CAPITULO 28

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Jiang Wanyin se encontró de repente en un lugar desconocido, rodeado por una densa niebla que dificultaba su visión, cada paso que daba resonaba de manera extraña, como si el suelo mismo se revelara contra su presencia.

De repente, una figura emergió de la bruma, y el corazón del Jiang dio un vuelco, a unos pocos pasos se encontraba él mismo, estaba de pie, mirándolo fijamente con unos ojos que carecían de cualquier emoción. La sonrisa en su rostro era inquietantemente similar a la suya, pero no había rastro de sentimiento en ella.

—¿Dónde estoy?— pregunto la emperatriz Jiang, pero su reflejo no se inmutó. En cambio, dio un paso hacia adelante, y la niebla lo siguió obedientemente, como si estuviera bajo su control.

—Este lugar es un reflejo de tu interior—, dijo su otro yo borrando su sonrisa, su voz resonando de manera extraña. —Un rincón perdido en la neblina de tus propios pensamientos y emociones.

Jiang frunció el ceño inconscientemente, tratando de comprender las palabras de su otro yo. Sin embargo, antes de que pudiera formular otra pregunta, el otro le pregunto.

—Wanyin ¿eres feliz?

—por supuesto que soy feliz ¿Por qué preguntas si soy feliz?.

Jiang Wanyin sonrió satisfecho — deberías de volver ya somos libres, vive una vida prospera, aprovecha esta oportunidad de volver a ser feliz, ama a tus dos hijos con todo tu corazón.

—tu no vendrás conmigo, tú y yo somos uno —extendió su mano para que su otro yo pueda darle la mano — si me voy yo solo me sentiré afligido e incompleto.

—si voy contigo sufrirás y te arrepentirás por haberme llevado junto a ti.

— si estamos unidos podremos sobrellevarlo, el sufrimiento y arrepentimiento es parte de la vida.

Su otro yo le dio la mano — te arrepentirás — de esta manera sus otra parte de su alma se volvió uno como lo fue siempre.

La niebla se disipó momentáneamente para revelar la figura de su madre, Madam Yu con una sonrisa cálida y amorosa en su rostro —a-yin, mi querido hijo— dijo con dulzura, acurrucándole en sus brazos —Naciste con poderes extraordinarios porque llevas la esencia de nuestra familia, un linaje bendecido por antiguas fuerzas — Jiang Wanyin moqueaba de tanto llorar pensando que era un monstruo — Eres especial, desde el momento en que llegaste a este mundo, supe que serías fuerte y valiente. Estoy feliz de que seas mi hijo.

Jiang Wanyin sintió una mezcla de gratitud y nostalgia. La escena se desvaneció lentamente mientras la niebla volvía a cerrarse a su alrededor. La voz de su madre resonó en la oscuridad—No olvides quién eres. Eres el portador de la piedra mágica. Tu fuerza no proviene solo de tus habilidades, sino también de tu corazón y tus emociones.

Mientras la niebla se cerraba nuevamente a su alrededor, otro recuerdo emergió de las sombras. pero esta vez, en lugar de su propio recuerdo, se desplegó ante él una escena ajena pero inquietantemente familiar.

Jiang observó en silencio mientras Lan Xichen, una figura noble y apacible, Se encontraba en el Jardín de Loto, un lugar que conocía bien, llegaba una espada en mano, lo que llamó su atención de inmediato fue la expresión de desesperación y miedo que desfiguraba el rostro normalmente sereno de Lan Xichen. Cada uno de sus pasos era firme pero cargado de pesar mientras se acercaba al lugar donde Jiang Wanyin realizaba su danza.

Jiang Wanyin, ajeno a la presencia de Lan Xichen, continuaba moviéndose grácilmente al ritmo de la melodía que solo él podía escuchar. Sin embargo, al notar la sombra que se cernía sobre él, detuvo su baile y se volvió hacia el intruso.

QUIEN ES REALMENTE LA EMPERATRIZDonde viven las historias. Descúbrelo ahora