°•☆ ᴬ ᵐⁱ ᵐᵉʲᵒʳ ᵃᵐⁱᵍᵃ... ᵍʳᵃᶜⁱᵃˢ ☆•°

③② 𝘚𝘦𝘤𝘳𝘦𝘵𝘰𝘴 𝘺 𝘳𝘦𝘷𝘦𝘭𝘢𝘤𝘪𝘰𝘯𝘦𝘴.

— Ya me tiene harto. Se cree que porque tenemos la misma sangre puede manipularme a su gusto. — las quejas de mi amigo Beomgyu eran demasiado altas. Hiyyih y yo solo lo observábamos caminar por toda el área de mi ordenada habitación mientras ambas estábamos sobre la cama. — Quiero que se largue de la casa, mi abuela es más madre de lo que ella fué.

— Eres su hijo y ella tu ma-má. — Hiyyih dijo a mi costado y me reí.

—¿Qué dijo fantasmina? — Beomgyu se detuvo, pisando los retazos de telas que quedaron de la noche anterior, en donde intentaba diseñar un vestido.

— Que eres su hijo y ella tu ma-má. — mi cabeza se ladeó para ambos lados, imitando en lo más posible las expresiones y voz de Hiyyih.

— Sabía que nunca te agradé, rubia. — gritoneo, mirando a dirección contraria en el que se encontraba mi amiga. —  La verdad aquí es que la supuesta “Señora, Choi”, aquella que se hace llamar mi madre y la que presume de un excelente ejemplo a seguir, no es nada más que una víbora. Mi abuela viene desde HanMinJok, con dolores de espalda y cansancio, para ver que su hijo y nieto se encuentren bien y esa mujer siempre la trata mal, estoy cansado. Mi padre aún no piensa dejarla.

— Es que tu mamá es su primer amor. Esos son difíciles de olvidar. — Hiyyih volvió a comentar desinteresada. Tuve que repetirle a Beom lo que dijo.

La señora Choi, a quien no conozco en persona y no sabría cómo describirla personalmente, molestaba con solo su presencia a Beomgyu desde hace varios años. Beom no lo notaba de pequeño hasta que empezó a crecer y ser consciente de su alrededor, su madre tenía actitudes tóxicas y violentas con su marido y suegros, hasta cuñadas.

— Bahi, la primera chica con la que estuve ya la olvidé. — se sentó sobre la cama bruscamente. — Aparte, eso no sería amor, jamás amaría a alguien que me hiciera daño, debería estar enfermo. Es más sano buscar mi propia felicidad, verdadera, no falsa e hipócrita. No me importa si esa mujer me dió a luz, la desconozco como madre.

A diferencia de Hiyyih, yo me quede pensando en lo que dijo y sintiéndome identificada por el hecho de aborrecer a quien te dio a luz, ¿eso era normal? Debía serlo.

— Que mal mientes, Beomgyu, todos saben que aparentas estar enamorado de todas esas chicas. Un pajarito me contó que antes de todas ellas hubo alguien. — Hiyyih siempre tuvo una vida perfecta por lo que jamás se sentiría representada por algo que Beom o yo dijéramos y no por eso era una mala persona, pero si ¿insensible? Podría decirse que si.

— Suelen decirme que yo soy un entrometido y que muy pocas veces guardo secretos, no debo ser el único si uno de mis amigos fue el que te lo dijo. — Contestó Beomgyu serio, echado boca arriba sobre la cama, mirando el techo blanco, luego de que le repitiera lo que Hiyyih dijo. — Bien, no superó a mi primer amor pero, a diferencia de mi papá, esa persona no me hizo daño. — soltó, queriendo sonar desinteresado por el tema.

Más tarde, esa noche, Hiyyih me confesó que fue Taehyun quien le contó ese secreto en una de sus citas, luego de rogarle la razón del porqué el peli marrón era tan frío en todas sus relaciones. Ella creyó que se trataba de una chica que lo rechazó de una manera humillante o que lo dejó, pero jamás imaginó que se trataba de un chico al cual Beomgyu se le declaró pero nunca espero que le contestara ya que -tras decirlo-, huyó y al día siguiente fingió demencia.

No era por ser chismosa, bueno si lo era  pero quien no quisiera saber, ¿quien fue el chico que enamoró a Beomgyu y no llegaron a ser nada?
Eran preguntas que no me dejaban dormir, ni mi mejor amiga sabía la respuesta porque Taehyun no le había contado nada más.