Vidas Cruzadas

|°-°-°Lazos Renovados°-°-°|

*Isaac*

Dos semanas después de la visita de papá, decidió invitarme a pasar un fin de semana con él y su familia, no me pareció mala idea ya que en los últimos días habíamos mantenido el contacto y me llamaba más seguido así que acepté. En la mañana del sábado, estaba en mi cuarto terminando de empacar para irme con papá y mamá entró a mi cuarto.

—Está listo—dijo poniendo algo en mi escritorio.

—¿Qué cosa?

—El regalo, lo envolví con papel verde ¿está bien?

—Uh sí, no creo que le importe la envoltura—cuando papá me hizo la invitación, pensé en llevarle a mi hermanastro Liam un regalo, tenía 6 así que solo pensé en algo que le gustara a cualquier niño de esa edad, le compre un camión de carga de juguete. Sabía que iba a estar bien, la esposa de papá sonaba como alguien amable en base a lo que él me había contado de ellos pero no podía evitar sentir nervios por conocerlos. Papá llegó temprano, salimos a la 1 de la tarde de mi casa y haríamos 1 hora de camino a la suya, el camino fue tranquilo y hablamos sin silencios incómodos.

—¿Todo bien?—me preguntó cuando estábamos a solo unas calles de llegar.

—¿Sí ¿por qué?— contesté con naturalidad.

—Llevas un tiempo jugando con tus manos

—No es nada

—Tranquilo, les caerás bien, Isabella es muy amable y Liam bueno...—se tomó una pausa antes de terminar.—¿Te agradan los niños?—me preguntó con una risa nerviosa

—Emmm...—comencé a decir nerviosamente y finalmente él río.

—Descuida, solo tenle paciencia

—Y... él sabe sobre... ya sabes—dije algo inseguro y señalando mis ojos.

—Claro que sabe

—¿Y?

—Solo prepárate para muchas preguntas, es solo un niño— Llegamos y al bajar del auto me recibió la esposa de papá con un abrazo sofocante.

—¡Al fin te conozco!—exclamó ella con emoción, aun abrazándome—Mírate eres idéntico a tu padre ¿Todo bien en el camino?—finalmente me soltó y pude tomar mis cosas.

—Eh sí—contesté amablemente.

—Liam ¿sabes quién es él?—Dijo papá a mi hermanastro que al parecer estaba ahí pero no oí respuesta de él—Es tu nuevo hermano — nos acercamos y yo me puse a su nivel.

—Hola...—saludó tímidamente.

—Hola ¿tu eres Liam no?— no hubo respuesta de su parte— Te traje algo, espero que te guste—le dije amablemente ofreciéndole la caja de regalo.

—Aww muchas gracias Isaac, no tenías que hacerlo—dijo Isabella con dulzura— ¿Cómo se dice Liam?—

—Gracias—respondió él un poco más animado pero aún con timidez.

—¿Por qué no le enseñas la casa a Isaac como dijiste? ¿está bien?—le sugirió papá

—Okey—respondió y tomó mi mano jalándome adentro con él, comenzó a decirme todo lo que había en la casa sin ser muy específico del lugar de las cosas — Arriba está mi cuarto y también el tuyo— dijo con un poco más de confianza, subimos y entramos a un cuarto que dijo que era mío, cuando encontré la cama me senté en ella y Liam se sentó a mi lado.

—Abre tu regalo—le dije amablemente, escuche como se sentaba en el suelo y rompía la envoltura con emoción. —¿Te gusta?— le pregunté con una pequeña sonrisa en mis labios.

—¡Sí, gracias!—grito con emoción y comenzó a abrir el empaque.

—¿Quieres ayuda?

—Sí ¿puedes cortar aquí?—me preguntó.

—Uh sí, dame un segundo—tomé de mi mochila algo con filo y volví a sentarme en el piso con él—Listo, ¿donde?—

—Aquí—respondió sin especificar más.

—Umm ¿por qué no pones mi mano donde debo cortar? ¿sí?—lo hizo sin preguntar más y lo ayudé, con el juguete afuera comenzó a apretar todos los botones y a moverlo por todo el cuarto.

—¿Ya viste? También tiene luces—exclamó emocionado.

—Um bueno yo no las puedo ver

—Entonces quítate los lentes—me respondió con simpleza y reí entre dientes por su inocencia.

—Bueno me los puedo quitar— comencé a decir quitándome los lentes— pero igual no puedo ver casi nada—

—¿Por qué?

—Porque soy ciego ¿sabes lo que significa?

—Tu papá dijo que lo eras, pero no entendí muy bien

—Significa que no puedo ver

—¿Por qué?

—Porque mis ojos no funcionan

—¿Están rotos?

—Se podría decir que sí

—Oh...—murmuró pensativo.

—Pero puedo hacer muchas cosas, solo necesito un poco de ayuda

—¿Pero cómo puedo enseñarte mi camión?

—Pues la mayoría de las veces, uso mis manos para saber cómo lucen las cosas—tomó mi mano antes de decir otra cosa y la puso en el juguete, guiando mis dedos, describiendo todos los detalles del juguete.

Cenamos papá, Isabella su esposa y Liam, todo resultó tranquilo y sin problemas, Isabella era muy amable y no le incomodaba en lo absoluto mi ceguera, al igual que Liam, una vez que le explique lo que era, él se adaptó a mis necesidades, aunque había unas veces en las que lo olvidaba pero me parecía gracioso.