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~Junior~

Kate me había dejado en el mismo lugar en el que nos habíamos besado hace unos minutos, tal vez fue apresurado, o como dijo ella, no era correcto, pero realmente no importaba, Oliver coqueteaba con otras chicas a espaldas de Kate, y lo mismo con Lexy, y no lo voy a negar, estuve deseando este beso desde la primera vez que la ví, aquella vez en la que la sostuve mientras estaba por desmayarse, hasta ahora no lograba entender el motivo de su posible desmayo, pero si algo tenía claro, es que logró hacerme sentir de una manera extraña.

Decidí seguirla, subí las gradas con prisa, en ese instante la ví abriendo la puerta que estaba al final del pasillo, desde lejos pude ver a Lexy con Oliver, mis ojos se abrieron ante la sorpresa, pronto ví como Kate salía corriendo chocandose conmigo, ví sus ojos, ella quería llorar, intenté agarrarla pero fue más rápida y salió corriendo, Oliver la siguió y cuando llegó a mi lugar lo tomé del brazo.

—No.

—¿No qué? ¡Déjame Junior!—el me empujó e inmediatamente aterricé mi puño en su mejilla—¡Joder Junior!—Oliver se abalanzó contra mi tirándome al piso, antes de que pueda darme un puñetazo moví mi cabeza a un lado haciendo que el piso reciba el golpe, empujé a Oliver a un lado y comencé a golpearlo, Lexy corrió a salvarlo.

—¡Junior déjalo!—gritó agarrándome del brazo e inmediatamente la empujé haciendo que caiga al piso.

—Eres una maldita zorra—me levanté del piso observando a ambos—jódanse.

Caminé lo más rápido posible buscando a Kate por toda la casa, revisé cada habitación, cada baño, pero ella no estaba en ningún lado.

~Kate~

Miré mi celular el cuál tenía una notificación, era Junior.

¿Dónde estás? Iré a buscarte.

Miré el mensaje una vez más y apagué mi celular, suspiré cubriendo mi rostro con mis manos, en ese instante escuché unos pasos acercándose a mi.

—Kate, hablemos, por favor—Oliver me tomó de la mano y rápidamente lo empujé.

—No me toques.

—Por favor, deja que te explique—me levanté quedando a solo unos centímetros de el para mirarlo fijamente.

—¿Que quieres explicarme exactamente eh? ¿Crees que estoy ciega? Qué demonios me quieres explicar ¡¿Cómo mierda intentas justificar esto?!—lo empujé mientras el me miraba con pena.

—Mira, se que no puedo justificarlo—no dejé que terminara simplemente levanté mi mano mandandolo a callar.

—No tienes que justificar, ¿Entonces? Esto es una maldita perdida de tiempo Oliver, terminamos, no quiero que te vuelvas a acercar a mi.

—Kate...por favor.

—No, y vete, no quiero verte—Oliver me miró por última vez, y rendido se alejó de mí mientras empezaba a llover.

Me senté nuevamente mientras la lluvia se hacía más fuerte, pero no importaba, solo quería estar sola unos minutos más para pensar, pensar en lo patético que era Oliver, y en lo tonta que fuí. Después de unos minutos sentía que me observaban así, que miré a un lado, Junior se encontraba parado en medio de la calle mirándome, este me sonrió a medias y se acercó lentamente a mí.

—Te estaba buscando—dijo sentándose a mi lado.

—Lo sé—suspiré mirando las luces que iluminaban las calles, la verdad no iluminaban bien.

—¿Estás bien?—preguntó mirándome.

—Si, lo estoy—sonreí a medias y me levanté—tengo que irme.

—Te acompaño—Junior se levantó inmediatamente yo solo lo miré.

—No es necesario, estaré bien.

—No puedo dejar que vayas sola, ya es muy tarde.

