COUNT ON ME

Capítulo 35

BECKY

Mi cuerpo me está matando y sin duda necesito una ducha, pero en vez de quedarme allí una vez que la práctica acaba, hago todo lo contrario y salgo de allí lo más rápido que puedo.

La única regla del entrenador es, tanto para los entrenamientos como para los partidos, siempre mantener la cabeza en el juego, pero esta noche, ahí en el campo, fue el último lugar en el que mi mente estuvo. Hice todo lo que me dijeron y me partí el culo jugando, pero mi cabeza y corazón estaban definitivamente en otro lado.

Los había dejado con la chica a la que estoy a punto de ir a ver. La chica a la que en el momento que vea, voy a tirar lo más cerca posible de mí y pedirle que sea mi novia.

Mientras tiro mis cosas en el asiento trasero, saco mi teléfono de mi bolsillo trasero y lo deslizo ya dentro del auto. Hay dos notificaciones perdidas y sin siquiera mirar, espero que sean de ella.

Me muevo por la pantalla de mi teléfono hasta que llego a los mensajes, y veo que ambos son de Richie. En contra de mi mejor juicio los leo y al igual que todas las otras veces que he tenido algún contacto con él, me enferma.

¿Dónde diablos estás?

Becky, contesta el maldito teléfono. Necesito que vayas a la tienda de licores. Se nos acabó.

Es en momentos como este que recuerdo quién soy en realidad y por qué no suficiente para ella. Que a pesar de todos los cambios que he estado tratando de hacer para mí y para ella, sigo siendo una imbécil inferior.

Richie pidiéndome que conduzca y le consiga alcohol sucede mucho más de lo que quiero admitir. Siempre está demasiado borracho para ir él mismo y honestamente, estoy feliz de eso, al menos, es inteligente. Es tan a menudo que voy, que el chico de la tienda de licores ni siquiera me pide identificación. De todos modos, tenía eso cubierto con una identificación falsa. Nunca la usaba porque solía beber con él la mitad del tiempo. Era un ganar-ganar para los dos.

Al menos lo era hasta ella.

Ahora, ver estos mensajes me enferma. Sabe muy bien que tengo práctica después de la escuela, aunque con la bruma en la que siempre está, no debería estar demasiado sorprendido de que no lo recordara. Solo sé que, si no hago una aparición brevemente, al menos por mensaje, va a estar aún más loco cuando camine a través de la puerta.

No me he emborrachado en más de dos semanas. No tiene ningún punto hacerlo. Vivir con Richie me hace querer beber a veces, pero no lo hago. Quiero ser mejor que eso. Si sigo con lo que he estado haciendo, solo voy a terminar exactamente como el tipo que me manda mensajes ahora y quiero ser mejor que eso. Siempre lo he querido. Es solo recientemente que lo estoy viendo.

Gracias a ella.

Cálmate, hombre. Acabo de salir de la práctica.

Esa va a tener que ser una respuesta lo bastante buena porque tengo un lugar en el que estar y definitivamente no llenaré el auto con licor. Esto supera todo eso y ni siquiera mi hermano va a alejarme de ella. Sucedió una vez. No va a hacerlo de nuevo.

Espero unos minutos para que responda, pero cuando no llega nada, voy a los mensajes de Freen de antes y escribo uno rápidamente. Podría simplemente presentarme en su puerta, pero me da la sensación de que podría no apreciar demasiado eso. No parece de ese tipo y quiero hacerlo bien.

Acabo de salir. Voy en camino <3

Por qué demonios puse el corazón al final del mensaje es un misterio, pero no puedo quitarlo e incluso si pudiera, no creo que quiera. Es extraño verlo, porque es realmente la primera vez que recuerdo haberlo hecho. Estoy bastante seguro de que la mitad de las chicas con las que salí habrían matado por algo como esto de mí, pero nunca me ha importado.

Es solo cuando llega su respuesta unos segundos más tarde que estoy aún más feliz de lo que estaba cuando accedió a verme.

Hasta pronto <3

No estoy segura de qué está pasándome, pero no puedo dejar de mirar el mensaje y el emoticón al final. He visto la cara feliz antes, es en realidad una de las cosas que me gusta más cuando estamos enviándonos mensajes, pero con el corazón, algo nuevo se agita dentro de mí. No puedo dejar que los mensajes terminen allí, tengo que decir más. Sé que es un hecho que voy a poner la llave en la ignición, arrancar el auto y conducir, pero no hasta que haga otra cosa primero.

No lo suficientemente pronto. Te echo de menos.

Pasando a través de mis emociones, lanzo mi teléfono en el asiento y me centro en el camino delante de mí. El camino que me llevará al único lugar en el mundo, en este segundo exacto, en el que quiero estar más que nada.

Con ella.