Vidas Cruzadas

•••La presentación•••

*Victoria*

Después de varias semanas de ensayar diario para la competencia, finalmente llegó el día, desperté temprano, me bañe, vestí y peiné para ir al lugar donde sería y por suerte, me acompañaban Isaac y Abby. Llegando al lugar, estaban chicos de mi escuela de baile y la demás gente con la que competiríamos, pasamos un par de horas arreglando maquillajes, peinados y vestuarios mi equipo y yo mientras que Abby e Isaac solo estaban ahí para calmar mis nervios.

—¿Cómo es?—me preguntó Isaac hablando de mi vestuario.

—Es una falda larga y blanca, me cubre las rodillas y en la parte de arriba tengo mangas cortas que se inflan, como de princesa, también tengo un corset en el pecho—dije poniendo sus manos en el vestuario para que sintiera los materiales.

—Seguro te ves hermosa— dijo y lo bese en la mejilla dejando una mancha de labial que me hizo reír y le quité rápido con una toalla.

—Ugh son ridículos— dijo Abby burlándose haciendo una mueca de disgusto.

—Ahora sabes cómo se siente— conteste a su quejido, era hora de pasar detrás del escenario así que di los últimos toques a mi maquillaje y respire hondo—Bueno, listo. Deseenme suerte— Abby e Isaac me abrazaron fuerte y yo fui con los chicos de mi escuela. Atrás del escenario había un espacio GIGANTE simulando el espacio real del escenario así ensayé un par veces más mi solo, era parte de una obra de ballet llamada Giselle y cuando la espera terminó finalmente estaba yo sola detrás del telón viendo a la chica antes de mi hacer su baile.

Estaba yo en el centro del escenario con las luces brillantes iluminando mi alrededor y aunque esa luz cegadora no m e dejaba ver a la audiencia, si pude ver a Isaac y a Abby entre la multitud y en cuanto Abby me vio, le dio un golpe con su codo a Isaac para que supiera que era mi turno. La gente siempre admira mucho a los bailarines, no por lo que pueden hacer, sino por el "valor" que necesitas para hacerlo frente a las personas en un escenario pero la realidad es que ese valor no existe, la verdad es que cada que veo el telón frente a mi por un segundo siento que voy a vomitar, que voy a salir corriendo o que podría orinarme encima pero cuando la música suena se siente como un ensayo más, siento como al fin hago la mejor versión posible algo en lo que he trabajado y estoy orgullosa.

Baje del escenario volviendo a la realidad y los chicos de la escuela ya me esperaban, me felicitaban sin parar y hablaban sobre ir celebrar en la escuela cuando se acabara la competencia y a pesar de que todo eso sonaba increíble, me preocupaba un poco mi solo, era el primero que hacía en mi vida bailando y estaba muy orgullosa de mi trabajo, pero no sabía si mi trabajo fue lo suficiente para un premio, no sabía si me darían algo y fue una gran sorpresa para mi cuando en la premiación yo gané el segundo lugar; Era una alegría inmensa, no podía creerlo, no se sentía real ni siquiera cuando me levanté por mi medalla y no fue hasta que todo mi equipo me abrazó que me di cuenta de que había llorado de alegría, nunca había llorado de felicidad, se sentía como si el sonido lo escuchara bajo agua y mi cuerpo se aliviará de un estrés que ni siquiera sabía que tenía.

Salimos del lugar y todos se estaban reuniendo con sus familiares y amigos, cuando vi a Abby e Isaac entre la multitud, noté como Isaac tenía un ramo de flores en sus manos, era pequeño y hermoso, las pocas flores se juntaban gracias a un listón rosado formando un moño adorable.

—Sé que no es la gran cosa pero- —comenzó a decir cuando nos saludamos hablando de su regalo pero lo interrumpí con un abrazo de golpe que lo obligó a cargarme unos segundos.

—Es perfecto— dije cuando lo solté, aún con emoción.

—Lo hiciste increíble—comentó Abby.

—Seguro que sí— agregó Isaac y le di un beso.

—Bueno, yo ya me tengo que ir ¿los dejo en alguna parte o...? —nos preguntó Abby.

—No te preocupes, puedes irte— le respondí y nos despedimos.

—Oye...—comencé a decirle a Isaac estando solos—Unos chicos de la escuela quieren celebrar—

—Ah está bien, puedo alcanzar a Abby-

—Te estoy invitando a venir conmigo— le dije directamente.

—Oh ¿segura?

—Segura— dije poniendo su brazo sobre mis hombros. Fuimos apretados en el coche de uno de los chicos y cuando las chicas vieron a Isaac conmigo comenzaron a hacernos preguntas así que decidí decirles de manera casual lo que ellas ya sospechaban, se alegraron mucho por ambos y pasamos un buen rato. La noche fue tranquila, pusimos música, todos hablábamos y cuando se volvió un poco más tarde el grupo enorme que éramos se disolvió a parejas y grupos más pequeños, yo estaba en una esquina con Isaac hablando y tomando un poco, hasta que oí que en la música alguien había puesto "Shallow" de Lady Gaga y Bradley Cooper, algunas parejas comenzaron a bailar y se lo dije a Isaac.

—Perdón por no poder bailar contigo— dijo apenado.

—¿Y por qué no?

—Te pisaría los pies o chocaría con algo—respondió, alzando su bastón y señalando sus ojos, tome sus manos y guarde su bastón.

—Por eso siempre uno de los dos guía al otro—con eso él sonrió gentilmente y bailamos con los demás.