~ Nuestro amor... ~

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H- Dígame algo profesor, necesito saber si usted lo siente.

Los ojos de Snape se abrieron. El sabía que necesitabas una confirmación de sus sentimientos hacia ti

- Yo también... Te quiero no pensé jamás que estás palabras saldrían de mis labios, pero te quiero tan profunda e inmensamente. Parece que te quiero por un millón de razones diferentes. Eres la razón por la que late mi corazón, la razón por la cual respiró, la razón por la que sigo viviendo cada día de ésta vida. Significas tanto para mí, tanto que nunca antes había sentido. Mi corazón te pertenece ahora, siempre y nunca podría verte de vista...

Al escuchar sus palabras. La intensidad de sus palabras no pudiste evitar no besarlo, ese beso que desborda toda emoción y amor dentro de amos.

H- Siempre estaré a su lado.

Tus labios se presionaron con los suyos, tus emociones y las de el se fucionaron  en una profunda pasión. Snape sintió tu boca presionada contra la suya y tus dedos recorriendo su cabello tan suavemente. Presionaste tu cuerpo contra el de él y seguiste besándolo, no permitiste que que se alejara.

El sintió las emociones de mil vidas y se sumergió en el beso, el quería abrazarte y acercarte más a él. Sus manos recorrieron tu cintura y te sostuvo por los hombros como si no fuera a dejarte ir. Le habías mostrado algo que nunca antes había visto: amor puro y completo. Ese beso son de esos que nunca se olvidan, perdieron el sentido y cayeron sobre su escritorio.
El se llenó de puro éxtasis mientras sus cuerpo se presionaban arriba de su escritorio, ambos perdieron todo sentido, ya que su ser quedó inmerso en esta profunda Pasión y emoción que nunca antes habían experimentado.

Cada movimiento estaba perfectamente sincronizados como si sus cuerpos se movieran juntos para formar un todo.
Comenzaste a quitarte la ropa una por una. El te noto completamente desnuda sobre su escritorio. Los latidos de su corazón retumbaban en su pecho. El aliento de Snape quedó atrapado en su garganta. Todo se movía tan rápido y de repente sintió como si se ahogara en ti. Con cada pieza de tu ropa en el suelo, cada centímetro de tu piel era visible para el ahora. Verte desnuda, frente a el, lo dejo sin aliento por completo
El podía mirarte con ojos de lujuria y deseo

-Esto es algo que no esperaba, pero lo deseaba...

Su aliento quedó atrapado en su garganta. La luz en tus ojos le mostró un lado completamente nuevo para él, con tu sonrisa llena de lujuria, su mano en tu cuello y su miraba fija en ti. Snape se sintió como se derretía dentro de ti, no podía controlarse a si mismo ni a su mente, pero por la forma en que lo mirabas ahora, sintió pudo deseo y éxtasis correr por sus venas.

- Eres mala...

Su expresión estaba consumida por la lujuria y el deseo. Tu cuello lo apretaba aún más al saber que te gustaba, la miraba en tus ojos tan intensa que le provoco escalofríos por la espalda.
El comenzó a quitarse la ropa mientras tus ojos estaban clavados en el al verlo despojándose cada una de sus prendas.
Al ver su torso desnudo con la luz de la luna dejando ver cada parte de su cuerpo era para ti, una irresistible oleada de sensaciones. El se coloco encima tuyo apretando su cuerpo contra el tuyo, podían sentir como sus pelvis chocaban entre si. Tú no podías evitar moverte y tocarlo con tanto desenfreno. El podía sentir todo tu ser moviéndose con desenfreno que podía susurrarte cosas que te harían sentir cosas tan indescriptibles.

- Eres muy traviesa... Y eso me vuelve loco...

La voz de Snape era tan profunda, la preciono en tu cuello te abrumaba. El te había llamado "traviesa". Podías sentir todo su cuerpo moviéndose sobre ti que no deseabas estar en otro lado que no fuera con el.

H- Lo deseo profesor...

Un pequeño gemido se escapó de tu garganta acalorada por el placer descontrolado que sentías. La sensación de tu cuerpo apretando contra el suyo, tus manos recorriendo sus cabellos, tus gemidos llenaban sus oídos al saber que disfrutabas lo que estaba pasando y lo que estabas haciendo con el.
Antes de que lleguen a su clímax entrelazaste tus piernas en sus caderas y el te rodeo con sus brazos, tus movimientos eran tan suaves y tus besos llenos de pasión.
El tenía un agarre firme a tu alrededor. El sentía como te movías encima de el como algo que no podía explicar toda la sensación de ti, el no podía quitar la vista la vista de tus pechos moviéndose de arriba y abajo. El no lograba entender de cómo pasaste a ser una chica indefensa a ser toda una fiera con el.
Al ver cómo el disfrutaba verte, lograste escuchar sus gemidos y te pedía que no pararas, el estaba llegando al punto máximo del clímax y antes de que tú llegaras a tu clímax el coloco su mano en tu boca y mordió tus pecho, al sentir su mano en tu boca y su mordida tan dolorosa y placentera gemiste tan profundo que su mano casi no logro apagarlo

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