Lo primordial era obtener ayuda de alguien para poder movilizarnos sin que ellos se dieran cuenta. No sabía en quién confiar, nadie a mi alrededor podría ayudarme.
Entonces recordé a ese chico de los Black. Hunter sería mi oportunidad, pero no podía confiar completamente en su ayuda.
Conduje hasta la mansión de los Black, luego me estacione en un lugar seguro y busque a Hunter con mi habilidad.
Una vez lo halle entre a su mente y lo hice venir a mi. Él llegó y subió al auto, dejé de usar mi habilidad, así que él me miró confundido —¿Moira?— murmuró —¿Cómo llegué aquí?
Comencé a conducir, ya que era peligroso seguir por mucho tiempo en ese lugar —Use mis habilidades, no te preocupes por eso— lo mire de reojo.
—Mierda, Moira— miró al frente —Todo el país te está buscando ¿Sabes lo peligroso que es hacer esto?
—Tomare los riesgos que sean necesarios. Siempre y cuando logré mi objetivo.
—¿Tu mataste al Evans?
—Habrías hecho lo mismo estando en mi lugar ¿No?— él no dijo palabra y permaneció en silencio. —Necesito tu ayuda— dije.
—¿Sobre qué?
—Tu familia es poderosa. Quiero tomar prestado ese poder para lograr mi objetivo.
—Creo que estás hablando con la persona equivocada.
—Antes dijiste que podías ayudarnos.
—Eso fue antes de revelarme y perder mis privilegios en la familia.
—Recuperemos esos privilegios— me frene y lo mire —Llevame con el líder de tu familia, con esa anciana molesta.
—Ella no permitiría que yo te lleve a la mansión. Mi abuela es complicada.
—Tu solo permíteme el paso y yo me encargaré de convencerla.
—Pff— él comenzó a reír, pero yo estaba decidida, así que di la vuelta y conduje en dirección a la mansión —¿Qué haces? Esa anciana te matará.
—Bueno, tengo que aceptar que no soy muy buena muriendo— reí y acelere. —¿Conoces a Eliza?— pregunté, ya que su familia era la que la tenía prisionera.
—¿La rastreadora?
—Si, ella ¿Sabes dónde está?
—Creo que la abuela la tiene en una de las casas a las afueras del país. Siempre decía que la chica se ponía mal cuando estaba cerca de más mutantes— miró por la ventana —Jamás preste atención a sus sermones, pero decía que debía mantenerla con buena salud para seguir usándola a su favor.
—Ya veo— Susurré y seguí conduciendo.
Una vez llegamos a la mansión baje del auto y eso hizo que los guardias que se encontraban vigilando la entrada se alarmaran y me apuntaran con sus armas —¡Identifícate!— grito uno de ellos.
—Tranquilos— Hunter bajo del auto y camino a dónde yo me encontraba de pie —Ella viene conmigo— tomo mi hombro y me movió para que comenzará a caminar —Anda ya— dijo.
Los hombres bajaron sus armas y nos permitieron el paso. Luego entramos a la casa y comenzamos a caminar hasta llegar a dónde la anciana se encontraba.
Hunter abrió la puerta que conducía a la sala de estar y entro. Su abuela lo miro —Por fin decides aparecerte— ella dijo con molestia —Crei haberte oído decir que ya no querías formar parte de la familia ¿Te arrepentiste acaso?.
Él caminó y se sentó en el sillón que estaba cerca de la ventana —Aún estoy en mi derecho de venir aquí— miró a su abuela —Me mantendré firme hasta el final. No volveré a formar parte de tu familia si no retrocedes a lo que dijiste.
—Es por tu bien.
—No voy a casarme con esa mujer. Ni en un millón de años lo haré— volvió su vista a la ventana.
—Maldito mocoso— la anciana se puso de pie.
—Mjum— aclare mi voz y entre a la habitación, robando la atención de la anciana. —Si me lo permite, quiero hablar de usted sobre algunos asuntos importantes— me senté en uno de los sillones frente a ella.
—¿Moira Lim?— mostró enfado y miro a su nieto —¿Por qué está ella aquí?
—Él solo me ayudó a entrar. Pero no importa mucho el como haya llegado, ya que pude entrar a esta casa con mi propio pie— la mire —Solo quiero hablar con usted, es todo.
—No hablaré con un mutante, así que largo de mi casa— se paró frente a mi y señaló hacia la puerta.
—Creo que esto le interesará bastante— alce mi vista a ella, ya que se encontraba muy cerca de mi.
—¿Interesarme algo de ti?— se giró y fue a llamar a sus guardias —¿Que podría obtener de ti?
Use mi poder y cerré la puerta de la habitación, así impediría que la mujer saliera y alarmara a sus guardias —Puede obtener mucho más de mi que de esos tontos Evans— la mire.
Ella se dió la media vuelta y volvió — Bien, te escucho— se sentó y me miró — espero que tengas un buen punto, porque de otra forma no obtendrás nada de mi familia— se cruzó de brazos y permaneció en silencio para que yo hablara.
—La cabeza de los Evans murió bajo mis manos— comencé a hablar —Quiero recuperar a mis subordinados, pero ahora todo mundo está buscandome. No puedo ir y venir así como así, no sin ayuda, claro.
—¿Que con eso?— siguió mirándome.
—Necesito su ayuda para pasar desapercibida y no ser atrapada. También quiero de vuelta algo mío que usted tiene.
—¿Para qué haces todo esto?
—Voy a otorgar la libertad a los míos.
—¿Pretendes vencer a los Evans? ¿Acaso sabes a lo que te enfrentas?
—Si, estoy al tanto de las consecuencias, pero mientras los míos sean libres no me importa tomar riesgos.
—Entonces dime ¿Que obtendre a cambio de darte mi ayuda?
—Poder— sonreí.
Esa era una oferta tentadora y que no estaba lejos de mis posibilidades.
La anciana sonrió —Puedes asegurarlo ¿Que tanto poder?
—Cuánto usted desee, siempre y cuando no exceda los límites.
—Entonces tenemos un trato— se puso de pie nuevamente y se fue de la habitación.
Eso había sido más fácil de lo que había pensado, pero ahora con la familia Black de mi lado me seria más fácil cumplir mis objetivos.
ESTÁS LEYENDO
SIMPLEMENTE MÍA
Science Fiction¿Qué pasa con lo que es diferente? Recuerdo que cuando era pequeña mi madre me advirtió sobre mostrarle a los demás mis poderes. Era peligroso hacerlo porque ellos no lo entenderían. ¿Qué pasó conmigo? ¿Por qué estoy aquí? Ahora que llevo años e...