Lo observé por varios minutos, estaba totalmente empapado al igual que yo, en su rostro tenía una expresión de confusión, preocupación, y odio, pero aún así, seguía viéndose igual de tierno e inocente, a veces olvidaba que el era un hombre y no un niño, y eso lo molestaba, porque el estaba seguro de ser un hombre, aunque no pensaba como el. Tampoco podía evitar recordar el beso que nos habíamos dado, aquel beso que me dejó con muchas dudas, pero que realmente, me había gustado.

—De acuerdo—dije empezando a caminar, pronto Junior apareció caminando a mi lado en silencio—¿Tu cómo te sientes? También lo viste ¿Verdad?

—Mhm—Junior hizo una mueca mientras caminaba, en este momento no tenía ninguna expresión en su rostro.

—¿Cómo te sientes?—volví a preguntar.

—¿Cómo debería sentirme?—preguntó mirándome.

—No lo sé, ¿No te lastimó de alguna forma?—Junior sonrió y soltó una risa burlona.

—Si claro—dijo riendo—en realidad no me importa, y nunca me importó.

Fruncí el ceño pero no dije nada, me mantuve en silencio al igual que el, las calles se sentían tan vacías y solitarias, no había ningún ruido además de nuestras pisadas sobre el piso mojado debido a la lluvia de hace unos minutos, solo éramos los dos en un silencio no tan incómodo.

—Así que...ahora Jake vive en tu casa ¿Cierto?—pregunté nerviosa.

—Si—respondió con la voz ronca la cual aclaró inmediatamente.

—Oh, ya veo—miré mis manos y suspiré—es una lástima lo que pasó con su padre.

—Si, lo es, que maldita mala suerte—dijo Junior molesto.

—¿Por qué?—pregunté mirándolo.

—Porque no soporto tenerlo en mi casa—dijo devolviendome la mirada para luego detener el paso—¿Seguiremos fingiendo que no pasó nada?

—¿Qué?—pregunté confundida, y luego recordé lo que había pasado en la fiesta, lo que pasó entre el y yo—ah...eso.

—Si, eso—dijo poniendo sus manos en su sudadera.

—¿Por qué tenemos que hablar de eso?

—¿Por qué?—Junior me miró molesto y suspiró—¿Sabes? Tienes razón, fue un maldito error—dió la vuelta caminando en sentido contrario yo rápidamente lo tomé del brazo.

—¿Vas a dejarme sola? ¿Eres idiota? Es tarde, podrían secuestrarme o peor podrían...—el no dejó que terminara simplemente habló en un tono más alto al mío para mandar a callarme.

—Es tu jodido problema Kate—se soltó de mi agarre y se fue caminando.

—¡Idiota! ¡Tú quisiste acompañarme!—grité dejando caer mi bolso, Junior solo sacó su dedo del medio mientras se alejaba más de mí.

Miré a todos lados y pronto noté algo, era nueva aquí, no tenía idea de donde estaba, a pesar de que ya tenía casi dos meses viviendo aquí, aún no conocía bien todo este lugar suspiré cerrando los ojos tratando de contener mis ganas de gritar, saqué mi celular el cuál se apagó en el mismo momento en el que lo prendí, me había quedado sin batería.

—¡Toda mi vida es una mierda!—grité sentándome una vez más en el piso crucé mis brazos sobre mis piernas y apoyé mi cabeza en mis brazos mirando el piso estuve así unos minutos hasta que una voz hizo que levante la cabeza.

—¿Ya te calmaste?

————✨————

Casi me olvidaba de subir capítulo noooo JAJAJAJA en fin, ¿Que puedo decir? No tengo nada que decir realmente xd pero bueno, gracias por el apoyo que me están dando, realmente es muy importante para mí, no olviden que pueden seguirme para no perderse de ninguna actualización, y si no es mucha molestia por favor dejar su lindo voto, de esa forma la historia llega a más personas que pueden disfrutar de Dangerous al igual que ustedes <3

Gracias por leer💌

Mary🦋

Dangerous || Junior WheelerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora