❄️Un descanso❄️

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Un gigante gaseoso de tonos azules, adornado con grandes anillos que brillaban con una luz tenue, estaba arrodillado frente a la Tierra. Sus manos se movían con precisión mientras vendaba y cosía las heridas del planeta, su semblante serio y concentrado, reflejando la gravedad de la tarea. A su alrededor, flotaban herramientas médicas y vendas, todo perfectamente organizado. El ambiente era silencioso, solo roto por el suave murmullo de asteroides que se deslizaban en la lejanía.

La Tierra, aún atrapado entre la confusión y el dolor, empezó a recobrar la consciencia. Lentamente abrió los ojos, parpadeando varias veces ante la niebla que envolvía el lugar. Apenas se dio cuenta de que estaba tendido en lo que parecía ser una camilla de asteroide flotante, el gigante llamó su atención. Tenía un par de vendas en las manos y un pequeño kit de costura.

La Tierra se incorporó de golpe, su mirada aterrada recorriendo el extraño paisaje. Al ver al gigante frente a el, retrocedió con un gesto instintivo.

─¿¡Quién eres tú?! ¡¿Dónde estoy?! ─La voz de la Tierra resonó con pánico.

Pero antes de que pudiera moverse más, un dolor punzante recorrió todo su cuerpo, especialmente su rostro. Se llevó las manos a la cara con un gemido de dolor.

El gigante gaseoso notó su malestar y, con movimientos suaves, colocó una mano en su mentón, obligándolo a quedarse quieto. Con mucho cuidado, empezó a aplicar un desinfectante sobre sus heridas. A pesar de su imponente figura, sus gestos eran increíblemente delicados.

─Siento mucho si te asusté... Me llamo Thot ─dijo, su voz grave pero calmada resonando en el vacío. Se apartó momentáneamente para sacar un par de vendas nuevas y continuó atendiendo las heridas en sus piernas─. ¿Puedo saber cómo te llamas y de dónde vienes?

La Tierra tragó saliva, nervioso. Su mente aún estaba confusa, pero respondió con voz temblorosa.

─M-me llamo... T-tierra, y vengo... del sistema solar...

Thot asintió brevemente, sin alzar la mirada de su trabajo. Vendaba sus piernas con precisión casi mecánica. El ambiente era tenso, una calma extraña llenaba el espacio, pero había algo en la interacción que la Tierra no podía descifrar. La frialdad en los gestos de Thot, la forma en que parecía más interesado en su tarea que en el mismo, era inquietante.

Mientras la Tierra intentaba procesar todo lo que había pasado, el silencio fue roto por una figura que se aproximaba lentamente. Era más pequeño que Thot, pero aún imponente. Un gigante de hielo, cubierto por varias capas de telas, lo suficientemente gruesas para protegerlo de su gélida órbita.

─¿Cómo se encuentra? ─preguntó con una leve preocupación en su voz.

Thot, sin apartar la vista de su tarea, respondió de manera cortante.

─Todo está bien, Jack. Deja de dudar de mi trabajo.

El gigante de hielo, llamado Jack, se encogió ligeramente ante la frialdad en las palabras de Thot. Sin embargo, mantuvo su atención en la Tierra, que aún miraba alrededor con desconfianza.

─D-disculpa... ─la voz de la Tierra era apenas un susurro─. ¿Dónde estamos?

Jack le dedicó una sonrisa tranquila, su actitud contrastaba con la seriedad de Thot.

─Estamos en un sistema que llamamos El sistema Aquamarina ─dijo con suavidad─. Es un lugar lleno de... eh...

Pero antes de que pudiera terminar su explicación, Thot lo interrumpió bruscamente.

─Tenemos un cinturón de asteroides al que llamamos "Cinturón de Azul Zafiro". Cuando termine de ponerte las vendas, quiero que vayas allí. Todo lo que tienes que hacer es seguir en línea recta siguiendo la estrella,cuando llegues, descansa. Mañana iré por ti para presentarte con los demás.

La Tierra, aún aturdido, lo observó fijamente. Había algo en Thot que le resultaba inquietantemente familiar, pero no podía precisar qué era. ¿De dónde lo conocía?

Jack intervino, con un tono más suave.

─Vamos, Thot... Aún se nota que está en mal estado. No creo que pueda ir solo sin ayuda.

Thot lo miró por un instante antes de soltar un suspiro frustrado.

─Bien, pero tú te harás cargo de el.

Jack sonrió levemente y extendió una mano hacia la Tierra, ayudándolo a ponerse de pie.

Del camino hacia el cinturón de asteroides...

Jack guiaba a la Tierra lentamente hacia el cinturón de asteroides Azul Zafiro. A medida que avanzaban, la luz de la estrella gigante del sistema Aquamarina iluminaba sus pasos, reflejándose en las rocas heladas que flotaban a su alrededor.

─Sé que todo esto debe ser confuso para ti ─dijo Jack, rompiendo el silencio─. Te encontramos fuera del cinturón de Tlalticpacti, y... bueno, estabas en muy mal estado.

La Tierra lo miró con curiosidad.

─¿Tlalticpacti...? Que nombre más curioso,nunca había escuchado un nombre así.

Jack asintió, mientras sus pies dejaban suaves huellas de sus atmósferas en el vacío del espacio.

─De seguro estás bastante lejos de tu casa. Te encontramos casi por accidente, ¿sabes? Estabas perdido y herido,es como si....hubieras vagado sin rumbo por mucho tiempo.

La Tierra apartó la mirada, recordando vagamente su viaje fuera del Sistema Solar,lo último que recordó fue el asteroide impactando sobre su superficie y la extraña voz que le advertía de algo.

─¿Cómo me encontraste...? ─preguntó en voz baja.

Jack suspiró.

─Fue pura suerte. Te vi flotando cerca del borde de nuestro cinturón. Te recogí y te lleve con Thot, afortunadamente decidió ayudarte, aunque... bueno, él no es muy cálido, como habrás notado.

Ambos compartieron una pequeña sonrisa antes de continuar en silencio. Al llegar al cinturón de asteroides, Jack la llevó a una zona donde la luz de la estrella gigante se filtraba entre las rocas, creando un paisaje lleno de brillos azules y blancos.

─Aquí estarás seguro. Descansa, recuperarás tus fuerzas pronto.

La Tierra, agotado tanto física como emocionalmente, asintió. El dolor seguía presente, pero la calidez de la luz y la quietud del lugar la hicieron sentir, por primera vez en mucho tiempo, algo de paz. Se tumbó sobre uno de los asteroides, dejándose envolver por la luz. Pronto, el cansancio la venció, y no tardó en quedarse profundamente dormido.

Jack observó por un momento antes de retirarse en silencio, asegurándose de que estuviera a salvo.












✨🌕__Nota de Autor__🌕✨

Corto pero entretenido supongo :)

Hasta la próxima mis lindas lunas ❤️👍

1040 palabras.

Solarballs:con que aquí pertenezco (Pausada/Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora