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A la mañana siguiente, Sakura se preparó con entusiasmo para iniciar su entrenamiento especial de cara a las finales.

Al llegar al campo de entrenamiento, su emoción era palpable, ansioso por descubrir qué le enseñaría Kakashi.

Sin embargo, conforme avanzaban las horas, esa emoción inicial se desvanecía ante la ausencia de Kakashi.

—Buenos días, Sakura-Chan —saludó Kakashi con voz perezosa, apareciendo finalmente.

—¡Llega tarde! —Sakura lo señaló con reproche, levantándose abruptamente del suelo donde se había recostado.

—Lo siento, una ancianita se cruzó en mi camino y tuve que ayudarla con sus compras —se excusó Kakashi con cierta pena.

—¡Como si fuera creíble! —Sakura se cruzó de brazos indignado—. Pensé que perdería esas costumbres...

—No pidas milagros —respondió con una sonrisa.

—Debería darle vergüenza... —murmuró Sakura, sus ojos enfocados en cada movimiento de su Sensei.

—Bien, será mejor que comencemos —dijo Kakashi, extendiendo lo que parecía ser un paquete hacia Sakura.

El Haruno observó el paquete con mezcla de duda y curiosidad, extendiendo ambos brazos para sostenerlo con precaución.

Cuando Kakashi dejó el paquete en sus brazos, un repentino peso emanó de él, provocando que Sakura se desplomara sobre el suelo, haciendo que este mismo se agrietara.

—¿¡Qué demonios...!? —exclamó Sakura, forcejeando para liberar sus manos—. ¡Podría haberme avisado que esto pesa una tonelada!

—Eso le habría quitado la gracia —se burló el mayor mientras abría el paquete.

Sakura se asomó, descubriendo una variedad de protectores: guantes, un chaleco, tobilleras y diversas herramientas.

—Viendo tu cara, parece que ya te haces una idea de por dónde va todo —mencionó Kakashi.

—Son parecidos a los que usa Lee... —recordó Sakura.

—Exacto —asintió Kakashi, mostrando las muñequeras y tobilleras—. Vas a llevar esto durante el resto del mes. Te ayudará a mejorar tu velocidad, agilidad y fuerza. Comenzarás con estos para acostumbrarte, luego usarás los demás...

Sakura asintió y, con un esfuerzo sobrehumano, logró colocarse las muñequeras y tobilleras. Su cuerpo apenas respondía debido al peso que ahora cargaba.

El pequeño Haruno miró nerviosamente a su Sensei, quien parecía estar preparado para llevarlo al límite.

Con esto, dio inicio un entrenamiento de Taijutsu en el cual Sakura fue completamente superado al no poder moverse con soltura.

Los ejercicios físicos continuaron, con castigos duplicados si Sakura no los completaba a tiempo o cometía errores, haciendo que cada tarea fuera aún más desafiante. Las emociones del joven se entremezclaban entre frustración y determinación.

—Hoy fue un buen día —concluyó Kakashi, observando cómo el sol se escondía y su estudiante yacía en el suelo en una posición extraña, como si hubiera caído desde gran altura y se hubiera quebrado los huesos—. Mañana usarás el chaleco, ¿qué dices?

—Me reservo mis comentarios —jadeó Sakura, intentando levantarse con su cuerpo tembloroso.

Era la primera vez que su cuerpo se aventuraba más allá de sus límites, como si Kakashi estuviera decidido a romperlo para luego reconstruirlo.

[🌺] ¡Sakura es un Chico! ━━━ Naruto BLDonde viven las historias. Descúbrelo ahora