¿Estar solo es igual a sentirse solo? ¿Por que Jimin se sentía solo la mayor parte del tiempo? Vivía con su madre pero eso parecía no importarle a ella. ¿Realmente su madre lo quería? Parecía que Jimin no le importaba a nadie. Menos a ese Pelinegro...
Jimin se limitó a negar con la cabeza y no respondió, solo tenía en mente terminar ese plato lo antes posible y salir corriendo. Sentía sus mejillas arder, no sabía que decirle ¿de qué hablas mientras desayunas con alguien?
- ¿Le pusiste azúcar al café? – Jungkook rió en respuesta.
- No, me gusta negro y amargo. Es rico así.
- Dulce es más rico, es más suave.
- Por eso mismo prefiero sin azúcar.
- ¿No te gusta suave?
- Me gusta duro.
Jimin se atragantó otra vez.
- La textura y el sabor del café negro y sin azúcar es más dura que los demás. Por eso me gusta, es amargo y me activa por las mañanas.
- Entiendo – otra vez silencio. Jimin no aguantaba otro silencio.
- Los hotcakes estaban muy ricos, pero tengo que irme Jungkook – se paró de la mesa y tomó su tote bag
- Pero no has terminado tu frapuccino Jimin – Jungkook no quería que se vaya aún, quería preguntarle sobre su vida. Conocerlo un poco más, le causaba intriga la personalidad de aquel rubio de labios pomposos.
- Bueno creo que me lo llevaré, afuera debe hacer mucho calor y debo caminar bastante
- ¿Caminar a dónde? – se paró y caminó hasta él, quería acompañarlo hasta la salida de la cafetería
- Debo buscar a mi bebé – Jungook se detuvo.
- ¿Tienes un hijo? – le preguntó frunciendo un poco sus cejas. El no era sexista ni mucho menos, no creía para nada en la heteronorma. Pero podía jurar que su radar gay jamás se equivocaba y le sorprendía que Jimin haya sido la excepción a eso.
- Ujum, se llama Kero, es amarillo, peludo y está un poco gordito, pero está saludable lo puedo asegurar
- Ohhh ¿qué es? – Jungkook sonrió. Su radar gay jamás se equivocaba.
- Un gatito. Ayer escapó de casa y no regresó en toda la noche –Bajó la mirada y comenzó a jugar con sus dedos. Jimin no pudo evitar sentirse triste al recordar lo de la noche anterior.
- Es una pena Jimin. De verdad lo siento mucho – Jungkook sabía lo que significaba perder una mascota. Le había pasado con un perrito cuando niño y desde ahí no quiso volver a adoptar ningún animal- Espera, ¿Kero dijiste? ¿De casualidad lo llamaste así por Sakura Card Captor?
Jimin abrió sus ojos con sorpresa
- ¿También te has visto la serie?
- ¡Claro que sí! Aunque mi favorito era Spinel – Jungkook arrugó su nariz en una sonrisa pícara. Puesto que Spinel y Kero competían siempre el uno con él otro.
- Con razón no te gusta lo dulce - respondió Jimin. Spinel no resistía el azúcar.
Pensó que Jungkook le caía bien, su personalidad no estaba siendo como el imaginaba. No era nada desagradable y compartían su serie favorita en común.
- Me encanta esa serie. Oye Jimin – le llamó
- ¿Sí?
- No quiero sonar confianzudo, pero ¿te molestaría si te ayudo a buscarlo? En el centro de la ciudad hay más gente, quizás alguien lo ha visto.
- Pero estás trabajando Jungkook, no quiero molestar de verdad. -Jimin quería que lo acompañase. En el fondo sabía que era buena idea buscar a su gatito donde haya mas gente.
- Mi turno termina en media hora, si me esperas vamos juntos.
- Está bien, te esperaré.
- Ok, iré a cerrar la caja y vuelvo.
Observó como el pelinegro corría hasta detrás de la barra y comenzaba a teclear rápidamente en su teléfono para después abrir la caja registradora y comenzar a contar el dinero en ella.
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