- Jikken -Trafalgar Law

5.

Trafalgar Law había subido al barco de los Mugiwara junto con la chica desconocida, su idea era llevarla a la habitación médica del reno pero el barco tenía más puertas de las que había imaginado. 

Chasqueó su lengua sintiéndose frustrado, quería respetar el espacio de la banda pirata que ahora era su aliada, no tenía intención de ir abriendo todas y cada una de las puertas hasta encontrar el espacio que buscaba. Sin más remedio abrió la primera estancia que tuvo a mano para poder proteger a la joven del frío, ya que, no aguantaría más el clima que hacia en esa isla en las condiciones en las que estaba. Guió a la joven al interior para darse cuenta de que se trataba de la cocina. 

La joven seguía las indicaciones silenciosas del hombre que la guiaba sosteniendo su brazo, preguntándose qué era lo que el destino tenia pensado para ella esta vez. Le parecía que había entrado a un espacio cerrado ya que el frío ya no golpeaba su cuerpo de una manera tan directa. El peso de las esposas con rodeaban sus muñecas se le hacia doloroso, hacia tiempo que no había estado tanto tiempo de pie. 

El hombre giró el cuerpo de la chica empujándolo un poco hacia atrás hasta que la parte trasera de las rodillas de ella chocó contra algo duro. 

- Siéntate - dijo secamente el cirujano soltándola el brazo, ella simplemente obedeció. 

Se alejó de ella unos pasos, apoyó su nodachi contra la mesa del comedor y caminó hacia el grifo de la cocina, tuvo suerte de encontrar un vaso junto a la pila, encendiendo el grifo, lleno de agua el recipiente para después volver junto a la joven. 

Law cogió la mano de ella con cuidado de no asustarla, cosa que no funcionó porque la chica se tensó al instante. Los dedos del cirujano abrieron con cuidado los de ella que estaban en un puño para encajar el vidrio en la mano de la peli-negra. 

- Solo es agua - comentó el del gorro de piel viendo que, tras sus palabras, la extremidad de la joven se cerraba en torno al recipiente pudiendo soltar él su agarre sobre el mismo. 

Se separo de nuevo de ella cogiendo una silla, moviéndola, la coloco enfrente de la que ocupaba su acompañante. Se sentó cruzando las piernas posando su mirada sobre la chica esperando a que ella bebiese. 

La chica cogió el vaso con sus dos manos encadenadas y lo levanto llevándoselo primero a la nariz para comprobar que fuese agua y no otra cosa. Evidentemente no olía a nada, así que procedió a ponerlo sobre sus labios dándole un pequeño sorbo. Sintió como el agua refrescaba su garganta seca al instante, ese alivio provocó que volcase todo el contenido del líquido en su boca para sofocar la sed que tenía desde hace días. 

- ¿Como te llamas? - rompió el silencio el cirujano una vez que vio como la chica se había bebido el liquido. 

Esta bajo el vaso apoyándolo sobre sus rodillas, quedándose pensativa, las dudas y la desconfianza golpeando su cabeza. Desconocía si su situación había mejorado con respecto a la que tenia anteriormente, la frialdad con la que hablaba ese hombre la ponían los pelos de punta. Pero no tenia nada que perder, tampoco iba a cambiar nada si le decía su nombre o no. 

- Ray - pronunció con un tono de voz bajo, pero menos forzado con el que había hablado anteriormente - Suzu Ray - puntualizó. 

- ¿Sabes dónde has estado encerrada? - la chica simplemente negó - ¿Sabes lo que han hecho contigo? - volvió a preguntar Law. 

Ray entonces agachó la cabeza, fue un acto reflejo, al tener los ojos vendados no se iba a notar el cambio que fuesen a tener estos al recordar todo lo que había sucedido. Un escalofrío recorrió su cuerpo haciendo que su postura encima de la silla se moviera ligeramente, cosa que el moreno pudo percibir. 

Iba a volver a preguntar algo ya que el moreno se había dado cuenta de que no iba a ser capaz de obtener respuesta a la pregunta que había formulado a la chica. Entonces, unos pasos en la madera del barco captaron la atención del capitán, este se levanto de la silla y se asomo por la puerta viendo como Chopper y Franky acababan de subir al navío, buscando algo en todas direcciones. 

- Tanuki-ya - llamo el moreno desde el marco de la entrada haciendo que los dos recién llegados girasen sus cabezas hacia donde se encontraba el cirujano - ¿dónde se encuentra la sala médica? - dijo con un tono neutro. 

El reno se encogió levemente al escuchar la voz fría del hombre y sus ojos grises clavados sobre los suyos. 

- Justo al otro lado del suuuuper sunny - respondió Frankie al ver que su compañero no articulaba palabra. 

Law entro sin decir nada de nuevo al interior de la cocina, agarro el vidrio de entre los dedos de Ray para quitárselo y dejarlo sobre la mesa. Sin dar aviso volvió a agarrar del brazo a la joven levantándola de su asiento para sacarla al exterior. 

El frío volvió a chocar sobre el cuerpo de Ray haciendo que esta se encogiese de nuevo. 

Las caras de los dos hombres que se encontraban en la parte baja de la cubierta reflejaron asombro al ver a la chica desconocida. 

- Llévala y trata sus heridas - dijo entonces Law - yo tengo algo que hacer antes de abandonar la isla - estaba acabando la frase cuando noto que el cuerpo que sostenía su mano se tambaleaba. 

Giró la cabeza instintivamente para ver cómo la chica respiraba cada vez con más debilidad. 

Ray sintió como su cuerpo pesaba cada vez más y perdía el hilo de la conversación que estaba desarrollándose a su alrededor, sin poder evitarlo perdió la conciencia. 

Law actuó lo más rápido que pudo agarrando por la cintura a la chica cargando el peso de esta sobre su cuerpo. Maldijo por lo bajo y movió su mirada hacia los dos Mugiwara que habían avanzado hacia ellos al ver la situación. 

- ¿Qué ha pasado Torao? - grito el reno saltando del hombro del cyborg acercándose a los dos que estaban frente a la puerta de la cocina. 

- Se a desmayado - aseguró el del gorro de piel sintiendo el pulso leve de la joven y cómo respiraba de manera casi imperceptible - Estabilízala hasta que yo vuelva, intenta que no reciba luz directa en los ojos si vuelve en sí, ha estado encerrada en un lugar oscuro y la claridad arrepentida puede dañar sus retinas - informó al reno. 

El reno se mantuvo en silencio analizando a la chica, miró a Franky que se había mantenido un poco más alejado de la situación. El peli-azul se acercó entonces entendiendo la mirada de su amigo, agarró con cuidado a la peli-negra quitándole el peso a Law para después cargarla sobre su hombro. 

-Ah una cosa más - dijo Law antes de que ambos se alejasen de él - No la quiteís las esposas. 

Los dos Mugiwara intercambiaron una mirada de incertidumbre entre ellos para luego comenzar a caminar. El capitán de los Hearts vio cómo los dos se alejaban del lugar en dirección a lo que sería la sala médica. Necesitaba más información pero evidentemente ese no era el momento de obtenerla.  

Con paso lento se adentró en el interior de la cocina cogiendo su Kikoku, estiró los dedos de la mano izquierda activando su Room. 

- Shambles - susurró, desapareciendo al momento del lugar.