Ese mismo día en la tarde luego de pasar tiempo con sus esposas Lyon fue llamado a la sala del trono.
Con su característico estilo de ropa caminó por el palacio guiado por varias sirvientas que para Lyon fue una situación extraña debido a que cada todas las sirvientas frente a el eran todas mujeres pero no eran humanas... Eran cinco mujeres algo similar a seres espirituales, un tigre blanco, un dragón oriental azul, un fénix, una tortuga y una serpiente...
Lyon - ¿Se supone que esto es un buen chiste o algo así?...-
Aria y Paris miraron a Lyon extrañadas... Aveces decía cosas sin sentido...
Las sirvientas abrieron unas puertas luego de anunciar su llegada, era un sitio muy abierto, allí estaba el "emperador" con sus dos asesores bajo las gradas de su trono.
Esta vez no habías un solo guardia solo lo que parecían un grupo de nobles sentados en diferentes mesas... Las mesas eran muy bajas porque todos estaba sentados sobre diferentes almohadas en el suelo pero Lyon sabía que sería imposible para él... El medía a este punto poco más de dos metros mientras queso estas personas difícilmente median más de un metro setenta.
Lyon - Hmm ¿Hola?.-
Todo los nobles se pusieron de pié e inclinaron sus cabezas en dirección a Lyon.
Asesor 1 - Le damos la bienvenida a el gran héroe Lyon hoy en el cumpleaños de nuestra princesa.-
Aria le jaló el brazo a Lyon para que colocara su oreja cerca de su boca.
Aria - Aquí se celebra un banquete como fiesta de cumpleaños y se hace al final de la semana donde se cumple años... Bueno al menos para la realeza.-
Lyon después de eso simplemente asintió... Sintió una pequeña incongruencia en pero no había nada que hacer.
Entonces inconscientemente escaneó la zona... Y comenzó a reírse como un loco... Todos lo miraban raro incluso Aria y Paris... ¿Qué sucedía? El mayor chiste andante estaba aquí y lo mejor de todo es que no era solo uno si no cuatro.
Cuando terminó de reírse tomó aire y se agarró el abdomen como si le doliera.
Lyon - Tú el de rojo, tú la de las cejas mal delineadas, tú el de la espada y tú el que tiene la piedra de maná junto al corazón... ¿Creen que acumularán poderes hasta que sean invencibles?... Lo que son es imbéciles...-
Todos sabían de quienes estaban hablando eran las cuatro estrellas en ascenso del país, el primero un joven huérfano que pasó sin pena ni gloria su primer año como cultivador, pero entonces comenzó a ganar poder con su gran talento, sin embargo aunque talentoso no era nada del otro mundo simplemente se encontraba en el rango D-.
La siguiente una joven que había sido violada por un emisario en un pueblo frente a todos, ganó poder tampoco era algo que elogiar en quince años había alcanzado el rango C-... Y después de matar al emisario que la violó desapareció... Se dice que cría al niño producto de su violación.
El otro joven guerrero es un joven nacido del líder de la Secta de cultivo demoníaco, locos de la pelea donde el poder es la única fuente de razón... Si era fuerte pero tampoco era para tanto C+ aún no alcanzaba el rango de su padre que era una potencia continental B-...
Y el otro nadie lo conocía sencillamente porque no sabían a quién se refería, solo un joven palideció al escuchar lo que dijo, no era otro que el príncipe más débil de todos.
Lyon - ¿De verdad creen que ocultar sus poderes le da una especie de ventaja? Lo único que consiguen es verse como idiotas ante los que son más fuertes que ustedes... ¿Dime si yo ocultara mi poder tendría lo que tengo ahora?... Claramente no y no puedes justificarte en que recibirás una especie de repercusión divina... El único aquí que puede dar un juicio divino soy yo.-
Al final de sus palabras un manto dorado apareció sobre sus hombros, para su propia sorpresa el mismo manto apareció sobre los hombros de Paris y Aria.
En un mundo diferente estaban las demás personas cerca de la capital que escucharon rugidos de dragones desde cientos de kilómetros de distancia incluso los dragones voladores que tenían años sin volar por debajo de las nubes le dieron la majestuosa vista a las personas cercanas...
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Un Mundo Caótico
FantasyYo soy un estudiante en la escuela estatal de una de las provincias más pequeña de mi país... Toda mi vida sería normal de no ser porque soy un huérfano que está apunto de perder su apoyo económico del estado... Pero un día todo cambió. Fuí llevado...