TSUKI NO CHŌ

5_FUERTES CONEXIONES

Tras lo sucedido con Kanae Kocho, Anyineeku le había pedido permiso a su maestro el poder quedarse a vivir un tiempo con la señorita Shinobu, a lo cual Rengoku aceptó con una mirada pícara, este sabia que habían más intenciones que solo querer acompañar a Shinobu en su duelo.

—Maestro, por favor no empiece con lo mismo, yo solo quiero animar a Shinobu-chan, está pasando por un momento difícil y necesita de alguien —mangonea la joven que caminaba con su equipaje rumbo a la finca mariposa.

—Claro, claro mi joven Kahashima, lo que tu digas —contesta con voz divertida.

*tuerce los ojos e ignora el comentario irónico de su maestro*.

—Muy bien, ya hemos llegado, cuídate mucho y apenas inicies con tus misiones me avisas, no me puedo quedar mucho tiempo así que dile a la señorita Shinobu que le mando saludos —dice Rengoku con voz nostálgica despidiéndose de su alumna.

—Gracias maestro, usted también cuídese mucho, le estaré enviando cartas con mi cuervo, *cara conmocionada*, lo voy a extrañar mucho maestro, pero esto es algo que tengo que hacer, no quería aceptarlo pero siento que hice una conexión con Shinobu...

—Eso ya lo sabía, se ve de lejos que la señorita Shinobu te llama la atención, asi que ve con ella y no te preocupes por mi, por mi parte es obvio que también te voy a extrañar, eres como mi hermana menor, pero creo que esto es lo correcto —comenta el pilar y se acerca a la chica para darle un afectuoso abrazo.

Luego de un largo y caluroso abrazo, ambos se separan, para despedirse definitivamente.

Rengoku se va a su misión y deja a la joven en la entrada de la finca mariposa.

*toca el timbre y una muy deprimida Shinobu abre la puerta y en cuanto ve a Anyineeku se abalanza sobre ella para abrazarla. Anyineeku por su parte también corresponde al abrazo y le da un pequeño beso en la mejilla, el cual hizo que ambas se sonrojaran ligeramente.

—¿Cómo va todo Anyineeku-san? —preguntaba en un tono bastante amable y alegre queriendo pretender que no estaba en un sufrimiento constante.

—Me atrevo a decir que todo va muy bien, ya en pocos días tendré mi uniforme y espada para salir a completar las misiones.

—Entiendo, jeje, a mi también me emocionó bastante el hecho de tener mi propia espada y empezar a cazar demonios —enuncia Shinobu algo orgullosa.

—Me imagino, pero, ¿no te dan como nervios a la hora de combatirlos? —cuestiona Kahashima.

*suspira algo decaída* —Pues veras querida Anyineeku, si te soy sincera, todo el tiempo me siento nerviosa y aterrada en batalla, debido a que no tengo fuerza en los brazos y me es imposible decapitar a los demonios —explica Shinobu con voz frustrante.

—Y entonces?...

—¿Cómo mato a los demonios?, Mis padres nos enseñaron a mi y a mi hermana distintas fórmulas quimicas y medicinas, yo por mi parte cuando ellos murieron, empecé a desplegar más mis conocimientos sobre farmacéutica y gracias a esto es que he podido crear distintos venenos para asesinar a los demonios....

*Anyineeku se queda totalmente maravillada por todo lo que dijo Shinobu* —Woah, eres completamente brillante Shinobu-chan.

—¿De verás lo crees?

—Por supuesto que lo creo mi querida Shinobu, eres alguien demasiado valiosa y demasiado capaz —menciona Anyineeku haciendo que Shinobu se pusiera nerviosa...

Pasaban los días y Anyineeku se interesaba más por Shinobu, era gratificante verla trabajar en sus medicinas y fórmulas, en definitiva ella era una mujer fascinante, poco a poco el interés por Shinobu se fue volviendo en algo más fuerte, sentía una conexión tan bonita con aquella chica que apesar de que se hubieran conocido hace algunos días se podría decir que pareciera que se conocieran de años, pero Anyineeku sabia que siendo cazadoras de demonios no tendrían tiempo para relaciones además de que Shinobu ahora estaba ocupada tratando de pensar la mejor manera de matar al asesino de la señorita Kanae.

Aunque sin decirlo a Shinobu también le estaba comenzando a gustar Anyineeku, ella pensaba que aquella chica era alguien habilidosa, gentil, fuerte y con talentos excepcionales, aparte que de cierta manera la consideraba hermosa, sin embargo tenía muchas inseguridades, y tal como pensaba Anyineeku, los cazadores no tienen tiempo de tener relaciones.

15 días después el cuervo que fue asignado para la joven Anyineeku llamo a esta para decirle que su espada y uniforme ya venían en camino sin embargo se los entregarían en la finca de su maestro puesto que al momento de escoger el material para dichos objetos ella dió la dirección de la finca Rengoku para recibirlos allá —Oh es cierto, el lugar que anoté fue la finca de mi maestro, tendré que darme prisa para recoger mis nuevas herramientas —dice algo preocupada, mientras sale de la finca mariposa y es guiada por su cuervo hasta la finca del pilar de la llama.

Ya llegando a la finca de su maestro, escuchó varias voces, pero una de ellas fue la que más llamó su atención, se trataba de una voz femenina bastante aguda y algo juguetona por lo que tocó la puerta rápidamente para ver si la chica que estaba allí era quien creía Anyineeku.

*toca la puerta y Senjuro la abre y al momento de ver a Anyineeku una enorme sonrisa aparece en el rostro del chico*.

—Anyineeku-chan, volviste!!! — enuncia el pequeño con mucha alegría.

—Hola pequeño Senjuro — responde y revuelca el cabello de este. Así es, he vuelto, resulta que en unos momentos llegará mi espada y uniforme así que tengo que estar acá para recibirlos.

—Oh, ya veo, pasa, pasa... —dice Senjuro casi arrastrando a la chica.

Más adentro de la finca, en la parte trasera de esta se encontraban el maestro Kyojuro y una joven de pelo rosado y puntas verdes difuminadas entrenando, al ver a aquella chica Anyineeku se sorprendió bastante pues no esperaba volver a ver a su amiga de la infancia....