23. 4 meses: ''El rey de las Vegas''

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Cuando Leonel me abrió la puerta yo entre hecha una furia, el ambiente era fresco, su habitación de trabajo estaba repleta de papeles y libros acomodados perfectamente por abecedario en una estantería, yo me frote las sienes y me acerque a una silla de madera color café la cual estaba enfrente de su Tablet y sus computadoras, yo eleve mi vista para mirarlo y el estaba tratando de descifrar que tenia.


-Te voy a explicar el odio de mi hacia Danny- dije apretando los dientes, el se sentó y me miro esperando a que prosiguiera.


-es la peor persona que puedas conocer amor, es un egoísta, un tacaño, un ególatra, nunca podrás competir con el porque siempre tratara de ganarte, estoy súper enojada, todo estos años le ha querido hacer daño a mi familia y eso no lo  voy a permitir, ¡se cree el rey de Las Vegas cuando no lo es!, cree que todos pueden temerle por su enorme y gordo cuerpo cuando en verdad solo esta hecho de eso, nunca te lo he dicho porque el tiene el quiebra el restaurante de mis primos, todo este tiempo el ha estado fingiendo que mi familia le debe y mis primos nunca le pagaron porque sabían que no le debían nada. Daniel le tiene mucho odio a mi familia, porque mi familia y la suya no pudieron competir en el dinero y su familia tomo venganza mi amor, estoy harta y ahora hizo que Henley y Richard se pelearan, ¿por qué? Porque ese gordo le dijo cosas a Richard que no son ciertas y que le tiene la contra  Henley- dije terminando para respirar, me trate de tranquilizar por el bebe, estaba llorando, nunca antes había llorado de coraje y esta vez tenia bastante coraje y sea lo que sea Leonel estaba tratando de acomodar todo lo que le había dicho. Vi como sus ojos se encontraban con los míos y yo no tarde en levantarme hasta que Leonel me siguió y me tomo de la cintura.


-escucha, mi amor, te entiendo y te voy a apoyar, te amo pequeña ven aquí- dijo abrazándome fuertemente mientras yo suspiraba y besaba su hombro.


-no me dejes sola de nuevo- dije susurrando, el me miro y negó con la cabeza para besar mis labios y abrazarme mas fuerte, me separe de el y baje las escaleras para encontrarme con una Henley dormida en el sofá.


-pásame mi manta para dormir amor- le dije mientras estiraba mi brazo para que pudiera alcanzarla hasta que sentí que Leonel se comenzó a reír, yo fruncí el ceño y lo mire.


-es gracioso que aun teniendo esta edad de veinte años sigas teniendo una mantita- dijo, yo rodé los ojos riendo y se la quite de un tirón para tapar a mi prima, tome un papelito y le escribí una nota de que pronto volvería que me esperara para prepararle al menos algo de cenar.


Salimos de la casa y subimos al auto de Leonel para dirigirnos a la casa de Daniel, iba recargada en la ventanilla viendo la noche, las estrellas eran hermosas y hacia una ventada de aire súper fresca, cerré mis ojos mientras escuchaba la radio con un poco de Tanlines de All of Me, me concentre en la música y de repente recordé que tenia algo mas que decirle a Leonel, eran como realizaríamos las invitaciones del baby shower, pero aun no sabia el sexo de bebe, Leonel estaba seguro que seria niña y yo creía que seria un niño, yo sonreí y acaricie mi vientre un poquito abultado.


-¿qué piensas mi amor?- dijo, yo sonreí y mire el camino de rocas de nuestra privada que aun estábamos saliendo, la privada era súper larga, sonreí y mire hacia la entrada ya íbamos hacia la carretera para ir hacia la casa del tal Daniel, seguí recordando aun cuando Marie trato de desquitarse conmigo y yo me burle de ella que tenia silicona de más, ahí no aguante y solté a reír, Leonel me miro y coloco su mano en mi frente.

"Te enseñaré a amar" ®   ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora