Esto no es por mí, es por ti.. #Sheo

Capítulo 8.

Esa fiesta, sería una de las mejores a las que he ido en estos últimos meses...

Eran cerca de las 1 de la madrugada y la fiesta del bar estaba que ardía. Con los del cast estábamos haciendo cualquier show en el VIP, bailar y cantar a estas alturas era de lo más natural, cantaras bien o mal, para nosotros eras una estrella del rock. Bailar, pues, mostré mis súper pasos, que de súper no tienen nada, pero el motivo lo ameritaba, estábamos alrededor de un circulo, y el juego era simple, verdad o desafío, si escogíamos desafío, debíamos bailar al centro del círculo, con la mejor performance que tuviésemos sino, el vaso que allí había lo iban rellenando con el trago que cada uno tuviese, y quien perdiera se bebía esa bomba mortal, y digo bomba, porque perdí, y vaya señores, ese trago esta para despertar a los muertos. Ya estábamos todos tan bebidos, que estar unos con otros abrazados o bailando era normal y nadie lo veía extraño, refiriéndome a que se arme cotilleo posterior a eso. Era mi oportunidad de estar cerca de Shai estás últimas horas que nos quedan, porque después quien sabe Dios cuando la vuelva a ver. Ella se encontraba junto a Miles y Ansel riendo como siempre, esa sonrisa que contagia a cualquiera, pude ver, como se puso a bailar cuando cambiaron la música y Miles rápidamente se puso a bailar con ella. Me entraron los mil demonios, aunque tuviese más que claro que eran solo amigos no soportaba que estuviese tan cómoda con él y que conmigo demuestre cierta lejanía cuando estamos tan próximos el uno al otro, estoy llegando a pensar, que le debe de gustar alguien y que debe ser de aquí y por eso se aleja lo más que puede. Pero como dicen por ahí puede que este comprometida pero no muerta, terminé de beber mi Vodka y me aproxime donde se encontraban bailando. Le toque el hombro a Miles, quien se volteo a mirarme y me sonrió.

- Toda tuya amigo.- Y se marchó a la barra en busca de algún trago por lo que alcancé a ver.

Shai mientras bailaba me miraba y era obvio, no me he movido un centímetro, parezco como si me hubiesen pegado los pies al suelo, por lo cual se acerca, coge mis manos y empieza a moverse de tal forma que yo también comienzo a bailar junto a ella. Su sonrisa, su mirada, eran todo para mí en ese momento, la hacía girar sobre sí misma, después la aferraba junto a mí y prácticamente el baile que teníamos era demasiado sensual para el gusto de varios, pero yo estaba en mi mundo y al parecer Shai igual. Nos reíamos a carcajadas de cada movimiento que a ella o a mí se nos ocurrían, podía sentir que estaba mucho más relajada que las últimas veces que compartíamos juntos, no intentó zafarse de mi agarre y tampoco se veía incomoda con la proximidad que teníamos. Ya llevábamos casi 45 minutos bailando, así que me acerque un poco más para susurrarle al oído que fuéramos a la barra por algo de beber y descansar, a lo que ella hace un gesto de aprobación y marchamos rumbo a la barra. Era tanta la gente que allí se encontraba, que le iban dando empujones a Shai, por lo que la cogí de la mano y la puse frente mío, la apegue a mi cuerpo y con uno de mis brazos la rodee, típica pose de pareja que caminan como si nada les importará, cosa que a mí en ese instante también me importaba poco lo que dijeran, era una buena causa tanto para ella, como una buena causa para tenerla cerca mío, mi otra mano libre se encargaba de ir apartando a la gente de enfrente para que a Shai ningún estúpido la fuese a empujar nuevamente. Una vez sentados en la barra, Shai y yo pedimos nuestros tragos, ella pidió un Martini y yo otro vaso de Vodka.

Nuestra conversación en estos momentos, se centraba en comentar el ridículo que estaba haciendo Ansel con su intento de baile break dance y como Jai le animaba a seguir, conociéndolo, se tiene que estar partiendo de la risa.

En eso me volteo a mirar a Shai porque se había callado y no era normal siendo en el estado en que estaba hace 2 minutos atrás, y para mi impresión y el rostro que vi, hizo que mi corazón se afligiera como nunca antes. Shai me estaba mirando y lágrimas corrían por su rostro, no entendía que fue lo que paso o que vio para que estuviese así, sólo atine a bajarme del asiento de la barra y ponerme frente de ella para abrazarla y contenerla, si necesitaba llorar, prefiero que sea en mi hombro y que nadie vea ese hermoso rostro, que a pesar de las lágrimas demuestra la sinceridad de Shai.