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18 - Rumores

Todos los jugadores del equipo estaban ya reunidos en el vestuario. Wenhan se subió a uno de los bancos y dió palmadas para atraer la atención del resto.

- Bien, chicos. Conseguimos llegar hasta aquí. Hoy será un partido muy importante. Si logramos ganar, estaremos en el podium y pasaremos a la final. Es momento de poner sobre la cancha todo nuestro esfuerzo. Esos arquitectos llegaron hasta aquí derrotando a equipos más débiles que nuestros contrincantes. Así que, ¡Avancemos a la final!

Unos ligeros aplausos finalizan el discurso del capitán y cada uno regresó a su labor. Wenhan se quedó solo. Miró para su mejor amigo, quien negaba con la cabeza.

- ¿Pero qué os pasa?

- Capi, es la semifinal de la liga universitaria. No hace falta tanto énfasis - dijo Bowen -. Más que eso, me gustaría, y creo que no soy el único que piensa así, que nuestro jugador estrella aclare los rumores que se han esparcido por el campus.

- ¿De qué rumores hablas, Bowen?

- Tal vez has estado demasiado entretenido entre las piernas de un joven omega, pero por las redes del campus no dejan de circular rumores sobre él. Después de mucha habladuría, el más extendido es que ese joven te drogó y te obligó a marcarlo. Que es un cazafortunas y que te quiso atar con una marca. Entre otras muchas cosas que se comentan. Cada cual más absurda. Hay quien especula que no sólo te ha atado con una marca, sino también con un bastardo.

Yibo rompió en cólera y dio un puñetazo al casillero de su compañero casi rozando la cara de éste. Lo agarró por la camisa y lo empotró contra la puerta metálica.

- ¿Qué cojones haces Yibo?

- ¿Quién ha dicho eso? Le arrancaré el cuello a cualquiera que hable mal de mi omega - los ojos de Yibo empezaban a tornarse dorados.

- Pues tendrás que arrancarle el cuello a más de medio campus - Bowen se soltó del agarre y empujó al alfa para poner distancia entre ellos -. ¡Demonios, Yibo! No hay quién te entienda últimamente. Yo sólo te estoy informando sobre lo que se habla por ahí. No culpes al mensajero del mensaje.

- Primo, calma. Bowen es nuestro amigo. Vuelve en ti - Haoxuan sostenía a su primo del brazo. Yibo empezó a calmarse -. Así está mejor. No suelo hacerle mucho caso a las redes del campus, sin embargo, algo había leído. Será mejor que aclaremos esto. Somos un equipo, ¿recuerdas?

- Bien, pero que quede claro que Zhan no es ningún cazafortunas, no tiene la necesidad de ello. Él es uno de los herederos de una gran empresa, por lo que el dinero le sobra. Además, aquellos que lo conocen saben perfectamente que es el omega más sencillo y humilde que existe. Nunca alardeó de la fortuna de su familia. Tampoco me ha drogado ni obligado. Lo marqué porque él es mi destinado. Aunque no haya marca de por medio, nuestro destino es estar juntos. Y sí, él está esperando un cachorro mío. Tendremos a nuestro hijo porque así lo hemos decidido ambos. Ahora, volvamos a centrarnos en el partido. Creo que es más importante que unos estúpidos rumores.

- No lo es si ese joven se entera de ellos - obvió Bowen.

Yibo palideció. Estaba tan enfocado en limpiar el nombre de su omega que no se dio cuenta de ello. Zhan iría a verlo y seguro que los rumores lo alcanzarían. Tenía que hablar con él de inmediato. Buscó su teléfono y una vez en sus manos, marcó el número del omega. Mientras esperaba la respuesta, fue a un lugar más tranquilo para hablar con él. Cuatro tonos después, Zhan contestó.

- ¡Yiyi!

- Hola conejito. ¿Dónde estás?

- Acabamos de subir al bus. Estamos de camino.