Definición

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Las primeras tres peleas fueron como esperaba, no había nadie que pudiera realmente ser un problema para mí, pero habían dos personas más fuertes que Aria... Al menos en poder puro.

La pelea de Aria era la última, con más de cincuenta personas entrando en la arena era difícil encontrar a alguien pero para mí Aria era como un faro en medio de una noche oscura sin niebla.

Cuando la pelea comenzó obviamente se abalanzaron sobre los más débiles primero, para mí asombro hubo más de uno que trató de usar un artefacto mágico... Lo raro no era eso si no lo que les pasaba a estos idiotas.

Un hombre de unos treinta años había disparado de su muñeca una cadena con una cuchilla gritando "Get over here" pero la cuchilla más que solo estar en fuego e infligir derechos de autor, hacía daño directamente en el maná de la persona, lo que se válido rápidamente al ver que al pobre tipo que golpeó cayó muerto y eso que solo lo golpeó la cadena... El asesinato estaba prohibido y las armas mágicas también, la persona en cuestión sufrió un terrible destino, un rayo purpura cayó sobre el...

Por otro lado Aria estaba haciendo un desastre con las pobres personas que se metían en su camino, con un arma sin filo era más peligrosa que con una que tuviera filo... Quienes se metieron en su camino sufrieron fracturas de todo tipo.

Ella parecía simplemente estar volviendose loca, sin embargo si la inspeccionaba correctamente podía ver las lineas de energía blanca que parecía salir de las grietas de su arma y algo más complicado de notar era que ella se movía usando su energía para mover su cuerpo, se podria decir que estaba haciendo un uso nulo de sus músculos... Si... Muslos... Digo músculos... eso...

Cuando quedaban cuatro Aria por poco hizo que el destino de más de una persona fuera terrible sin embargo pareció controlarse jaja... Solo hizo que una persona doblara sus rodillas para atrás...

Cuando todo terminó simplemente nos fuimos a comer ya que no tenía importancia real seguir en la arena.

Cuando salimos en búsqueda de un restaurante decente una persona se metió en el camino de nuestro grupo.

Víctor - ¡Oye! ¿Te interesaría unirte a mi grupo de mercenarios? Por cierto soy Víctor.-

La persona en cuestión, era un hombre común de este reino, un poco alto, con piel ligeramente bronceada y tanto su pelo como sus ojos eran marrones, lo único que lo diferenciaba del resto era sus vestiduras, que parecían una armadura ligera, además de tener una espada corta en su espalda... El tipo tenía una sonrisa come mierda en la cara...

Lyon - No.-

Traté de responder para seguir de largo.

Víctor - ¿Quién está hablando contigo? Esa chica es increíble, creo que en mi grupo sería una gran adición.-

Su voz se volvió áspera en su pregunta, pero se suavizó en el resto.

Lyon - Ya lo sé, pero no hay nada que tú gremio pueda ofrecer que sea realmente interesante.-

El tipo simplemente me ignoró y siguió viendo a Aria.

Aria - Mi esposo tiene razón, no hay nada que un grupo de mercenarios pueda ofrecerme.-

Víctor - Ya veo, estás siendo coaccionada por este sujeto para negarte, comprendo... Déjame librarte de e-...-

Antes de que pudiera terminar sus palabras mi mano había viajado directamente a su cabeza levantándolo del suelo lo suficiente como para que su cabeza estuviera al nivel de la mía.

Lyon - Parece que hay algo que no estás entendiendo, tú grupito de mierda no tiene ni tendrá nunca, suficiente dinero como para comprar la tierra que pisan los pies de mi esposa ¿Lo lograste entender pequeño trozo de mierda?.-

Mientras más hablaba más liberaba mi maná al aire, después de todo ser un faro andante no era nada bueno si querías pasar desapercibido, pero la gente de este mundo no entiende de sutilezas y es mejor tratar todo de esta manera.

Un Mundo CaóticoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora