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산 17: Un cambio de planes 산

Aquella noche se quedaron en casa de Kim Mingyu, y la mañana siguiente siguieron hablando sobre la historia familia de Kim Yeejae y posibles entradas a la ciudad.

Trazar un plan de aquella magnitud tenía complicaciones, ya que cualquier error podría provocar que les cortaran la cabeza, y Seungcheol debía llegar vivo al día de su boda.

Mingyu tuvo que ir varias veces a la ciudad para trazarles planes, traer materiales, ropas, explicar algunas cosas sobre los guardias, como los turnos que hacían, como se veían físicamente, y el tipo de arma que llevaban.

Una semana más se les pasó, y comenzaban a tener casi todo el plan trazado para poder llevarlo a cabo en los siguientes días. Tomaron la decisión de ser solo tres oficiales, ya que meter a una unidad entera en la ciudad sería difícil y peligroso.

Ya había pasado casi un mes desde que se habían ido de la capital, y Seungcheol estaba impaciente por volver y acabar con aquello. Quería volver y despertarse con Jeonghan, no por culpa de los ronquidos de Mingyu. Quería salir a pasear, ayudar a su prometido a cocinar, leer libros juntos, abrazarse cuando llegaba tarde de trabajar.

Pero, en cambio, debía estar a las afueras de la antigua capital, conviviendo con sus compañeros de trabajo y un extraño al mismo tiempo que les cocinaba la cena.

Soltó un suspiro al ver que el arroz se le había quemado.- Hannie, cuando vuelva a casa valoraré más tu comida.

- Deja de quejarte y ponte de nuevo con el arroz.- respondió Wonwoo, quien había tenido que aprender a cocinar por su cuenta al no estar casado ni tener criados.

- Jihoon tiene que traer más leña, pero está tardando.- se quejó con un resoplido.

Cuando el resto de la comida estuvo lista, pero aún faltaba volver a cocer arroz y Jihoon seguía sin llegar, fue cuando se extrañaron y comenzaron a quejarse más.

- No suele ser tan tardón...- murmuro Wonwoo.

- Puede que no haya encontrado nada útil, estamos en medio de la nada.- argumento Seungcheol.

- Disculpad.- dijo Mingyu, entrando a la cocina de su casa en donde charlaban los dos oficiales.

- ¿Ya has vuelto de la ciudad? ¿Qué has conseguido?- pregunto Wonwoo rápidamente.

- Dentro de unos días es chuseok, por lo que Yeejae estará en casa si o sí.- respondió.- Pero ese no es mi punto. ¿Reconocéis esto? Lo he encontrado a un kilómetro de la casa.

Mingyu subió su mano y mostró una cadena de planta con un medallón. Seungcheol abrió sus ojos enseguida y se acercó a cogerlo.

- Es de Jihoon.- respondió con seguridad.- Me explico que Soonyoung se lo regalo en su noche de bodas, tiene su fecha de matrimonio grabada. Siempre lo lleva puesto metido en el interior del uniforme, ¿por qué...?

- No me jodas.- interrumpió Wonwoo, abriendo sus ojos.- ¿No lo habrán...?

- ¿Raptado?- completo Mingyu, abriendo sus ojos.- ¿Aquí? ¿Cuándo y cómo? Es imposible que hayan llegado hasta aquí solo para llevarse a Jihoon, se os habrían llevado a todos de saber que estabais aquí.

- O puede que se lo toparan.- dijo Seungcheol, con una mueca de preocupación.- Vamos vestidos de con hanboks, y si realmente no sabían que estábamos aquí, se habrán pensado que era un ciudadano más.

- No sé si eso sea bueno o malo.- murmuro Wonwoo.- ¿Qué cojones vamos a hacer ahora? Acaban de raptar a Jihoon...

- Debemos volver al campamento.- dijo Seungcheol.- Informar de nuestro plan y sobre el secuestro de Jihoon. Intentaremos que no nos cancelen los planes, pero en caso de que algo le llegue a suceder al Capitán Lee... Kwon Soonyoung debe saberlo, a pesar de que nos arriesgamos a que quiera rebanarnos la cabeza.