Stars & Raindrops |I Chanmin I|

CAPÍTULO 20

Supernova

[...]

La mañana era fresca y los tenues rayos del sol atravesaban el cristal de la ventana, iluminando perfectamente la imagen de Jane sentada frente a ellos en espera de respuestas, mientras que los chicos ocupaban el sillón del otro lado.

- ¿Cómo es que ustedes dos se conocen? - preguntó Chris arrugando la frente al secarse el cabello con una toalla que llevaba alrededor del cuello.

- Él es el doctor del que te hablé tantas veces, hijo. - señaló a Seungmin - El que me ayudó con mi operación.

Chris lo recordó de inmediato y movió la cabeza de arriba a abajo, después de todo tenía mucho sentido.

- Mamá, ¿Porque no me avisaste que vendrías?

- Lo hice - su voz se volvió un poco más dura - pero no respondiste tu celular, ¿sabes cuantas veces te llamé? - reclamaba al cruzarse de brazos - tuve que hablar directamente a la estación de policías y cuando dijeron que estabas enfermo pensé lo peor, así que tomé el primer tren a Incheon - luego volvió la vista a Seungmin y relajó el ceño fruncido - pero veo que estuviste en buenas manos. - ahora su tono era más dulce - Gracias por cuidar de mi hijo doctor Kim.

Seungmin aún procesaba el hecho de que se acostaba con el hijo de su paciente, algo que le carcomía la conciencia, ya que Jane había sido muy considerada con él.

- No fue nada. - contestó ligeramente nervioso al frotar las palmas de sus manos contra sus muslos - Para ser honesto, Chris cuidó de mí antes así que solo estaba devolviendo el favor.

Era muy evidente que algo lo tenía inquieto y no era fácil engañar a alguien como Jane, quien tenía la experiencia de cuatro hijos que en más de alguna ocasión intentaron jugar con su mente.

- ¿Así fue? - preguntó curiosa por saber cómo es que eso paso, luego bajó la vista a la sudadera que usaba Seungmin y la reconoció a simple vista ya que ella misma se la había obsequiado a su hijo - La verdadera pregunta es ¿Cómo es que ustedes se conocen?

Los chicos se veían como si quisieran crear una conexión telepática que les permitiera hablar entre ellos. Seungmin lucía nervioso al contrario que Chris, quien se miraba completamente relajado.

El castaño le enviaba una mirada suplicante para que no hablara de más.

- De hecho - dijo Chris con un gesto revoltoso solo porque adoraba ver a Seungmin actuando de esa manera - es una historia muy divertida...

- En el hospital - interrumpió Seungmin preocupado porque el otro pudiera decir algo fuera del lugar - fue en la sala de emergencias, Chris tenía una rozadura de bala en el brazo.

Jane bajó los brazos sintiendo como su corazón se detenía un poco y luego abrió los ojos muy grandes ante la noticia.

- ¿Te dispararon? - exclamó horrorizada - ¿y no me lo dijiste?

Chris volteo a Seungmin con una expresión en la cara que decía: ¿Porque tuviste que decir eso?

- Mamá, no fue nada grave - quiso explicar, pero su madre ya se encontraba inspeccionando la zona.

Luego de muchos regaños y severas amenazas, Jane les preparó el desayuno.

Los tres pasaron una agradable mañana conversando cómodamente.

Jane habló del avanzado embarazo de su hija mayor, Sana y también de cómo Sunoo ya podía contar hasta cien. Mencionó como es que Hannah continuaba metiéndose en discusiones con sus maestros por cuestionar sus métodos de evaluación, a pesar de que estaba a punto de cumplir los dieciocho ella aún seguía siendo una chica de convicciones fuertes y un tanto rebeldes. Por otro lado, estaba Lucas, el menor, con quien no tenía ningún problema, salvo lograr que saliera de su habitación y hacerlo hablar más de tres palabras. Ni ella, siendo su madre, lograba entender cómo es que sus hijos eran tan diferentes.