#6

766 67 19
                                    

Idiota, se dijo a sí mismo. No debería haber dejado que su temperamento se llevara lo mejor de él.

Cuando sus clases habían terminado, Andrés se dirigió a la oficina de Coronel, según lo ordenado. Tomando una profunda respiración, él llamó a la familiar puerta.

-Pase.

Andrés entró y cerró la puerta con cuidado. Luego caminó hacia el escritorio de Coronel.

-¿Y bien?-. dijo Andrés, cruzando los brazos sobre su pecho.

Lentamente, Coronel miró hacia arriba. La expresión de su rostro era positivamente de piedra mientras movía un pedazo de papel hacia Andrés, su tarea que había entregado. -¿Cuál es el significado de esto?

Andrés tomó el papel y volvió a leer la única oración escrita allí, como si no supiera lo que decía.

"¿Quiere reprobarme así no tendré más remedio que chupar su pene de nuevo?"

Interiormente, Andrés se encogía un poco. No podía creer que había perdido la cabeza y en realidad había escrito eso. Pero en voz alta, dijo: -¿No sabe leer, señor?-. Hace sólo unos días, él no se habría atrevido a utilizar este tono con Coronel, pero al parecer, haber tenido la verga del hombre en su boca hizo maravillas inefables.

Coronel se paró y caminó hacia él. Él se detuvo sólo a unos pocos centímetros de distancia.

Andrés no se movió, negándose a dejarse intimidar por ese hombre.

-Puedo expulsarte por esto-. dijo Coronel.

-Claro que puede, pero se conseguiría el despido y su carrera dañada cuando todo el mundo se enterara de que negocia calificaciones por sexo o por una simple mamada.

Coronel lo agarró del cuello. -Pequeña mierda-. Su mano se apretó en su garganta. -¿Estás amenazándome?

-No-. Dijo apenas. -Yo puedo hacer cosas mejores que esas, pero no disfruto que me intimiden. Yo no le obligué a empujarse en mi boca, profesor.

Las fosas nasales de Coronel se encendieron. Él no dijo nada, su mandíbula trabajando.

-En serio, ¿Cuál es su problema conmigo?-. dijo Andrés, luchando por respirar a través de la presión del agarre de Coronel. -No puedo ser el único estudiante que utilizó. No estoy orgulloso de lo que hice, pero fue un trato justo: ambos obtuvimos algo. ¿Por qué está jodiendome la existencia?

-Nunca cambié calificaciones por sexo-. dijo entre dientes. -Tú eres la única excepción.

Andrés parpadeó. -¿Qué? Pero yo he oído-...

-Sí, tengo ofertas todo el tiempo, pero reporto a cualquiera que es tan estúpido como para sugerirlo abiertamente. ¿Me veo como alguien que cambiaría notas por cualquier cosa, Saavedra?

Era cierto. Esa era la razón por la cual Andrés había tenido problemas para creerlo cuando Victor le había dicho el rumor.

-Pero entonces...-. Andrés estudió a Coronel. -Entonces, ¿Qué hay de mí?

El silencio se prolongó. Y se prolongó. Y se prolongó un poco más.

Mierda.

Andrés se pasó la lengua por los labios. -Usted me quiere-. Él dejó escapar una tierna risita. -Wow. Estoy... algo así como halagado. Todos me quieren, es verdad, pero no me lo espere de usted.

Coronel lo fulminó con la mirada, su agarre apretándose en la garganta de Andrés. -Es sólo lujuria, nada más. Yo no le daré un tratamiento especial.

MORBOSODonde viven las historias. Descúbrelo ahora