Capitulo Trece

1.1K 103 0
                                    

Paso una semana completa sin hablarse con el espadachín, se habían ido de la última isla unos días después de sufrir las quemaduras por el sol, la mantuvieron encerrada en la habitación con reposo y ungüentos, cuando por fin elevaron ancla y se marcharon del lugar, una vez que su piel se recupero la dejaron salir a cubierta, Sanji bailo feliz de tenerla de regreso, y sus compañeros celebraron su recuperación, todos excepto el peliverde quien simplemente la observo molesto desde la comodidad de la baranda donde estaba descansando sentado en el suelo con sus brazos cruzados sobre su pecho. El resto de los días pasaron lentos y dolorosos para ella, se evitaban mutuamente, la peliblanca era consciente de que quizá estaba exagerando, pero el tampoco mostraba intenciones de querer disculparse.

La isla actual en la que se encontraban ahora era blanca y helada, Brook, Chopper y ella eran los más acostumbrados y aclimatados al lugar, el musico simplemente porque estaba muerto y no sentía frio; podía sentir su risa en el fondo de su cabeza, riéndose de sus chistes sobre la muerte; y el renito junto a ella debido a que crecieron en islas de invierno tal como esta, y aunque ella dejo su isla natal a la corta edad de siete años, había pasado por rituales extremos para acostumbrarse al frio, como por ejemplo, sumergirse en el lago de la luna, un estanque de agua helada que pese al clima jamás se congelaba, cada habitante del reino debía nadar en sus agua, como ofrenda a la luna, de esa forma se ponían a disposición de la máxima divinidad de la isla.

Todos menos Usopp y Jimbe, bajaron del barco para recorrer la isla, el doctor fue por algunas medicinas, yerbas y libros, Robin a investigar la historia de la isla, Sanji y Franky fueron al mercado por insumos para la despensa, Nami fue con ellos con la condición de que cargarán además las bolsas de la compras que ella realizaría después de acompañarlos, Luffy había saltado del barco apenas estuvieron lo suficientemente cerca del puerto, y Zoro había desaparecido en algún momento. Ella busco algún lugar donde vendiesen pólvora y veneno para poder fabricar más flechas, así que después de encontrar todo lo que necesitaba, se dedico a conocer la isla, era un lugar pequeño pero bonito, con personas educadas y amables, saludo a muchas personas en las horas que camino, de pronto tomaron su mano y la comenzaron a arrastrar, volteo molesta a defenderse de quien la estaba secuestrando, observo sorprendida a Sanji quien seguía caminando con el ceño fruncido, además, arrastrando en su otra mano a Zoro. Tanto ella como el peliverde fueron llevados contra su voluntad por el rubio a un hotel, subió a hasta la habitación y los lanzo a ella como si pesaran un kilo cada uno.

- Si no se arreglan para cuando vuelva, olvídense de mi - Cerro la puerta -

- Puedo vivir sin ti, cocinero de mierda - Le grito furioso -

- No sin el sake - Abrió la puerta, enojado - Y hare hasta lo imposible por que no tomes ni una gota de él y a tu princesa...

- Yo no puedo vivir sin ti - Sentencio seria, logrando enmudecer al rubio -

- Ya - Susurro sonrojado - Arreglen su mierda - Volvió a cerrar la puerta -

Quedaron solos en la habitación evitando mirarse, los dos tenían la suficiente fuerza para haber evitado ser obligados a estar en aquella habitación, pero ambos sabían que debían solucionar su problema, no solo por el miedo de perder a Sanji, si no más bien, por el temor de perderse entre ellos, tanto el espadachín como la arquera tenían claro que era un tema de orgullo el que aun no hayan hecho las pases.

- No eres una marine - Soltó sin mirarla -

- Eso yo lo tengo claro - Respondió seca -

- Yo también.

- ¿Esto es una disculpa? - Lo enfrento molesta -

- Si - La miro arrepentido - Discutimos por una estupidez, no debí decirte Marine - Acaricio su mejilla -

- No, no debiste - Dudo si alejarse de el - Estoy cansada de sentir que debo probar que mi lealtad esta con la tripulación ¿Qué mas debo hacer para que dejes de considerarme una Marine?

- No lo hago, lo juro.

- Pero cada vez que puedes me restriegas en la cara mi pasado - Termino por alejarse de el -

- No lo hago apropósito - Bajo su mano apenado -

- Eso es peor - Susurro dolida - Eso quiere decir que en el fondo aun no soy alguien de confianza para ti - Cruzo sus brazos por sobre su pecho -

- Eres una de las personas en quien mas confió, y lo sabes Mizuki.

- Lo sé - suspiro cansada - Estoy discutiendo por nada de nuevo - Bajo sus brazos y se acercó a Zoro - Lamento ser tan dramática - Lo abrazo por la cintura y apoyo su mentón en su pecho mirándolo a los ojos -

- Yo también lo siento - Beso su frente - No te acostumbres a esto - Desordeno su cabello para molestarla -

- ¿No puedes ser tierno por mas de un segundo, cierto? - Frunció su ceño -

- No quiero ser tierno.

- Me encantas cuando lo eres - Le sonrió ampliamente -

- A mi me gusta cuando sonríes así - Apretó su nariz suavemente -

- Ves que puedes ser tierno - Le mostro la lengua y se alejó rápidamente para evitar represalias en su cabello -

El rubio abrió la puerta nuevamente, había estado todo el tiempo apoyado en la pared del pasillo fuera de la habitación, esperando pacientemente que conversaran y se reconciliaran, no le gustaba estar en medio de los dos, habían pasado suficientes meses juntos para comprender que o eran los tres o nada, jamás se imaginó en una relación poliamorosa, sintiendo tanto por dos personas que incluso si ellos discutían, él se sentía afectado, sonrió al ver el ambiente mucho mas relajado.

- ¿Entonces ya se arreglaron? - Los miro con su ceja elevada -

- Sip - La peliblanca abrazo con fuerza el costado del espadachín -

- ¿Sabe pedir disculpas? - El rubio se burló -

- No, aun le falta practicar - Ella miro al peliverde entretenida, este los estaba mirando molesto - Pero la intención es lo que vale.

- ¿Quieren perder la cabeza? - La empujo lejos de él -

- Estoy segura de que ambos ya la perdimos por ti - Le lanzo un beso, coqueta -

- Habla por ti, princesa - La abrazo por la espalda y apoyo su mentón en su cabeza -

- No te hagas Sanji - Ella levanto su cabeza para verlo a los ojos - Tu la perdiste antes que yo - Le sonrió -

- Claro - Rodo sus ojos fingiendo repugnancia - Me alegra que hayan conversado y arreglando las cosas - Les sonrió con suavidad - Ambos son unos cabezotas.

- ¿Esto deberíamos celebrarlo o no? - Sonrió coqueta la peliblanca -

- ¿Solo piensas en sexo, mujer? - Se sentó en la cama -

- No he dicho como deberíamos celebrar - Fingió inocencia - Tu eres el malpensado Zoro.

D O S - Zoro x OC x SanjiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora