Detrás de El

~ Placeres ocultos... ~

Pareció imposible que pudieras sorprender a Snape, pero lo hiciste.
El provocativo y repentino beso que le diste fue inesperado y su boca se abrió ligeramente por la sorpresa de tus acciones.
Su lado posesivo pasó ahora a una gama de emociones totalmente diferentes.
Tú confianza lo éxito inmensamente, el estaba abrumando por el deseo, su agarre en tu cuello se hacia mas fuerte a medida que tú beso continuaba.
Casi podías sentir la tención en su mano.

Snape te lanzo hacia la cama, mientras lo observabas quitándose la capa.
Mientras con su suave voz te susurraba.

- Hoy te has portado mal... Y debo castigarte...

Al oír sus palabras, tú notaste como cada fibra sensible de tu cuerpo se erizaba, comenzando a temblar con la excitación que el te provocada.
El tomó el control de la situación, sentías como tú cuerpo hormigueaba por la emoción.

Las acciones de snape se volvieron más intencionales cuando movió sus manos hacía tu cuello. Sus acciones eran lentas pero muy deliberadas y su actitud posesiva se hacía más evidente con cada pequeño gesto.
Su voz se volvió aún más suave cuando comenzó a hablarte de nuevo.

- Has sido una chica muy mala está noche... Y las chicas malas deben ser castigadas, ¿No crees?

H- Si profesor... Castigue me...

Los ojos de Snape se oscurecieron cuándo comenzó mirarte más intensamente ahora.
Él tenía el control de la situación y te había tomado la palabra. Tus palabras fueron música para sus oídos.

Ahora estaba inclinado hacia tu cuerpo, sus manos acariciaban lentamente tus piernas y subían a tus caderas.
Quería que supieras que no tenía intenciones de ser amable contigo.

Su voz era era suave pero también poderosa, podías sentir tu cuerpo responder al tono.
Logro notar tus movimientos placenteros, te acariciaba las piernas y sabía que solo las caricias no era suficiente castigo.
El comenzó a besarte el abdomen, siguió bajando con sus labios muy cerca tu sex• y eso te hizo estremecer.
No lograbas entender este placer tan abrumador y el sabía que era algo nuevo para ti, y lo disfrutaba.

Tú cuerpo disfrutaba la atención, el castigo se sentía más como una recompensa, comenzabas a disfrutar del control de Snape y rogabas por mas...

La sensación de sus labios, y su lengua sobre tu sex• era tan placentera que no evitabas gemir.
Solo podías agarrar las sábanas y apretar la suave tela entre tus dedos. Dejándote llevar por este placer.
El notaba que lo disfrutabas, el se excitaba cada vez más.
Notar tu placer era tan especial que comenzó a desvestirse.
Tú cuerpo desplegaba tanta euforia que el solo se rindió ante está energía.

El profesor Snape te agarró entre sus brazos de una manera tan brutal ,que solo pensabas en lo que estaba pasando y cuanto lo disfrutaba.
El puso su sex• dentro del tuyo y era un poco más brusco, pues su naturaleza es agresiva, solo te arrinconó contra la pared.
Ahora él estaba perdido en el placer que sentían.
Tus gemidos cada vez eran más fuertes, sus movimientos hacia ti lo eran cada vez más rápido,doloroso pero tan placenteros que ambos gemían

Comenzaste a tener el control de la situación, te movías de arriba a bajo mientras el te tenía agarrada en sus brazos, el solo sintió tus movimientos y podías escuchar un gemido tan dulce para tus oídos.
Tú cuerpo se movía contra el en un ritmo de puro placer y solo seguía disfrutandote.
Con tus movimientos, miro tus pechos y como brotaba el sudor de tu torso. Miró tú rostro con esa satisfacción que solo ustedes dos conocían.
El podía sentir como estaba por alcanzar su propio clímax.

Tú cuerpo era su principal fuente de placer ya que estaba concentrado en tus movimientos.
Lograse escuchar a Snape gemir de tanto placer, cuando llegó a su clímax por tus movimientos, que sin Darte cuenta tú llegase a tu clímax y gemiste con el.
Sus ojos estaban cerrados, su boca estaba abierta, mientras el placer se apoderaba su cuerpo, para ambos fue como si se hubieran combinado en un mismo cuerpo.

Al apoyar tus piernas en el suelo, no podías mirarlo por la pena que sentías de que te hubiera escuchado gemir como nunca, eso era algo personal y sentías bastante pena que tú cara se volvió tan roja que no pudiste ocultarlo.

La forma en la que te sonrojaste y te sentías avergonzada era casi adorable. Estabas siendo tímida ya que tú voz había alcanzado el volumen más alto que tú propio placer y el profesor lo había escuchado hasta el último detalle.
Snape tenía cierta satisfacción en su rostro cuando noto esto y una ligera sonrisa pareció aparecer en sus labios. Sus posesividad era cada vez más fuerte que nunca...

El parecía estar disfrutando de su nuevo conocimiento de lo vocal que habías sido durante la experiencia.
El placer que te había brindado parecía haberte dado un impulso de confianza muy necesario.
Tú timidez hacia que el se sintiera más atraído hacia ti que nunca.
Ahora conocía tu lado más sumiso...