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Sakura se apoyó con la espalda contra la barandilla del puente, perdido en sus pensamientos. A su lado, Sasuke tenía una actitud relajada mientras esperaba la llegada de Naruto y Kakashi.

El cielo azul y las nubes flotantes capturaron la atención de Sakura, quien con sus intensos ojos verdes observaba el paisaje con serenidad. A pesar de la tranquilidad que los rodeaba, el interior de Sakura estaba en agitación.

Los recuerdos de su misión más importante en el País de las Olas seguían atormentándolo. Esta misión le hizo confrontar una dura realidad: su propio valor en el equipo. Sakura llegó a la dolorosa conclusión de que no aportaba mucho, o mejor dicho, nada.

Su inteligencia, que antes consideraba su mejor cualidad, parecía insignificante comparada con el talento natural de Sasuke y la energía inquebrantable de Naruto. La sensación de ser dejado atrás, observando cómo sus compañeros avanzaban sin él, viendo sus espaldas, le causó un dolor inmenso.

Sin embargo, en ese momento, se sentía impotente, incapaz de cambiar su situación.

Porque simplemente no podía hacer nada. Se sentía desprovisto de los medios, el poder y la determinación necesarios para caminar al mismo ritmo que Naruto y Sasuke. Sabía que nunca podría alcanzarlos, nunca estar a su altura.

La mera idea de intentar cambiar se le antojaba como un esfuerzo inútil y vacío, uno que no lo llevaría a ningún lugar. Se había convencido de que simplemente no podía ser fuerte, no importaba cuánto lo intentara.

Mientras se perdía en estos pensamientos desalentadores, el sonido de pisadas apresuradas lo sacó de su ensimismamiento. Volvió la cabeza hacia el ruido y vio a Naruto acercándose a toda velocidad.

—Buenos días, Sakura-Chan —lo saludó Naruto con su característica energía—. ¿Qué cuentas?

Mientras Naruto hablaba, no pudo evitar notar las miradas retadoras que se lanzaban él y Sasuke. La tensión en el equipo se había vuelto palpable desde su regreso de la Misión en el País de las Olas, y eso estaba afectando negativamente su capacidad de trabajar juntos.

Sakura suspiró, vencido por la situación que le estaba causando un dolor de cabeza. Además de lidiar con su propia percepción de inutilidad, tenía que soportar el comportamiento infantil de sus compañeros y su rivalidad constante.

—Estaría mejor si ustedes dos pudieran pasar tan solo 10 minutos sin lanzarse miradas —protestó Sakura entre dientes, apretando la mandíbula—. Han estado así desde que volvimos de la Tierra de las Olas. Se comportan como dos mocosos, incluso los niños pequeños harían un mejor trabajo.

—Tú no eres mejor —replicó Sasuke, observando a Sakura de reojo—. Fastidioso.

—¿Disculpa? —Sakura alzó la barbilla, visiblemente ofendido—. Yo sé comportarme, Uchiha Dramático.

—De hecho, Sakura-Chan... —Naruto intentó intervenir, pero una mirada seria de Sakura y sus penetrantes ojos verdes lo hicieron guardar silencio.

La expresión en el rostro de Sakura habló más que cualquier palabra que pudiera decir. Su mirada contenía una mezcla de enojo, desaprobación y exasperación, y bastó para poner fin a la conversación de inmediato.

Pasaron horas en silencio, esperando a que Kakashi finalmente hiciera su aparición.

—Hola chicos, buenos días —Kakashi apareció con su característica actitud despreocupada, levantando una mano en un gesto de saludo—. Perdón por la demora, me perdí en el sendero de la vida.

—¿¡QUÉ!? —Naruto y Sakura gritaron en indignación al unísono, rechazando la excusa barata de su sensei.

Sakura tuvo que luchar contra sus deseos de golpear a Naruto, quien ya estaba fantaseando con su próxima misión, en la que planeaba superar a Sasuke.

[🌺] ¡Sakura es un Chico! ━━━ Naruto BLDonde viven las historias. Descúbrelo ahora