Lujuria (2)

31| No te dejaré sola

30| No te dejaré sola

|Alexa

Seguía completamente petrificada al ver a esos dos frente a nosotras.

¿Cómo es que llegaron a éste lugar?

¿Por qué están aquí?

—¿No van a responder?—Nicholas se cruzó de brazos mientras veía a Meredith, quien estaba escondida detrás de María.

—Bueno, nosotras...pues, estamos aquí porque Scarlett tiene una cita con el ginecólogo—balbucee un poco alguna rápida respuesta.

—¿De verdad me vas a mentir, Alexa?—Christopher cambió su peso de un pie a otro.

—No te miento—susurré.

—Me dijiste que te verías con ellas para estar una tarde juntas "animando a Meredith" no que vendrían a un lugar de planificación.

—Por eso, estamos haciendo cosas de chicas. ¿Qué más es de chicas que acompañar a una amiga al gine?

Ellos dos me miraron sin creer nada de lo que les decía. Pero no debía hablar de lo que verdaderamente haríamos en éste lugar.

—Mer ¿te pasa algo?—Nicholas dirigió la mirada a mi amiga—por favor, dime qué pasa. Hace semanas que no me hablas, no quieres verme, ¿hice algo mal?

Miré a Meredith quien seguía detrás de María, ella tenía sus ojos llenos de lágrimas.

—No me pasa nada—susurró con su voz entre cortada.

—¿Estás llorando? Meredith estoy preocupado, no sé qué pasa contigo, quiero verte y te escondes detrás de tu amiga.

Él de verdad se veía bastante angustiado por ella.

Quizás su relación comenzó siendo algo pasajero, pero puedo decir que alguien que solo quiere follar no se vería como en éstos momentos está Nicholas.

Él está muy preocupado, puedo ver como intenta apartar a María para ir por Meredith.

—¡Por favor dime que hice! ¿¡Dime por qué estás así!?

Miré a Meredith quien seguía tras María, ella tenía sus manos temblorosas, estaba llorando muy fuerte mientras que agarraba a mi amiga de la ropa como evitando se que moviera.

—Mer, es mejor que le digas—susurró Scarlett.

—Apoyo a Scarlett, debes decirle.

—¡No! ¡Ya tomé una decisión!

—¿¡Decirme qué!? ¿Qué está pasando, Meredith? ¿Ya no quieres estar conmigo es eso?

—¡No es eso! Si quiero estar siempre contigo, pero...

—¿Pero qué? Dime, si soy yo el problema dímelo y cambiaré, pero no me ignores. Me he estado muriendo estas semanas sin saber de ti, por favor.

—No puedo decirte, me da mucho miedo.

—¿Miedo de qué?

—Que te vayas y no vuelva a verte.

Nicholas junto sus cejas.

—¿Por qué crees eso? ¿Hiciste algo malo? ¿Tú me engañaste?

—¡No! Claro que no—ella por fin salió de su escondite detrás—jamás haría algo así.

—Entonces ¿qué pasa?

Mer bajó la mirada a sus pies.

—Yo...