CAPÍTULO 19

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El peso del silencio

[...]


La directora Park los veía con cierta satisfacción rendirse uno a uno, ninguno de ellos era capaz de seguirle el ritmo cuando se trataba de beber alcohol.

Lily y Sullyoon, estaban inconscientes sobre la mesa que reservaron para esa noche, mientras que Ryujin ayudaba a Yeji con su cabello al vaciar su estómago en el baño de damas; por otro lado, Heeseung aún se aferraba a ganar la ronda contra Seungmin.

Descuidadamente chocaron los vasos derramando un poco del líquido y lo bebieron de un solo trago. Sus gargantas adormecidas ya ni siquiera sentían el alcohol ardiendo en su interior. Heeseung golpeó el vaso de cristal contra la mesa y en ese mismo instante se desplomó sobre la superficie.

- Novatos - dijo Jihyo con cierta burla en su tono.

Seungmin se balanceaba en su lugar intentando mantenerse en equilibrio, pero en cuestión de segundos todo se comenzó a inclinar. Su cuerpo se sentía tan liviano como una pluma y ni siquiera era capaz de interponer las manos. Por suerte, Jeongin tenía la elegancia de llegar tarde a ese tipo de reuniones y al ver a Seungmin a punto de caer de su silla, lo sostuvo con firmeza.

- ¿Cuánto has bebido?

Seungmin apenas podía mantener los ojos abiertos, pero era sencillo identificar esa voz en cualquier parte.

- Jeongin - murmuró arrastrando la lengua y después soltó unas risitas sin sentido. - llegaste. - se colgó de su cuello.

Su aliento estaba impregnado con el olor intenso del alcohol, Jeongin le dio unas palmaditas en la espalda y después se sentó a su lado, sosteniéndolo para que no volviera a caerse.

- ¿Porque lo ha dejado tomar sin medida? - se dirigió a Jihyo - Mañana trabaja.

- Relájate - dijo despreocupada - a juzgar por su humor en los últimos días y tomando en cuenta lo rápido que empezó a beber, creo que era necesario para él. Ayer estaba discutiendo con el doctor Kang y esta mañana fue muy grosero con Nayeon, quiero saber qué le pasa.

Nada se le escapaba, además de que el repentino cambio en la actitud de Seungmin era muy notorio, pues pasó de sonreirle tontamente al celular a resoplar amargamente al no encontrar un nuevo mensaje de texto entre sus notificaciones.

- ¿Y por eso decidió embriagarlo a este punto? - reclamó con dureza.

- Bueno - respondió con cinismo frotándose la nariz - creo que se me ha salido de las manos cuando comenzaron a jugar con el alcohol.

- Aun puedo seguir bebiendo. - proclamó el castaño golpeando la mesa con la palma de su mano y luego se sirvió otro trago torpemente. Al llevar el vaso a su boca, Jeongin, quien no solía tomar, le arrebató el trago y lo bebió de inmediato sintiendo como el alcohol quemaba su garganta.

Un sabor amargo y luego dulce, algo así como el sabor de estar enamorado de tu mejor amigo en secreto.

Seungmin, lo vio arrugando la cara y se burló descaradamente de su amigo para después volver a recostarse en su hombro. Jeongin se encargó de acomodar su cabeza en una forma más cómoda y mientras lo hacía se distrajo acomodando su cabello desordenado. Lo hizo tan delicadamente, como si fuera lo más preciado en el mundo que Jihyo no pudo evitar notarlo.

- ¿Algún día podrás confesarselo? - preguntó con un gesto satisfactorio sabiendo que había dado en el blanco. Jeongin se quedó pasmado con los ojos en círculos. - ¿Qué? - alzó una ceja al volver a llenar su vaso - soy más perspicaz de lo que aparento ser - bebió todo el contenido de un solo trago.

Stars & Raindrops |I Chanmin I|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora