juego mi futuro.

Me he preparado por meses para esta presentación antes los jueces, diez participantes para escoger solo cinco que pelearan por el puesto al papel más importante en el mundo del ballet.

Ser el cisne negro es la ambición de toda bailarina que practica esta disciplina y yo no soy la excepción. Lo quiero tanto como respirar, es una necesidad.

Me tiro al piso a organizarme las zapatillas de diamantes regalada por madrina Cruella. Mis compañeras tras bambalinas me observan con recelo ya que la mayoría piensa que las humillo por usar estos accesorios con piedras preciosas, pero fue un regalo el cual adoro y prometí utilizarlo siempre.

Hace juego con el tutu y lo use la primera vez que me presente en ese mismo escenario bailando la reina de la noche y desde entonces lo utilizo en cada presentación.

En este momento está bailando Dafne, la chica es muy buena, la verdad todas estamos en un nivel muy alto y me siento orgullosa porque pese a iniciar con esta disciplina a mis 17, he logrado alcanzarlas aun ellas practicarlo desde muy pequeñas.

Marion, Channel, Amy, Mariana y Tabita, ellas son mis rivales mas fuertes y termino de ajustar mis zapatillas escuchando como la presentación de Dafne finaliza con las ultimas notas de la canción.

Va Merlina, somos diez y esa chica es la cuarta. Estoy de ultima aumentando mis nervios.

—Ayúdame—aparece Marion de la nada nerviosa—este maldito vestido no me ajusta.

Me pongo de pie, todas las chicas están cerca de nosotros.

—¿Estarás embarazada? —comenta de forma maliciosa Marion—oh no, verdad que no puedes quedar embarazada, eres lesbiana.

Sueltan la cargada las tres, son insoportables y prefiero no prestar atención a sus comentarios mal intencionados.

Viven para eso y no sé cuál es el problema de los tres. Ellas son el claro ejemplo de que existen personas solo para joder, y no están felices si no es fastidiándole la vida a los demás.

—Debe ser que engordaste querida—Channel anda también con su grupo, son una pesadilla para cualquiera de aquí—sigue comiendo como vaca y veras que vas a partirte un dedo cuando te empines.

—Porque no mejor te callas pedazo de mierda—Marion explota muy fácil.

La detengo sosteniéndola del brazo mientras Channel se esconde detrás de Amy, su amiga y cómplice.

En verdad son chicas muy envidiosas, cansonas y nunca dejan de fastidiar.

—Que pasa contigo Marion, no has tenido sexo con una de tus tantas amantes—le lanza Amy—que te encuentras tras de gorda irritada.

Se ríen las tres, Tabita se mantiene apartada de todo el mundo escuchando y mi amiga no se aguanta, es demasiado mecha corta y la sostengo para que no se deje provocar.

—No les des el gusto—le digo al oído—están tratando de desconcentrarte, así que no te dejes provocar amiga, se más inteligente que ellas.

—Deja tú de ser tan entrometida Merilla—respiro profundo—o es que no puedes defenderte sola Marion que tu amante debe salir a tu defensa.

—Oídos sordos—le susurro a mi amiga para que deje las cosas así—estamos en algo importante, no pierdas el foco de las cosas, mantente segura por favor y orientada.

—Las odio—esta frustrada.

—Lo sé, pero utiliza esa sensación en algo importante y no perder el tiempo en gente que no vale la pena.

HASTA RESPIRARDonde viven las historias. Descúbrelo ahora