El cielo estaba despejado. Los rayos de sol brindó calidez en cada esquina del Pueblo Berteno y una ligera brisa paseaba por las calles del lugar. Era un día perfecto para realizar cualquier actividad al aire libre, sin embargo, los miembros de la banda Bronzone tenían asuntos más importantes que realizar un pícnic en el viejo Árbol Troll.
Rhonda entró al pueblo con pasos acelerados. Avanzó por las avenidas con una enorme energía, a pesar de llevar varios días sin tomar un buen descanso. Algunos bertenos se sobresaltaron; sus rostros expresaron disgustos y lanzaron una que otra grosería. Los pasos de Rhonda provocaron una cortina de tierra que desaparecía en un abrir y cerrar de ojos.El Pueblo Berteno no había cambiado en absoluto. La estructura de los edificios no contaban con ninguna armonía como los capullos de Villa Pop y sus estilos eran desarreglados. No obstante, el lugar desprendía una aura de alegría similar al de los trolls; algunos empezaron a cantar (aunque desafinaban de vez en cuando) a fuera de un negocio de comida rápida, y otros bailaron cerca del centro de la ciudad. Podía notarse la gran evolución en la actitud de los bertenos.
Floyd admiraba la vibra que se proyectaba, pero le preocupaba más la imagen que sus hermanos presentaban. Clay y Spruce tenían una mirada cansada, sus brazos temblaban cuál gelatina, y un color verde pistache decoró todo su rostro. Tal vez era por estar tanto tiempo dentro de un vehículo fuera de control o por la "sofisticada gastronomía " que su hermano Jonh Dory se ofrecía a hacer en los breves descansos. No importaba cuál era el motivo, era seguro que tenían muchas ganas de vomitar.
Rhonda subió por los gigantescos escalones, formando más violento. Floyd salió de la sala cuando los rostros de sus hermanos parecían no resistir más. Se agarró del asiento del conductor con fuerza. Era como estar en los primero lugares de una montaña rusa y estuvieras por tocar el cielo, para caer en cuestión de segundos. El transporte viviente dio un tremendo salto en el último escalón; entrando a la sala con un gran estrépito.-¡Grrr!-Rhonda levantó las patas delanteras, como si celebrara el hecho de llegar al castillo sin quedarse dormida a mitad del camino. Bajó la pata unos segundos después y sacó la lengua mientras ponía esos ojos adorables que tanto amaba su dueño.
Los reyes se detuvieron a mitad de un inocente, pero apasionado beso. Miraron a la criatura que movía su cola con tanto entusiasmo y algunos trolls salían de su interior.
-¿Qué rayos está pasando?-exclamó el rey del los Bertenos que, a pesar de ser un niño, su voz sonó profunda, igual al de un adulto.
-Perdón -dijo Jonh Dory sacudiendo su chaleco-. Prometo no volver a entrar así.
El resto de los hermanos salieron a paso apresurado. Clay y Spruce tomaron un tiempo antes de volver a la acción; el verde en su rostros bajaba con lentitud mientras sus bocas se esforzaban por no sacar el desayuno.Jonh Dory le daba felicitaciones a su gran amiga con cumplidos mientras Floyd miró a su alrededor algo inquietante.
La reina Brindget se acercó de inmediato. El brillo en sus ojos se apreció con más claridad con cada paso que daba. Sin embargo, su expresión cambió al notar que su mejor amiga Poppy no estaba en el grupo, pero supo disimularlo antes de que cualquier hermano se diera cuenta.
Se arrodilló ante las pequeñas criaturas. Llevaba un vestido rosa y una capa de tela roja con bordes blancos. Sus zapatos tenía el mismo tono de su vestido, su peinado se limitó a dos colas y en medio de ambas llevaba una pequeña, pero brillante corona.-¡Chicos!- Volvio a ver a su marido con una gran sonrisa-. Mira Grissy, son los hermanos de Ramón.
-¿El que interrumpió la boda?
Jonh Dory reía nervioso mientras se rascaba la nuca y miraba sus pies, como si tratara de evitar las miradas asesinas de todos (y la verdad, así era).
La bertena de piel lila se percató de esto.
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Lo Siento [Terminada]
FanfictionDespués de salvar a Floyd, los hermanos de Ramón por fin están juntos, pero un nuevo desafío amenazaría a los miembros de la banda Brozone de una manera que ni ellos pueden imaginar. Una última prueba para demostrar la fuerza de sus lazos como herma...