28 - Nueva oportunidad

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- ¿Lo ves, querida? Nuestro hijo está en buenas manos. Ha elegido a un buen muchacho. Será muy joven, sin embargo tiene un corazón noble y decidido. Dale una oportunidad. Así, en un par de años, cuando Haikuan ocupe mi puesto en la empresa, podremos mudarnos para estar más cerca de ellos.

El matrimonio Wang observaba al joven omega. Zhan servía la cena con una gran sonrisa. Estaba muy contento. Tenía la oportunidad de acercarse a su suegra y ganarse su favor. Yibo se sentía orgulloso de la persona con la que pasaría el resto de su vida. Gracias a su valentía, amor y tesón, su madre estaba ahí. Podría darle la familia tanto anhelaba. Todos cenaron tranquilos, comentando las cosas del día a día. Haikuan trataba con gran atención a Zhou Cheng. Él también estaba decidido. Decidido a ganarse el amor del omega.

- Papá, mamá. Me gustaría hacer una confesión y así evitar malos entendidos. No quiero que suceda lo mismo que con Yibo. Os quiero decir que desde hace un tiempo, alguien se ha robado mi corazón.

- ¡Hijo! ¡Por fin! - exclamó Carman - Pensé que morirías soltero y que nunca me darías nietos. Y dime, ¿quién es ella? Seguro que es una alfa hermosa.

- Mamá, es él y no es un alfa. Es un omega. El más hermoso que han contemplado mis ojos.

- ¡Hai! Imposible. Sabes que es tradición que el primogénito se case con una mujer de su misma casta.

- Lo sé, pero creo que hay algo más importante y eso es mi felicidad. Debemos evolucionar y dejar a un lado esas reglas. Con él también podré tener hijos alfas. Aunque serán nuestros hijos, por lo que su segundo género es lo que menos me va a importar.

- ¿Y cuándo nos lo vas a presentar? - preguntó Zi Teng.

- En realidad, ya lo conocéis. Aún no me he declarado formalmente, por eso quería aprovechar esta cena para hacerlo, con todos vosotros como testigos - se volvió hacia Zhuo Cheng -. Chengchen, como acabas de escuchar, estoy enamorado. Enamorado de ti. Mis sentimientos son serios y quiero demostrártelo, por eso mismo... ¿Permites que te corteje formalmente?

- ¡Ja! Lo que me faltaba. Ahora tú también. ¿Qué tienen los hermanos Xiao que han enredado a mis hijos? ¿Acaso os han hechizado?

- ¡Mamá! No digas esas cosas. Uno no elige a quién amar. Simplemente, sucede.

Zhou Cheng se puso en pie. Se sentía acorralado. De entre todos los momentos, Haikuan había elegido ese. Su hermano estaba haciendo todo lo posible para ser aceptado por la alfa y temía que la declaración del mayor echa por tierra todo el esfuerzo de Zhan.

- Puede que tus intenciones hayan sido las mejores - dijo -, sin embargo, no creo que este sea ni el mejor momento ni el mejor lugar para tu confesión. Lo siento mucho, Haikuan. Tengo bastantes cosas con las que lidiar en mi día a día. El amor no está dentro de mis planes. Ahora, si me disculpan, tengo que ir al aseo - Zhuo Cheng se alejó bastante confundido y alterado. Haikuan suspiró.

- Creo que he metido la pata.

- No te preocupes, se le pasará - Zhan intentó animar al alfa -. Desde que nuestros padres murieron, él siempre se ocupó de nosotros y de sacar a flote la empresa. Si Xiao's family ha crecido tanto fue por su esfuerzo y dedicación constante. Tuvo que asumir las cargas de ser el cabeza de familia a muy temprana edad, incluso si eso significaba olvidarse de él mismo. Recuerdo que cuando yo era un niño, mi hermano no era tan serio. Quiero verlo feliz y que empiece a pensar un poco en él. Si hay alguien que se lo merece, es él. Hai, sé que eres un buen hombre y una gran persona. Puedo ver que tus sentimientos son sinceros. Por eso te pido que tengas paciencia y no flaquees. Si de verdad lo amas, lucha por vuestro amor. Tienes todo mi apoyo.

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