H E A T H E R
-¡Cumpleaños a ti, feliz cumpleaños a ti, feliz cumpleaños, Ayres... Feliz cumpleaños a ti! -Ayres sopló las velas y luego todos nosotros aplaudimos.
Ya era 10 de agosto. Era el cumpleaños de Ayres. La semana había pasado demasiado rápido. Justo ahora le estábamos celebrando su cumpleaños en su departamento, y mañana iríamos a las montañas. Conseguir en dónde quedarnos no fue para nada fácil pero gracias a Dios un amigo tiene una cabaña cerca y me la presto. Ayres invito a algunos de sus amigos y en eso también va a ir el pelirrojo y su novia. Vamos a quedarnos mínimo una semana, y trataré de que Ayres lo disfrute lo más que pueda.
-¡Feliz cumpleaños, cariño! -Claudia abrazo a su hijo.
Ayres se sentó y yo me senté al lado de él, mientras que Claudia y Lori repartían el pastel.
-No puedo creer que ya tengas veintiuno -lo mire y el soltó una risilla.
-Y yo no puedo creer que tú todavía tengas diecinueve -bromeó.
-¡Oye! Cumplo los veinte el 15 de noviembre, ya falta poco.
-¿Vas hacer algo por tu cumpleaños? -él me preguntó.
-Pienso pasarla con mis padres...
-Oh, ya.
Tiempo después Lori nos dio nuestros pedazos de pastel y disfrutamos el resto del día.
***
-¿Quieres ser mi novia?
Ayres se arrodilló y yo quedé impactada. Mi sueño se había hecho realidad. Ayres Jones me estaba pidiendo ser su novia. No pronuncié nada y lo único que hice fue asentir con la cabeza. Él se levantó y agarró mi manos, para luego acercarse a mí, estaba tan cerca de mi y casi íbamos a unir nuestros labios, cuando...
La alarma sonaba y mis ganas de no querer levantarme peleaban contra eso.
¡Oh, vamos! ¡Estaba teniendo un buen sueño!
¡Se trataba de Ayres!
Ayres...
Cumpleaños...
Salida...
Montaña...
Me pare rápidamente porque según yo, íbamos a estar temprano en al cabaña. Mire el reloj y suspiré aliviada porque apenas eran las 6:22.
Me bañé, me vestí, acomode lo que me iba a llevar y salí para encontrarme a un Ayres listo para la aventura.
-Buenos días, veo que ya estás listo -él giró para verme y me sonrió de boca cerrada.
-Sí, y estoy muy emocionado al respecto -yo le devolví la sonrisa - Ven, te ayudo a bajar las maletas.
Me agradecí por eso y yo también yo ayude a bajar las maletas. Ya abajo, estaba la señora Claudia y Lori ayudándonos a montar las maletas en la camioneta.
-¿Tienen todo listo? -Claudia pregunto y nosotros asentimos con la cabeza.
-¿Toda la ropa lista?
-Sí
-¿Teléfonos?
-Sí.
-¿Las carpas?
-Sí.
-¿El protector para los mosquitos?
-Sí.
-¿Comida?
-Sí, mamá, no te preocupes -Ayres le beso la mejilla a su mamá y luego a su tía Lori para despedirse. Yo les di un abrazo y luego me monte en la camioneta.
-¿Estás preparado? -le dije a Ayres ya en el carro.
-Sí, ¿Y tú?
-Sí tú lo estas, yo también.
Y pusimos en marcha el carro, listos para ir a las montañas de Alverton.
***
Me baje del carro y mire el lugar. Todo era demasiado lindo, o al menos para mí ya que me encanta la naturaleza. Ver los árboles, las plantas y los pájaros cantar, todo era demasiado bonito.
Ya hace media hora que habíamos llegado y estábamos desempacando. Hemos traído demasiadas cosas al respecto, porque íbamos a quedarnos una semana. Obviamente a la señora Claudia y Lori no les gustaban las montañas, y menos se iban a quedar una semana. Ayres estaba ayudándome pero se quedó viendo la cabaña por unos minutos, entonces literalmente estaba llevando las maletas yo sola.
Aún los amigos de Ayres no llegaban, pero a lo mejor lo hacen dentro de unos minutos. Y, tocando ese tema, espero caerles bien, no quiero caerles mal y yo irme de la cabaña por eso, cuando yo quiero que Ayres la pasé bien.
Ayres es muy reservado en sus cosas, por lo tanto no me habló mucho al respecto de sus amigos. Pero desde mi punto de vista, pienso que fue su decisión y obviamente se la respetaba.
Ayres se dio cuenta que estaba cargando las maletas sola y vino a ayudarme.
-Lo siento, me entretuve demasiado.
-No te preocupes...
Ya después de por fin sacar el medio departamento que nos había metido la señora Claudia, habían tocado el timbre de la cabaña y supuse que eran los amigos de Ayres. Él mismo fue a abrir.
-¡Llegamos! -escuche la voz de una chica.
Entro ella, y abrazo a Ayres. Era una chica más o menos de mi estatura, con el cabello rubio al igual que el mío solo que el de ella estaba un poco más corto, acompañada de unos ojos azules profundos.
-¡Hola, Ayres! -otra chica más se le lanzó a Ayres.
Vaya...
Esta chica era un poco más baja que la otra, y tenía el cabello castaño con unos ojos color miel muy bonitos.
La chica castaña en cuanto alzó la cabeza y me vio rápidamente vino hacía mí.
-¿Quién es esta linda chica? -me estiró su manos y yo la acepte.
-Heather.
-¡Qué lindo nombre! Yo soy Kate. -me sonrió.
Luego, la chica rubia se separó de Ayres y también se acercó a mí.
-Hola, me llamo Stacy, Stacy Williams -me estiró la mano y yo se la acepte.
-Heather Beckinsale. -le di una sonrisa de boca cerrada.
Ahora los que entraban por la puerta eran, tres chicos y dos chicas más. A los únicos que reconocía de los demás eran a Gabriel y a Olivia. Ayres al ver a la última chica que había entrado, frunció el ceño y le pregunto disimuladamente a su mejor amigo el porqué ella estaba aquí. No pude seguir escuchando más porque ellos dos se fueron hablar a un lugar privado.
-Heather, él es Gregory -la chica rubia llamada Stacy me presento a uno de los amigos de Ayres. Qué, a decir verdad me pareció súper amigable en cuanto lo vi.
Le estire mi mano y él la aceptó.
-Un placer en conocerte, linda -me sonrió pícaro.
-Oye, ya, es de Ayres -él otro chico empujó a Gregory para ahora darme la mano a mí -. Connor, Connor Wells, hermosa -me estiró la mano y yo con gusto la acepté.
Ya va... ¿Cómo que de Ayres?
La otra chica, me estaba viendo detalladamente y yo me incomode por eso. Luego ella se acercó a mí y me estiró la mano.
-Darlis. Darlis Scott.
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La chica del Café © [#1] ✓
RomanceAyres Jones y Heather Beckinsale, dos jóvenes que sueñan con un amor de películas desde su infancia. Los dos llevarán su amor mucho más allá de los que ellos puedan imaginar, cuando su historia continuó en aquella cafetería. Ayres tendrá que enfrent...