산 Extra 2: Meanie 산

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En cuanto Wonwoo pudo apoyar el pie en el suelo, comenzó a presentarse al trabajo diariamente. No porque estuviera ansioso por volver a su puesto, ni mucho menos. Si no porque, durante el tiempo que estuvo de reposo por su pierna, realmente no estuvo de reposo.

Había salido casi todos los días con Mingyu a pesar de que le habían recomendado quedarse en casa y hacer el mínimo esfuerzo.

El alto estaba feliz de poder llevar a Wonwoo a citas casuales, ir a comer a restaurantes, sentarse en algún lugar para hablar, tratar de cocinar juntos o dar paseos cortos.

Aquello fueron las primeras semanas, porque en los siguientes días que vendrían, Wonwoo nunca llego a imaginar que "salir a citas casuales", se convertiría en pasar intensas noches con Kim Mingyu.

Mingyu había comenzado a trabajar como chef en un restaurante bastante concurrido del barrio central, lo que le dejaba muchas horas libres que aprovechaba para pasar con Wonwoo.

El Mayor General se vio tan abrumado por todo lo ocurrido recientemente, que enseguida comenzó a trabajar de nuevo. Solo para tener la excusa de estar cansado y pasar un poco menos de tiempo con Mingyu.

¿Qué porque? Wonwoo trataba de decirse a sí mismo que era para desenamorarse de su no enamoramiento. Pero con el tiempo se estaba dando cuenta de que no estaba funcionando.

A pesar de que los aires habían estado mucho más tranquilos después de la muerte del dictador Kim, del matrimonio del Emperador Chwe y de la destrucción definitiva de "La Tumba", su Unidad había estado recibiendo casos sin resolver o acumulados de otras Unidades.

Y aquel era uno de aquellos días en los que Wonwoo debía quedarse en su oficina hasta altas horas.

- Señor Mayor General Jeon...- llamo el sustituto temporal de Jihoon desde la puerta de su despacho.- Le traigo los papeles que ha de firmar para la confirmación de los arreglos de los adoquines de la entrada del palacio de la antigua capital.

Wonwoo suspiro y asintió.- Claro, déjelos... donde pueda.- respondió, notando que había grandes montones de papeles en su escritorio.

- ¿Se quedará hasta muy tarde, señor?- pregunto el muchacho, colocando la carpeta sobre unas cuentas más que tenían relación con temas del palacio.

- Eso creo. Puede retirarse.- respondió.

El chico hizo una reverencia y salió de allí. Wonwoo pudo suspirar cansado abiertamente y se levantó de su silla para poder activar sus piernas entumecidas.

Su pierna le dolía algunas veces solo cuando se forzaba demasiado, como pasar muchas horas de pie, correr un largo trecho, cuando se golpeaba aunque fuera leve o cuando llovía. Esa última no la terminaba de entender.

Se aproximó a una de las ventanas de su despacho y observo el cielo oscurecido en el exterior.

¿Qué estaría haciendo Mingyu? ¿Dormir, comer o leer algún libro? ¿Esperaría por el despierto hasta que llegara? ¿Lo estaría extrañando de la misma manera que Wonwoo lo extrañaba, a pesar de que se habían visto aquella mañana?

Dejo sus tontos pensamientos de lado y se volvió a sentar en su escritorio. Debía dejar listo su trabajo para poder irse a casa y... ver a Mingyu.

- Para dormir, Jeon Wonwoo, debes irte a casa para dormir.


/////


- Te estuve esperando.

Wonwoo se obligó a mantener sus emociones a raya al escuchar la voz de Mingyu en su sala de estar. Su -no novio- tenía la extraña manía de colarse en su casa sin avisar.

Sourest // BooChanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora